Así lo entendió uno de los socios de Transportes Líder que une Río Grande con Tolhuin y Ushuaia quien dio cuenta de los altos costos para mantener este servicio que cada vez está más complicado. “Estamos saliendo con dos o tres pasajeros pero el costo es el mismo, tenemos que pagar el gasoil, los insumos y los sueldos de los chóferes, cada vez estamos más para atrás. No le tenemos miedo a la competencia, en estos 26 años han pasado siete empresas y han tenido que cerrar, pero si quieren desregular el transporte de pasajeros de media y larga distancia, van a tener que controlar”, sostuvo Víctor Centurión.
Río Grande.- Víctor Centurión, socio de Transportes Líder, expresó preocupaciones sobre competencia desleal y la falta de control en el sector con el anuncio del Gobierno nacional de desregular el transporte de media y larga distancia en el país.
Por Radio Fueguina dijo que “no sé cómo se va a manejar eso porque para mí me tiene tampoco, no me afecta nada, lo que pasa es que yo quiero que sean todos iguales, porque van a entrar con una combi o dos, y van a estar, y no sé cómo van a trabajar, si van a trabajar si van a tener oficinas, si van a tener empleados, porque nosotros tenemos empleados, tengo nueve empleados, hay además choferes que tienen un costo más o menos de 20 millones por mes, más alquileres, más todas las cosas, impuestos, combustibles, insumos y todo eso, cosas que todo negocio necesita tener en regla, entonces me parece a mí que no va a funcionar; pero yo entiendo al Gobierno de que haya competencia, porque eso es la competencia, eso es dar a otra persona que no ha invertido nada, porque es fácil tener una combi habilitada y poner a viajar usuarios, eso ha pasado siempre, siempre es lo mismo, le han dado a otras empresas y han dado yo tres meses y han cerrado y después vienen otras combis para ir a hacer viajes regulares, llegan a las fiestas y van llenas de combis, nadie controla que lleva gente, no sé si está habilitado o no está habilitado, si tiene permiso o no tiene permiso, entonces son cosas que a mí me duele, porque yo estoy ahí todo el día, porque a mí, si yo no estoy ahí todo el día, no me dejan salir”, dijo el transportista.
Recordó que “todos los meses me controlan a mí, a cada combi, lo controlan a todos, si tengo una cubierta lisa me controlan, me la hacen cambiar, todo y es lo que corresponde, yo estoy de acuerdo porque es muy fundamental eso, como hacer la RTO. Ahora el RTO te sale casi 250.000 pesos el cartón de habilitación, entonces son cosas que no lo veo yo, no lo veo, tampoco lo voy a decir que no lo puedan hacer y que no lo hagan, pero hay que ver cómo se manejan”.
“Tenemos una empresa hace 25 años y un tipo capaz que viene de acá y dice ‘porque yo hice 5 viajes y sí’, pero nosotros tenemos una empresa de hace 25 años. Esta gente que entra no pone nada, no tiene empleados, yo estoy viviendo acá, tenemos casi 30 familias, ¿qué pasa? Yo cierro cuando tengo 30 familias, entonces estamos yendo para atrás, no para adelante; eso es lo que veo yo, no sé. Me parece que no es así, pero bueno, yo no tengo problemas, ni con los socios, ni problemas nada. Esta desregulación salió el otro día, no sé qué va a pasar”.
Agregó que “a mí no me afecta nada, porque yo lo espero, porque ya han pasado siete empresas y se han ido, porque creen que es fácil, y no es fácil esto, porque los costos que tenés, cuando vos te das cuenta, no se dan, y más ahora, ahora, peor, porque ahora no tenés mucho margen para ganar”.
Víctor Centurión “hay que estar todo el día, hay muchas situaciones que se dan. Pienso que los aportes no pueden hacer nada, los aportes lo exigen, como ven ahí en la ordenanza, ellos dicen sí o sí, tienen que darle la licitación, no pueden negarse, pero ¿qué pasa? Acá para hacer eso, tiene que ver la regulación del mercado, porque el mercado del transporte, ya no da, salgo mal hecho, han sacado informes sobre esta situación y entonces no da para otra empresa más y me refiero a una empresa como corresponde, con las cosas como corresponden. Yo no tengo ningún problema en competir, no me afecta nada, porque ya no somos nuevos, las empresas que están tienen 28 años, nosotros 26, y han pasado siete empresas, que han llegado a trabajar tres meses o cuatro, vinieron a romper el mercado, porque han agarrado la medida de entrada, y si salía a 20, lo ponían a 10 (dumping), eso, cada vez se juntaba gente, y eso no es competencia, porque lo hacían 3 meses, esos 3 meses, vos podés tener una empresa y si va mal, podés echar empleados, dejar gente sin trabajo, por eso, porque a mí ya no me dan los números, porque echar gente, lamentablemente, ya hemos sacado; este año sacamos salidas, antes teníamos muchas salidas, las bajamos a 6, porque no nos dan los costos”.
Agregó que “nosotros a veces salimos con 2 o 3 pasajeros; hoy justamente a las 6 de la mañana la combi se fue con 3 pasajeros, y tenemos que salir obligatoriamente. Ahora a las 8 de la mañana se van con 2 o 3, entonces se van perdiendo, yo tengo gasto de gasoil casi 771 mil pesos, un parche de cubierta sale casi 12 lucas, aparte el gasto el vehículo, el service y a todos los choferes se tienen que pagar, entonces no es fácil”.
También Centurión cuestionó el estado de la Terminal de Río Grande. “Es una vergüenza cómo está, nos da vergüenza ajena, es un galpón eso, es una falta de respeto para los agentes de turismo, nos salía 3 millones de pesos. Yo pagaba un alquiler de casi casi 2 millones de pesos, entonces no es fácil eso, para mantenerlo, y eso el alquiler, y el gas, todo, impuestos, todo. No sé, la verdad que por ahí esta noticia me cayó mal, pero igual yo lo acepto, lo que yo quiero saber es cómo se van a manejar”.
También reveló que con los despidos de las fábricas muchos quedaron con las combis paradas porque ya no podían hacer viajes. “Lamentablemente hay muchas combis que han quedado sin trabajo también, que me duele mucho, que han quedado sin trabajo en la fábrica, que han sacado las combis, hay cantidad de combis paradas. Yo quiero que lo hagan, que desregulen, no tengo ningún problema, pero que lo hagan como corresponde, que haya control”, concluyó.