El secretario general de la UOCRA planteó un panorama complicado para el sector, ante la paralización de obras que todavía se mantiene. Recién en diciembre podrían retomarse las obras de viviendas del IPV que quedaron sin concluir, pero el ritmo será lento, como una “prueba piloto” para ver si el gobierno nacional paga los certificados. Hay expectativa en la obra del puerto de Mirgor, que según sus directivos comenzaría en enero. En este caso se trata de un plan de tres años que ocuparía a 500 trabajadores. Mientras tanto hay alrededor de 800 inscriptos en la bolsa de trabajo a la espera de una solución.
Río Grande.- El secretario general de la UOCRA, Julio Ramírez, planteó un panorama “terrible” en materia de construcción, porque no se han reactivado las obras y, en caso de hacerlo, se prevé un ritmo lento, a modo de “prueba piloto” para ver si el gobierno nacional paga los certificados.
Por Radio Provincia al programa ‘Buscando el Equilibrio’ aseguró que “seguimos sin obra pública, con la gente desocupada, esperando que empiecen. Dicen que en diciembre van a empezar las obras del IPV, pero está todo prácticamente parado. Estamos viendo el sector privado, con Total empezamos con un trabajo que ocupa unos 70 compañeros, ahora van a tomar a la mitad de gente y en enero otra mitad, y es lo único que tenemos en claro. La gente está haciendo changas, rebuscándosela como puede”.
Hasta ahora se pagaron 500 millones que se le debían a las empresas “y creo que no se canceló la totalidad. Las empresas están esperando un resultado favorable para poder empezar. Les prometieron tener solucionado el tema para diciembre para empezar con todas las obras del IPV, porque hay varias viviendas para terminar”, dijo.
“Del PROCREAR había viviendas para hacer y ahora salió la sorpresa de que no lo van a hacer y que cada cual va a tener que hacerse su casa, así que esas obras van a estar paradas porque el gobierno nacional dio de baja el programa. Le van a dar créditos a la gente para que se haga su casa, pero eso no es igual y para nosotros es un problema”, señaló.
“Yo sigo insistiendo que los fondos del gobierno nacional son una mentira. Son todas promesas para ganar tiempo y que la gente se quede tranquila. Cuando salió el gobierno nacional diciendo que iban a mandar plata a las provincias, a algunas les mandó y a otras no. En algunas provincias las obras eran de rutas, que era todo maquinarias y no ocupan mano de obra. A Tierra del Fuego no llegó nada, solamente una tanda para pagar lo que se debía a las empresas pero no para pagar las obras. Dicen que en diciembre llegaría otra parte para las obras del IPV que están paradas”, manifestó.
“Seguimos en la misma, porque van a arrancar las obras con cinco o seis personas, y van a certificar como una prueba piloto para ver si el gobierno nacional paga las certificaciones. Después van a tomar cuatro personas más, van a certificar otra vez y esperar si el gobierno cumple. Recién si todo se cumple se va a empezar a tomar gente para trabajar. Para los desocupados nuestros no hay ninguna solución si empiezan las empresas con cuatro o cinco obreros”, advirtió.
Estimó que “hoy tendremos 400 personas trabajando en toda la provincia, de la que está en blanco. Hay trabajos chicos con seis o siete obreros y nada más. Todas las empresas están puchereando con el mínimo de gente. Hay desesperación y estamos buscando lo que sea para poder trabajar. Tenemos 800 personas en espera que están en la provincia y están esperanzados en que en enero empecemos con el puerto, o que la Total abra otro trabajo más. Si empieza la obra del puerto sería la solución para Tierra del Fuego, por la cantidad de gente que pueden llegar a tomar. La información certera que tengo es que gente de Mirgor nos ha dicho que enero comienzan. Todo el atraso fue por el gobierno provincial y nacional, pero ahora ya está todo bien. Siempre hay trabas para empezar los trabajos de parte de nación y de la provincia. Es una obra de tres años con 500 puestos de trabajo”, precisó.
Ramírez no confía en las promesas del gobierno nacional de enviar fondos para concluir algunas obras. “El presidente es un mentiroso porque quiere conformar a la gente con dichos, pero no hace nada por el obrero. Bajó la inflación pero la gente no puede comprar. Es todo una mentira”, expresó.
Por el lado de la Municipalidad de Río Grande “se está haciendo bacheo y algunos trabajos, pero no tenemos solución para los desocupados, porque nosotros tenemos una bolsa de trabajo y las empresas que están trabajando tienen su gente y no se mueve nada de la bolsa de trabajo. De parte del gobierno hay muchos anuncios pero el poncho no aparece. Los edificios que están en construcción son los que emplean a los 400 compañeros que están en blanco, pero son obras particulares”, aclaró.
Consultado sobre la obra frente al CEMEP, dijo que “es una obra de la gente de petroleros y lo van haciendo de a poco, ahí hay parte de los 400 compañeros de la provincia que están trabajando. En Ushuaia nos mantenemos con las obras particulares, porque no hay nada más. De parte del municipio no se ve nada, son todos anuncios nada más. Con la pavimentación todavía no empezaron y no hay movimiento de nada. Ahora que vienen los tiempos políticos todos dicen que van a hacer algo, pero hasta ahora nadie hace nada. En Tolhuin tenemos la obra de pavimentación con la empresa Dos Arroyos y después hay pequeñas empresas. La próxima semana me voy a juntar con el intendente para ver qué panorama tiene. Hasta ahora el panorama es terrible. En todas las provincias la situación es crítica. En Santa Cruz teníamos cuatro mil personas trabajando en la represa y está todo parado. Hoy por hoy están igual que nosotros, lo mismo Chubut. En Chubut salió un trabajo muy grande de la fábrica de aluminio pero hasta ahora no empezó. Está todo parado por todos lados”, afirmó.
Por otra parte cuestionó la política de la empresa Total, que “lanzó una licitación para hacer una red de incendio y hay que hacer 30 kilómetros de cableado y poner cuatro molinos, que es una obra importante con mucho hormigón. Eso va a dar para nueve meses de trabajo, pero la ganó una empresa de Buenos Aires, que va a subcontratar empresas de Río Grande. No sé por qué la Total le da trabajo a una empresa de Buenos Aires que contrata a las empresas de acá. Directamente tendría que llamar a licitación y que se presenten las empresas locales”, planteó.
Finalmente cifró expectativas en la continuidad del proyecto de Tierra del Fuego Energía y Química. “Yo creo que en cualquier momento vamos a tener una sorpresa de parte de los chinos, que seguirían con el proyecto que tenían acá. Yo tengo fe en esa obra, porque los chinos estaban decididos a hacerla. Tuvieron muchas trabas por todos lados y se tuvieron que ir, pero creo que en cualquier momento empieza a renacer otra vez”, concluyó.