En el marco de un plan integral para reducir su déficit operativo este año en un 50%, Aerolíneas Argentinas suspendió, por baja demanda, el Corredor Atlántico, una ruta aérea iniciada en 2022 que conectaba mediante intertramos Aeroparque con Comodoro Rivadavia, Mar del Plata, Bahía Blanca, Trelew y Río Gallegos. La medida regirá desde el 1 de octubre.
Buenos Aires.- Se trata de una ruta que mediante intertramos conectaba varias ciudades. La decisión se debe a la baja demanda, que se traduce en pérdidas para la empresa.
En detalle, ya se había suspendido a principios de año el intertramo Comodoro Rivadavia – Río Gallegos y ahora se eliminarán Mar del Plata – Bahía Blanca, Bahía Blanca- Trelew y Trelew – Comodoro Rivadavia. No obstante, desde la empresa aclararon que ninguna de esas ciudades quedará desconectada.
Según informaron desde la línea aérea, este corredor tenía un promedio de ocupación por debajo del 65% en sus mejores momentos, cuando apenas podía cubrir sus costos operativos. Por ejemplo, el tramo Comodoro Rivadavia – Río Gallegos tuvo una ocupación promedio durante 2023 y 2024 del 57%.
“Esto habla de la inviabilidad de algunas rutas que simplemente carecen de demanda, a pesar de haber sido sostenidas durante varios años. En comparación, el resto de las redes de la compañía tiene una ocupación promedio que se sostiene en torno al 85%”, señalaron.
“Este corredor tenía solamente dos frecuencias semanales, y estas modificaciones no alterarán la conectividad de estas ciudades con otros destinos. Los recursos que se recuperen de esa operación ineficiente serán puestos a trabajar en rutas con mayor demanda y que impliquen un mayor beneficio para la compañía. Aerolíneas Argentinas está atenta a las oportunidades de negocio que le permitan mejorar su resultado económico, sin descuidar la conectividad estratégica que nuestro país requiere”, agregaron.
En casos de bajas de rutas similares, la compañía puso a disposición un esquema de riesgo compartido para que aquellas localidades que quisieran sostener o aumentar frecuencias a un destino en particular, pudieran aportar un piso de ocupación y así asegurar tanto la conectividad como la rentabilidad de esas rutas, como ocurrió en el caso de Río Cuarto.
“Un avión que viaja con la mitad vacía no solo es inviable, habla de una pésima gestión de los recursos de la compañía”, dijeron desde Aerolíneas a Infobae.
En 2023 la aerolínea tuvo un déficit de USD 390 millones y este año apuntan a que sea menos de la mitad. De ese monto, alrededor de USD 190 millones se perdieron entre abril y junio (temporada baja) ya que se mantenía constante la oferta de vuelos sin ajustar por demanda.
El sector se encuentra en medio de conflictos sindicales que llevaron a las autoridades de la empresa a hacer una reprogramación de vuelos esta semana. Los gremios APLA (pilotos) y AAA (tripulantes) concretarán asambleas en medio de reclamos salariales, lo que Aerolíneas consideró que son “paros encubiertos”.
“La compañía considera que estas medidas constituyen un paro encubierto, situación que ya fue denunciada ante la Secretaría de Trabajo, y que derivó en descuentos salariales para más de 200 empleados”, planteó.
“En el caso de los vuelos afectados durante el día de mañana (en referencia al martes) entre las 10 y las 13 horas por las asambleas en las terminales de Córdoba y Mendoza, se modificarán los horarios de un total de 10 vuelos sin ninguna cancelación”, detalló la empresa en un comunicado
“Para el día miércoles, se adelantarán los vuelos con destino a Miami y a Cancún mientras que se demorará el vuelo a Madrid, todo ello para evitar las asambleas anunciadas para las 21. De esta manera, se evitarán cancelaciones y todos los vuelos de esa jornada podrán efectuarse”, continuó.
“Por último, en relación a los vuelos afectados por las asambleas en Aeroparque entre las 6 y las 9 horas del viernes, las modificaciones se realizarán durante los próximos días. Todos estos cambios horarios se informarán vía mail a los pasajeros, por lo que se les solicita estar atentos a su correo electrónico”, informó la empresa.
El objetivo, destacaron, es que la menor cantidad posible de vuelos sean en horario de asamblea. Por eso se adelantarán vuelos para evitar largas esperas.
Esto se suma a las cancelaciones y reprogramaciones que afectaron a 6.500 pasajeros el lunes pasado en el Aeroparque metropolitano Jorge Newbery. Puntualmente, Aerolíneas comunicó que “el paro encubierto ya afectó a más de mil quinientos pasajeros por cancelaciones de vuelos, y a otros diez mil por demoras y reprogramaciones. En total se cancelaron 16 vuelos, y otros 85 registraron demoras, provocando todo esto un grave perjuicio económico y en términos de imagen corporativa a Aerolíneas Argentinas”.