El presidente de CAFIN, Alberto Garófalo, dio su visión del futuro de la industria textil no sólo en Tierra del Fuego sino en el continente, que no es muy auspicioso si se bajan los aranceles de importación. Puntualmente sobre Australtex y Fabrisur, que son las dos más importantes, consideró que si los organismos de control actúan como corresponde, las empresas tendrían derecho a que les den vuelta la resolución. De no ser así, avizoró que se liquidará el patrimonio porque si la empresa no puede continuar dentro del régimen deberá ejecutar la garantía con la que sacó la producción. Opinó a favor de la adhesión al RIGI, porque dentro de las actividades elegibles para entrar al régimen “hay dos en las que Tierra del Fuego tiene mucho que ver, como es la energía y el turismo”. También celebró el fallo favorable al municipio de Tolhuin con respecto a la recuperación de las termas del Río Valdez, que podría tentar a grandes inversores de cadenas hoteleras a desarrollar la zona. En cuanto al proyecto del puerto de Río Grande, dijo que “va a ser un disparador como lo fue el aeropuerto de Ushuaia”.
Río Grande.- El presidente de CAFIN, Alberto Garófalo, se refirió en el programa ‘Buscando el Equilibrio’ por Radio Provincia al futuro de la industria textil radicada en Tierra del Fuego y advirtió que se verán afectadas al igual que las empresas del continente, si el gobierno nacional dispone la eliminación de aranceles de importación.
“Estamos viendo cómo le va a dos de las compañías que quedaron fuera de la prórroga, porque están corriendo los plazos de la reglamentación. La situación no está nada fácil para las textiles”, señaló puntualmente sobre Australtex y Fabrisur, que son las dos empresas más grandes.
“No soy muy optimista con el futuro de la industria textil, porque han quedado en pie por ahora las empresas más chica y creo que esto ha sido algo buscado por la autoridad nacional. Dentro del país a nivel nacional la textil siempre fue la rama industrial más protegida de todas. Ellos han sido los promotores de que hoy estemos en la situación que estamos con respecto a nuestras textiles. A futuro, si se mantiene el rumbo que está fijando el gobierno, la industria se va a tener que aggiornar mucho o va a desaparecer. Si llegan a bajar los aranceles no tienen la menor posibilidad de competir con los productos del exterior”, sostuvo.
Menos mano de obra
Con respecto a la pérdida de puestos de trabajo en el sector, indicó que “en el caso de Fabrisur todavía lo están manejando, el personal está y la empresa está trabajando. Australtex está con períodos vacacionales pero todavía los empleados siguen siendo tales en esas dos compañías. A futuro imagino que se aplicará la ley laboral, porque por las condiciones que se presentan no van a poder continuar. Tenemos optimismo de que el recurso pueda revertirse, pero la realidad es que si se le pregunta a los organismos de contralor como debe preguntarse, las empresas tendrían derecho a que les den vuelta la resolución”, opinó.
“Si esto no es así, seguramente la maquinaria será vendida y exportada al continente. Si la empresa no puede continuar dentro del régimen deberá ejecutar la garantía con la que sacó la producción desde enero hasta ahora y ya no le cabe ninguna otra sanción, por lo cual puede disponer de su patrimonio”, dijo.
“Las empresas sabían que si esto salía mal iban a tener que abonar las garantías, que tienen que ser ejecutadas. Por todo lo que exportan al continente están pagando esa caución desde el 1° de enero de este año. Hasta el 31 de diciembre del año pasado tenían derecho a sacar la producción con su acreditación de origen aprobada, y sacaban con los beneficios. A partir del 1° de enero de este año, por disposición del propio decreto 594, tuvieron que empezar a salir con caución. De las nueve empresas hay cuatro a las que les ejecutarían la garantía”, precisó.
Régimen fueguino y presupuesto
También se le preguntó sobre el tratamiento del presupuesto nacional y el riesgo de que el subrégimen quede sin efecto. “El presupuesto nacional se está discutiendo en comisión y el futuro del subrégimen de Tierra del Fuego forma parte del juego político. Nunca hemos tenido una discusión en serio de cuál es el costo, se hacen cálculos del costo fiscal presunto, que está lejos de asimilarse al costo fiscal real. Como institución no negamos que después de más de 50 años debería haber algún tipo de reconversión que de alguna manera minimice ese costo fiscal que nos están enrostrando. Es un trabajo a largo plazo que debe hacerse con las empresas adentro”, manifestó.
“Hoy no tenemos ninguna posibilidad de diversificar porque el 127 en el año 2021 había hecho una previsión para que se incorporaran nuevos proyectos con muchas restricciones, pero en un plazo que vencía el 31 de diciembre. Tendría que haber habido una convocatoria explícita de la Secretaría de Industria pero nunca se hizo. Hoy el planteo es que no hay que aumentar el costo tributario que significa el régimen y no vamos a tener novedades en ese sentido”, indicó, cerrando la posibilidad a nuevos proyectos amparados en la 19640.
“Con respecto a las Cámaras legislativas, para ser sinceros nosotros no nos acercamos mucho, porque es un ámbito que no nos es propicio. Sabemos que hay muchas provincias que quieren regímenes parecidos a la 19640, aunque no tienen las condiciones de extrema dispersión con respecto a los centros de consumo, o el aislamiento ni la situación estratégica que representa la isla. No hay nada comparable a la situación de Tierra del Fuego, pero uno no puede evitar que lo pretendan. Así como nosotros no hemos tomado contacto, tampoco lo han tenido con nosotros, y menos en una circunstancia como esta, donde la discusión del costo fiscal claramente tiene un componente político. Eso está lejos de propiciar una discusión técnica para que podamos aclarar cómo son las cosas y qué representa en realidad Tierra del Fuego. Más allá de eso, tenemos que ver cómo hacemos para que mejore el perfil, manteniendo la actividad, pero hoy es muy difícil hacer eso”, planteó.
Adhesión al RIGI
Garófalo se expresó a favor de la adhesión al RIGI por las potencialidades de la provincia. “Espero que la provincia adhiera el RIGI, porque va a ser beneficioso para Tierra del Fuego. Dentro de las actividades elegibles para entrar al régimen hay dos en las que Tierra del Fuego tiene mucho que ver, como es la energía y el turismo. No veo por qué debiéramos perdernos la oportunidad de poder captar alguna inversión grande que venga de afuera. Tenemos la posibilidad por la vía directa, que sería una inversión en estas áreas, e incluso que empresas ya radicadas en Tierra del Fuego puedan ser proveedoras de algunos emprendimientos que se instalen en el continente a través del RIGI”, aseguró.
“El tema de la energía es una condición sine qua non para desarrollar otro tipo de actividades, como por ejemplo la industria petroquímica. Tierra del Fuego tiene mucho gas, que es una materia básica para la producción de energía, y eso hay que aprovecharlo antes de que el mundo vire hacia otra cosa y se deje de utilizar el gas. Nuestras reservas de gas son una garantía para emprender varias cosas, como las industrias transformadoras de minerales no metalíferos o la producción de fertilizantes a partir del gas. Esperemos que llegue la hora para que se desarrollen en la isla”, deseó.
Activación del FAMPF
En cuanto al fondo de ampliación de la matriz productiva fueguina, estimó que “dentro de 30 ó 40 días” ya debería estar funcionamiento. “Hemos estado en contacto y sabemos que se está estudiando y se están definiendo criterios. Se han revisado los proyectos existentes y se ha dado plazo para la presentación de los proyectos. Sería deseable que antes de fin de año esté en funcionamiento, porque el FAMPF tiene mucho que aportar en este momento”, afirmó.
Dado que el senador Pablo Blanco dijo que el gobierno de Milei es el menemismo del Siglo XXI, se le pidió una opinión al respecto. “Tiene alguna similitud, no es exactamente lo mismo pero tiene similitud. Todavía no hemos presenciado la baja masiva de aranceles. Por ahora se han tomado medidas de liberalización y esto puede resultar amenazante, pero no han ido por el lado de los aranceles. Todo lo que sea liberalización del comercio a Tierra del Fuego le viene bien porque es una forma de acceder más fácilmente a los insumos. Hay insumos que están bajando de precio, si bien no es generalizado, y yo veo que nuestra industria está capacitada para aprovecharlo”, apuntó.
Recuperación de Las Termas
Garófalo celebró el fallo del Superior Tribunal de Justicia sobre la restitución de Las Termas del Río Valdez al Municipio de Tolhuin. “Las termas cuando fueron descubiertas para ser puestas en valor generaron una gran expectativa, porque eran una novedad para la provincia. Lamentablemente ha pasado todo este tiempo y no se han hecho inversiones. Espero que ahora que pasan a manos del municipio sean licitadas nuevamente para aprovechar el potencial que tiene esa zona. Lo más sano sería llamar a una licitación, porque creo que tiene potencial para que se interese alguna cadena hotelera para aprovechar las termas, e instalar un hotel temático en la zona. Hay mucho conocimiento dando vueltas como para aprovechar eso y hay miles de ejemplos en muchos lugares del mundo. En zonas remotas como Las Termas del Río Valdez se instalan para aprovechar la propiedad de las aguas. Eso va a generar recursos para el municipio y para Tolhuin puede ser muy importante la explotación en manos privadas de las termas”, pronosticó.
Transporte marítimo
Finalmente se centró en la importancia del puerto de Río Grande para abaratar costos logísticos. “En lo que hace al transporte mínimamente esperamos que se estabilicen los precios y fundamentalmente a largo plazo que tengamos un puerto para transportar todos los insumos y productos terminados que soporten esos días de viaje. No es lo mismo que una empresa esté radicada en Ushuaia que en Río Grande, porque el transporte terrestre es caro. Llegar directamente con el barco a la ciudad en la que está radicada la empresa es fundamental”, subrayó.
“El puerto de Río Grande lleva 30 años de retraso. Yo personalmente trabajé en un proyecto de puerto para Río Grande, porque estaba clara la necesidad de que estuviera allí y permitiera el desarrollo incluso de actividades no ligadas directamente al subrégimen industrial. Esperemos que esta vez se nos dé, porque el puerto va a cambiar la historia de Río Grande y va a ser un disparador como lo fue el aeropuerto de Ushuaia”, concluyó.
