El contador Ramón Gallardo advirtió que si las textiles radicadas en la provincia utilizan hilados de poliéster o lycra, se van a ver afectadas por la competencia con productos importados. Lo mismo en el caso de las plásticas como Río Chico, que fabrican envases PET, que es una de las posiciones arancelarias que bajaron. “Lo que más nos afecta es la importación de los insumos, porque somos productores”, dijo, y también dio cuenta del impacto que esto tendrá en la mano de obra empleada. Marcó posturas divididas frente a esta decisión del gobierno, porque “hay algunos que defienden la medida porque no los afecta sino que los beneficia, como el transporte y la logística que muchas veces van a comprar cubiertas a Chile; y hay otros que se ven afectados porque producen esos bienes”. Respecto de las textiles que quedaron fuera del régimen, planteó un escenario más que complejo, porque van a tener que pagar los impuestos nacionales del 1° de enero de este año en adelante, en caso de cierre indemnizar al personal, y además definir qué harán con el stock que ya no pueden sacar con los beneficios.
Río Grande.- El contador Ramón Gallardo analizó en el programa ‘Buscando el Equilibrio’ por Radio Provincia las consecuencias de la baja de 89 posiciones arancelarias, entre las que están incluidos electrodomésticos, plásticos PET e hilados. “Esto ya se venía planteando y siempre suele haber charlas previas con las distintas cámaras a nivel nacional cuando sacan estas medidas. Esta reducción de aranceles está orientada a bienes finales de consumo, y lo que más nos afecta son los insumos, porque somos productores. La baja de aranceles en los insumos se ha hecho porque muchas veces lo reclaman las mismas empresas. En el caso de las bebidas, les sale más caro el collar que el perro con respecto al envase, y se les hace imposible bajar los precios. El plástico PET que se usa para hacer las botellas, bajó del 12.6 al 2%, y puede ser una medida que busque bajar los precios de las bebidas. Lo mismo sucede con la línea blanca, donde bajaron los insumos plásticos que se usan, del 12,6 al 6%. Lo preocupante es que también se bajaron ciertos insumos como los hilados de poliéster y de lycra. El de poliéster se bajó del 12 al 6%, y el de lycra del 18 al 2%”, precisó.
“Con respecto a las textiles que tenemos en Tierra del Fuego, las que conozco no usan este tipo de hilados, pero no conozco el 100% y no puedo confirmar si las afecta o no. Si usan estos hilados se van a ver afectadas”, sostuvo.
“No quiero defender esta decisión pero, por ejemplo, si hablamos de los neumáticos, bajaron los aranceles de un 35 a un 16%. Es verdad que estamos atacando a los que fabrican neumáticos, pero también hay muchas quejas de los distintos transportistas y del ciudadano común, porque no encuentran cubiertas. Yo creo que es una manera de abaratar la logística”, consideró.
“Todos queremos defender nuestra quintita, pero en esta quintita hay detractores y defensores. Hay algunos que defienden la medida porque no los afecta, sino que los beneficia, como el transporte y la logística que muchas veces van a comprar cubiertas a Chile; y hay otros que se ven afectados porque producen esos bienes. En el caso del PET que se usa para botellas, hay producción nacional, pero las empresas se quejan de lo caro que sale el plástico para las bebidas y artículos de limpieza. Antes había muchas más fábricas de plástico, ahora en Río Grande tenemos dos, Plásticos Río Grande y Río Chico, que producen envases. Esas fábricas estarían afectadas y habría que consultarles en qué medida esto las afecta. A la larga o a la corta nos siguen afectando determinadas medidas y con mucha mayor razón tenemos que abrir el juego a otras producciones, con una ampliación de la matriz productiva que se haga en serio”, subrayó.
Frente a la postura del gobierno fueguino, contrapuso las gestiones que están realizando otros mandatarios para lograr inversiones.“Yo veo que hay cuatro o cinco gobernadores que se están juntando por la minería y están haciendo viajes específicamente para vender su materia prima. Se están moviendo por todos lados buscando inversiones y el que se queda quieto, pierde. Si uno cree que porque está sentado van a venir inversores a Tierra del Fuego, se tiene que olvidar de eso”, sentenció.
Precios más caros
Consultado sobre la baja del impuesto PAIS, que no se está reflejando en los precios sino todo lo contrario, Gallardo concedió que “es posible que aun con una reducción de aranceles no bajen los precios, como está ocurriendo con la baja del impuesto PAIS, que no se ve reflejada. La disconformidad está creciendo cada vez más, porque más de uno se está viendo afectado. Uno reclama en qué momento va a venir la reactivación para que podamos levantar cabeza. Las primeras perjudicadas han sido las fuentes de trabajo, y eso lo tenemos claro”, expresó.
“Hasta ahora la venimos sacando barata dentro del subrégimen industrial, porque hay un proyecto del PRO que propone bajar los impuestos internos a los celulares. Hoy un celular de afuera paga por impuestos internos un 19%, en cambio un celular de Tierra del Fuego para un 9%. Si sacan esos aranceles nos pegaría de lleno y esperemos que no suceda. Esperemos que las empresas hagan una buena negociación, porque la mayoría de las negociaciones las llevan a cabo las empresas más que el gobierno de turno. Ellos son los que tienen que hacer los lobbies suficientes para no verse afectados y preservar las fuentes de trabajo, que es lo que más necesitamos en Tierra del Fuego, con más de un 50% de gente bajo la línea de pobreza”, planteó.
Textiles al borde del cierre
Por otra parte, teniendo en cuenta las empresas que quedaron fuera del subrégimen y la posibilidad de que cierren y se vayan de la provincia, recordó que “el decreto que prorrogó los beneficios a las textiles por cinco años tenía condiciones y las empresas tenían que renunciar a cualquier acción judicial o extrajudicial contra el Estado nacional. Ese era el principio fundamental. Además decía que podían exportar sus productos con un seguro de caución, que cubre los impuestos. En caso de rechazo, automáticamente se ejecuta la póliza de caución, eso significa que todo producto que se sacó a partir del 1° de enero de 2024 tiene que pagar el IVA y los derechos de importación, porque ya no están los beneficios. Eso lo termina pagando la empresa”, aseguró.
“En la última reunión de la comisión del área aduanera especial se rechazó la autorización para exportar con o sin garantía los productos de Tierra del Fuego. Ya no pueden vender nada al continente con los beneficios y seguramente habrá alguna instancia judicial. Hoy a esas empresas no les van a aprobar ninguna acreditación de origen, aun con seguro de caución, porque ya no tienen beneficios impositivos y aduaneros”, aseveró.
“Uno se pregunta qué van a hacer esas empresas con el stock que tienen, que vino sin derechos de importación porque, si lo quieren sacar al continente, tienen que devolver los impuestos. Las empresas se encuentran ante una situación bastante onerosa, porque tienen que devolver los derechos de importación y el IVA desde el 1° de enero y no pueden exportar con beneficios. Hoy el personal está en un impasse, porque las empresas no pueden producir”, manifestó.
El contador avaló las acciones judiciales iniciadas por dos de las textiles que quedaron fuera del subrégimen, “porque con toda la razón encontraron avasallados sus derechos. No puede ser que hasta el 31 de diciembre del 2023 tenían los mismos beneficios que las electrónicas y a partir de la prórroga les cambiaron las reglas de juego. Les quitan los beneficios del 2.3% a partir del 1° de enero de 2025, y eso no lo tiene el resto de las industrias. Existe una inequidad con respecto a las textiles y yo si fuese empresario hubiera hecho lo mismo y hubiera iniciado una acción judicial, porque considero que afectaron los derechos adquiridos durante tantos años. Será la justicia la que tendrá que definir esta situación y la provincia no va a salir indemne de esto, porque las empresas le van a iniciar juicio a la provincia además de a la nación, porque sus derechos fueron avasallados. La decisión de judicializar tiene su costo, porque van a tener que indemnizar al personal o llegar a un acuerdo, tendrá que definir qué hacen con el stock que tienen, y además van a tener que pagar hasta el último peso de los beneficios que les sacaron a partir del 1° de enero por todo lo que exportaron”.
“Como fueguino estoy muy preocupado, porque esto nos encuentra mal parados, sin la infraestructura necesaria. Hablan de grandes inversiones, de empresas pesqueras que van a poner valor agregado, y me gustaría que digan qué piensan. En todo este tiempo lo que he visto es que el gobierno ha tomado empleados con sueldos que están por debajo del nivel de pobreza y lo que han creado es el nivel de pobreza que tenemos. Cuando se toma gente, muchos entran a trabajar por la obra social, y esto hace quebrar a la obra social. Son situaciones preocupantes y espero que esto mejore”, concluyó.