El legislador del Partido Verde Matías Lapadula calificó como una “sobreactuación innecesaria” la presidencia del presidente Javier Milei para recibir a la generala estadounidense Laura Richardson. Planteó la incongruencia del anuncio de un polo logístico antártico cuando el mismo objetivo lo tienen los usurpadores de las Islas Malvinas, que son aliados de Estados Unidos. “Hoy están haciendo un puerto en las Islas Malvinas con el objetivo de que el Reino Unido se pueda proyectar hacia la Antártida desde Malvinas”, aseguró. Además dio detalles del proyecto de emergencia de la pesca artesanal, dado que la Legislatura anterior modificó la tarifaria y, “producto de un error, se les multiplicó por diez la tasa que pagaban para poder desarrollar su actividad”.
Río Grande.- El legislador Matías Lapadula fue consultado por FM La Isla sobre sus expresiones por las redes sociales a raíz de la visita del presidente Javier Milei a Ushuaia. El legislador había señalado que “no queremos que nos visiten, queremos que se retiren”, y señaló que “lamenta mucho que el gobierno nacional avance en ese sentido, porque está hablando de una alianza estratégica con un país que es aliado de un país invasor que está usurpando territorio argentino. No comparto para nada esta política exterior con otros países, con potencias como Estados Unidos, que está en contra de los intereses de nuestra provincia. Hablar de un desarrollo que mira hacia la Antártida con un país aliado al Reino Unido, que justamente mantiene su posición en las Islas Malvinas para proyectarse hacia la Antártida, es una incongruencia. Hoy están haciendo un puerto en las Islas Malvinas con el objetivo de que el Reino Unido se pueda proyectar hacia la Antártida desde Malvinas. Hace muchos años, el primer puerto estratégico y logístico de llegada a la Antártida eran las Islas Malvinas, no era Ushuaia. Se navegaba hasta las islas y después se cruzaba al océano Pacífico o al revés. Era un punto estratégico dentro de la navegación bioceánica. Hoy sigue siendo un punto estratégico, que está ocupando una potencia extranjera ilegalmente, justamente aliada al país con el que queremos trabajar para desarrollar nuestro polo logístico antártico. Creo que de ninguna manera es lo que necesitamos. Hay intereses importantes que apuntan a que Tierra del Fuego no se desarrolle, que no se desarrolle un puerto en Río Grande, que no se desarrolle el polo logístico en la provincia, porque lo quieren hacer ellos. Yo lo veo con mucha preocupación, no estoy de acuerdo y además me indigna que, a pocos días de conmemorar la Gesta de Malvinas, el presidente venga y haga el acto que hizo, con una general de Estados Unidos. Me parece una sobreactuación innecesaria que el presidente se tome el trabajo de hacer tres mil kilómetros para sacarse una foto con Laura Richardson”, opinó.
Emergencia para la pesca artesanal
Por otra parte, dio detalles del proyecto que aspira a declarar la emergencia para la pesca artesanal. “Hoy estamos atravesando una situación económica crítica en todos los sectores. Yo conozco a los pescadores y he trabajado mucho tiempo con ellos, porque se siguen desarrollando políticas en el Municipio de Río Grande, referidas a la soberanía alimentaria y a poner productos locales y frescos a disposición de los vecinos. Conozco cada una de las necesidades y las falencias que tiene el sector y dónde hay que ayudarlos. Hoy están atravesando una situación muy complicada porque en septiembre del año pasado se modificó la tarifaria y, producto de un error, se les multiplicó por diez la tasa que pagaban para poder desarrollar su actividad. Me pareció raro y, cuando lo conversé con algunos legisladores, en particular con Laura Colazo, evidentemente fue una equivocación, así que empezamos a trabajar para revertir esto”, dijo.
“Los pescadores no escapan a las dificultades económicas que tienen todos los vecinos. Entendemos que cumplen un rol importante, y hay 400 familias que tienen que seguir subsistiendo, porque su única actividad es esta. Ellos aportan alimentos frescos a precios más accesibles a todos los vecinos. Hace poco salió la noticia referida a la venta de pescado en Semana Santa en el paseo El Canto del Viento, y se vendieron mil kilos de pescado fresco. Esto es muy importante porque ayuda mucho en estos momentos. Es importante que los pescadores artesanales estén dando una alternativa distinta para que podamos comprar la comida a precios más accesibles”, planteó.
“Lo que falta es una política seria y a largo plazo de desarrollo del sector en la provincia. No podemos seguir improvisando. Yo estuve trabajando mucho cuando estaba en la Secretaría de Desarrollo para ver cómo se podía promover y desarrollar un sector que tiene tanto potencial en la provincia. Tenemos que ver lo que queremos hacer a futuro y empezar a planificarlo con las personas adecuadas. Tenemos un montón de instituciones, como la Universidad de Tierra del Fuego, que nos pueden ayudar a planificar la manera de desarrollar este sector en la provincia”, aseguró.
“La pesca en el mundo representa solamente el 40% de los alimentos que consumimos. El 60% de los alimentos que se consumen tienen que ver con la intervención del hombre, con acuicultura, siembra, y eso genera valor agregado y trabajo. La pesca tradicional que sale en un barco con redes está restringida, porque con la tecnología actual se depreda el recurso y eso tiene que ser siempre controlado. En el mundo la manera de consumir los recursos del mar o de los ríos es a través del hombre, haciendo siembra o criaderos. Esto es lo que se hace en Almanza con los mejillones, con mucho éxito”, destacó.
Consultado sobre la prohibición de instalar salmoneras, consideró que “la ley que sancionó la Legislatura no está mal. Es una ley que no permite que se desarrolle la actividad de manera que afecte seriamente el ambiente y el ecosistema, como lo ha hecho en el sur de Chile. Una cosa es traer un animal que no pertenece al Canal, y otra hacer un trabajo de cría de especies que son de Tierra del Fuego. Estuve con un especialista en Buenos Aires hablando de este tema y hoy tenemos un grave problema en la provincia, sobre todo en Ushuaia, y es una escasez de centolla, que es el producto estrella de la gastronomía de Ushuaia. Crece la pesca de centolla, la gastronomía de Ushuaia, que es bueno, crece el turismo, pero estamos agotando un recurso. Tenemos que pensar en tener criaderos de centolla. Siendo una especie autóctona de la provincia, lo que hay que hacer es siembra, y lo tenemos que hacer porque en momentos en que empieza a escasear el recurso y hay veda de centolla, del lado chileno la siguen pescando. Ellos no cuidan el recurso del lado chileno del Canal de Beagle y lo siguen explotando. Acá hay que avanzar en convenios con Chile en principio, para cuidar el recurso ambas naciones, porque es un recurso que compartimos, y ver la manera de desarrollar eso. La siembra de centolla o los criaderos van a generar trabajo, no es solamente un desarrollo económico, e ingresos genuinos a la provincia. Hay que trabajar seriamente en ver las mejores alternativas y empezar a hacer ese desarrollo, que es importantísimo para la provincia, que tiene un potencial enorme en materia de acuicultura”, sostuvo.
“Por suerte los recursos naturales son propiedad de la provincia y es a la provincia a la que le corresponde legislar y regular, para definir de qué manera queremos que se exploten. Tenemos la obligación como funcionarios de hacer un plan de desarrollo del sector y ponerlo en marcha, con ayuda del Estado o sin ella, pero que sea algo planificado, promovido, para que empecemos a dejar de desperdiciar este potencial que tenemos como provincia. Podemos generar trabajo con nuestros recursos naturales y agregar valor con este tipo de desarrollo”, insistió.
“Vemos el éxito que ha tenido una empresa que antes se dedicaba exclusivamente a la electrónica y que hoy es productora de mejillones en el Canal de Beagle. Ese es el camino que tenemos que empezar a recorrer”, subrayó.
Respecto de la falta de embarcaciones de pesca, dijo que “hay embarcaciones menores en Ushuaia, pero las características del mar del sur no son las mismas que en Mar del Plata por ejemplo. Tenemos un mar más bravo, y las características de las embarcaciones deben ser distintas que en la zona norte del país. Es un sector que no fue abordado ni planificado por parte de ningún gobierno provincial”, lamentó.
“En Tierra del Fuego queremos el desarrollo del sector, pero no lo queremos de cualquier manera. Necesitamos que sea sostenible, que cuide nuestro medio ambiente y que no afecte las riquezas que tenemos como provincia. De ninguna manera estamos dispuestos a rifar nuestro futuro y nuestros recursos para tener un negocio. Todavía no hemos podido poner este tema en agenda, pero gracias al trabajo que se viene desarrollando desde el Municipio de Río Grande, muchos toman el concepto de soberanía alimentaria, que antes nadie conocía. De a poco vamos introduciendo la necesidad de que estas políticas se extiendan a toda la provincia. A veces las urgencias van dejando de lado políticas que son importantísimas y hay que empezar a ver más allá de la coyuntura. Esto tiene que ver con tener un proyecto y me parece que lo que ha faltado en gobiernos anteriores es un proyecto de provincia. Solamente se han enfocado en solucionar problemas que tienen que ver con lo inmediato”, cuestionó.
“En Ushuaia hay un política apuntada al turismo en los últimos 30 años, pero no la hubo en otros sectores que hay que fortalecer, y uno de ellos es la producción de alimentos. De hecho, la producción de alimentos en Tierra del Fuego se ha venido a pique durante los últimos 20 años, con la producción de carne de cordero. Lo que ha pasado es una tragedia y ningún gobierno se ha puesto a ver cómo se soluciona, para que no siga cayendo la producción ovina”, concluyó Lapadula.