Frente a los despidos y suspensiones en la industria, la ministra de Trabajo Sonia Castiglione describió el escenario como “dramático” y lo comparó con la pandemia, donde “hubo respuesta positiva de las empresas”. Para la funcionaria el contexto actual es peor, si bien “la mayoría de las empresas están haciendo el mayor esfuerzo posible”. Atribuyó al enfriamiento de la economía la crisis en las ventas, que “tiene un efecto dominó”, porque deriva en despidos y menos circulante que afecta al comercio y los servicios. Todavía no hay certezas de las políticas que llevará adelante la Secretaría de Trabajo de Nación.
Río Grande.- La ministra de Trabajo Sonia Castiglione expuso por FM La Isla un escenario “dramático”, a su criterio peor que en la pandemia, en un contexto de “incertidumbre por cómo se van a ir desarrollando los escenarios en el futuro”, dijo.
“Tenemos un gobierno nacional que está proponiendo un rumbo, no está teniendo el consenso que espera y es bastante difícil estar de acuerdo con muchas de las medidas. En lo laboral no se sabe qué rumbo van a tomar las leyes laborales y no veo ni un solo tiro para el lado de los trabajadores”, manifestó.
“Hay que estar con la mayor sintonía posible con la realidad, para poder ayudar en todo este proceso y que las cosas salgan lo mejor posible, porque siempre el más perjudicado es el más débil. El empleador claramente necesita de la fuerza laboral, pero hay mucha más oferta que demanda de las empresas, por lo cual siempre el más débil es el trabajador. El Estado está para equilibrar estas fuerzas, las oportunidades y las condiciones. Sin embargo el desequilibrio es una constante y en contra del trabajador”, lamentó.
“Quizás sea buena una reforma laboral en algunos términos, pero hay que trabajarlo mucho, analizarlo muy bien, con la participación de los actores necesarios. La incertidumbre es la palabra que más se acerca a lo que está pasando y la angustia más grande siempre es del trabajador”, definió.
Respecto de los despidos y suspensiones en todas las ramas de la industria, lo atribuyó a “un enfriamiento de la economía que es insoslayable, las ventas han caído en todos los sectores a nivel país y esto tiene un efecto dominó. La industria promovida tiene producción de bienes de uso y, ante la falta de ventas, no hay otra forma de generar ingresos y se generan las suspensiones de trabajadores, los despidos, la no renovación de contratos. Toda esa masa salarial que se volcaba en el consumo local deja de volcarse y esto afecta al comercio y a los servicios. Hay menos circulante y esto ya pasó en los ’90, y pasó en el gobierno de Macri”, recordó.
Aseguró que “el diálogo con las distintas empresas es permanente, preguntamos cómo están las cosas, cuál es la proyección y la planificación que tienen dentro de las empresas. Se han encontrados con variadas dificultades, el pago a los proveedores del exterior, por lo cual no embarcan los insumos; la producción se detiene y no hay ventas; los que tienen insumos para la producción tienen los depósitos abarrotados y no hay más lugar para depositar stock”, describió la ministra.
“De parte del gremio y de las empresas se busca ajustar de una manera coherente la cantidad de posibles despidos. El gremio se ocupó de analizar la situación, están dialogando y desde el ministerio dictamos la conciliación obligatoria, a pedido de las empresas, para que podamos tener una mesa de diálogo rápidamente y echar un poco de luz sobre todas estas cuestiones”, sostuvo.
“Evidentemente hay menos líneas trabajando, los contratos no se han renovado, los PPD no están trabajando todavía, no tienen insumos, no hay ventas, y es un panorama complejo. Hacia el futuro tampoco se sabe si esto se va a recomponer. Ojalá que al gobierno nacional le vaya bien y pueda encontrar un camino de diálogo con los gobernadores y las fuerzas políticas representadas en el Congreso, para sacar adelante todo. En este contexto no se puede pensar que a corto plazo va a haber condiciones distintas y las empresas toman su resguardo para mantener la mayor cantidad de puestos de trabajo posible. También pueden llegar a tener complicaciones financieras por mantener toda la planta”, advirtió.
En cuanto a las textiles, dijo que “la situación es básicamente la misma. Hoy tienen un parate y se ven perjudicados además por la apertura de importaciones, que ya está vigente. Eso repercute en la planificación y hay incertidumbre en el sector empresarial. Es complejo ser competitivos con las importaciones y el tema es que estos cambios son abruptos y violentos, y es más traumático acomodar toda la carga”.
“Si todo va mejor, esto se va a tender a normalizar. Hemos pasado momentos de crisis y estas cosas son cíclicas, pero el sacudón es muy violento”, aseveró.
Reunión con el Secretario de Trabajo
Por otra parte, dio cuenta del encuentro que mantuvo con el Secretario de Trabajo de nación y de las pocas probabilidades de que se convoque al Consejo Federal del Trabajo. “Yo tuve oportunidad de tener una reunión con el Secretario de Trabajo de la Nación, básicamente para preguntarle cuál es el rumbo. Hasta que todo esto no se calme un poco y no haya un acuerdo con los gobernadores y el Congreso, es posible que no haya reuniones del Consejo Federal del Trabajo. Hablamos del ex programa Potenciar Trabajo y todavía están tratando de configurarlo en su nueva versión, con la separación en dos programas, uno que quedaría en Desarrollo Social y Volver al Trabajo que quedaría en la órbita de la Secretaría de Trabajo. Todavía no nos han pasado detalle de cómo va a ser la operatoria, solamente adelantaron que no va a haber más altas, que la contraprestación no va a ser más con horas de trabajo sino con capacitaciones, pero todavía no hemos sido informados de los detalles finos del programa”, dijo.
“El secretario se mostró muy confiado en que la reforma laboral, tal y como la presentaron en el DNU, va a salir de una forma u otra. Le planteé algunas miradas distintas sobre esto y son distintas posturas. Por lo menos tenemos una perspectiva de cuál va a ser el rol que va a cumplir la Secretaría de Trabajo, que intervendrá en algunos asuntos gremiales y laborales dentro de su competencia, pero no creo que tenga una participación muy activa para fomentar programas de empleo, para capacitar y llevar adelante políticas públicas que faciliten la inclusión en el empleo”, avizoró.
Gremios y empresas
También fue consultada sobre su relación con los gremios. “Estamos en contacto con los gremios y todavía no pude tomar contacto con todos, porque algunos tienen una conducción en Río Grande y otra en Ushuaia, por lo cual se duplican las charlas y hay realidades distintas. El turismo en Ushuaia hace que la realidad de la economía sea distinta a Río Grande y Tolhuin, pero seguimos tomando contacto con los gremios que faltan. Todos están expectantes y, cuando salió el DNU, intercambiamos algunos conceptos con algunos gremios. Hay que escuchar a todos y trabajar con todos, tanto con los gremios como con los sectores empresariales y productivos, porque de acá tenemos que salir juntos”, instó.
Peor que nunca
Finalmente describió el peor escenario. “Desde diciembre cuando asumí hasta ahora, hemos estado en las situaciones de conflicto, le he pedido a las empresas toda la precaución posible con el tema de los despidos, y que sostengan el empleo al máximo. Hay situaciones críticas puntuales y muchas que están sosteniendo el empleo a pesar de que no tienen un buen pasar. Otros casos son más críticos y están tratando de equilibrar la situación entre los despidos y lo que queda dentro de la empresa, para evitar un mal mayor”, señaló.
“Siempre el hilo más delgado es el trabajador y uno habla con las empresas para que de alguna forma le busquen la vuelta y que se pueda seguir sosteniendo el empleo. Este contexto realmente no es el mejor. En otro tiempo hemos tenido vaivenes, como ocurrió en la pandemia, y hubo respuesta positiva de las empresas. Ahora el contexto es bastante más dramático y la mayoría de las empresas están haciendo el mayor esfuerzo posible”, concluyó la funcionaria.