La ministra de Salud Judith Di Giglio le puso números al aumento de la demanda de atención en el sector público en el último año. Entre guardia de adultos y guardia pediátrica, se están atendiendo entre 300 y 400 consultas diarias, por lo que prácticamente se han duplicado los profesionales. Unas diez mil personas se sumaron en 2024 al listado de pacientes que perdieron su obra social y “hay 11 mil recetas más emitidas en el primer semestre”, con la cobertura del 100% que brinda el Estado. También planteó las consecuencias de las políticas nacionales en materia de prevención, como es el caso de la merma en la entrega de anticonceptivos, preservativos y pastillas del día después, que antes se entregaban en forma gratuita sin distinción de pacientes con o sin obra social. Actualmente se entregan “a los que no tienen obra social e intentamos que las personas que la tienen traigan la receta y lo cubra su obra social”, dijo, pero como la cobertura muchas veces ronda el 40 o el 60%, sobre todo el joven no tiene el dinero para pagar la diferencia y “ahí es donde disminuye la utilización de métodos anticonceptivos y aumentan los embarazos no deseados”, advirtió. Respecto de la gestión destacó que “en promedio hoy se está recuperando el 70% de lo facturado y además marcó cambios en la modalidad de contratación de profesionales porque “existen empresas de médicos itinerantes en casi todas las especialidades básicas”.
Río Grande.- La ministra de Salud Judith Di Giglio dio a conocer varias cifras vinculadas con las consecuencias de la desocupación y las políticas nacionales, en declaraciones a Radio Provincia. En principio habló sobre la situación del hospital Río Grande ante el aumento de la demanda, y aseguró que “el hospital viene sumando profesionales y estamos en un cambio del sistema de salud desde hace algunos años, con equipos cada vez más interdisciplinarios. El recurso humano es muy finito en todo el país y cambian las modalidades de trabajo. Ya tenemos part time desde hace varios meses y cambian las relaciones laborales. El hospital Río Grande viene transformando su manera de contratar y atraer profesionales, que ha servido mucho para responder al aumento de la demanda de la ciudad”.
Precisó que aumentaron las consultas “sobre todo en los servicios de guardia y tuvimos que aumentar el número de profesionales. Tenemos un promedio de entre 150 y 200 consultas diarias en adultos y hay un número igual de niños, dependiendo de la temporada, porque siempre hay más consultas en invierno que en verano”.
“Nosotros tenemos un médico de guardia para la ambulancia, que antes no existía. Hay dos o tres médicos en la guardia de adultos más tres pediatras de guardia, porque hay también un pediatra en internación. Estamos hablando de seis o siete médicos de guardia exclusivamente abocados a la guardia central. Antes el hospital tenía cuatro médicos de guardia y en el último año prácticamente se duplicó la cantidad”, puntualizó.
“Las consultas aumentan porque la cantidad de pacientes que no tienen obra social aumentó mucho. Nosotros teníamos un promedio de entre 45 y 50 mil personas que no tenían obra social en la provincia el año pasado, y este año desde el inicio son más de 60 mil las personas que no tienen obra social. Si comparamos la emisión de recetas para personas que no tienen obra social, hay 11 mil recetas más emitidas en el primer semestre y el Ministerio de Salud tiene una cobertura del 100% para estas personas. El paciente va y retira en la farmacia con cobertura del 100% de todos los fármacos incluidos en el vademécum”, subrayó.
Observó que “aumentó la gente que no tiene obra social pero la población sigue siendo la misma”, por lo que no se está teniendo en cuenta el crecimiento vegetativo y la principal incidencia es la desocupación. “Además hay siete centros de salud en Río Grande y nueve centros de salud en Ushuaia, que no atienden solamente a personas que no tienen obra social, porque hay muchísimas personas que tienen obra social y van al sector público. Quizás no aumentan de manera exponencial las consultas, sino que muchas personas que antes tenían una prepaga o una obra social se siguen atendiendo en los hospitales o los centros de salud, pero no se recuperan los costos. No son todas consultas, también hay cirugías, diálisis o tratamientos oncológicos”, detalló.
“El sistema de salud es único y tiene tres efectores, el público, el privado y las obras sociales. Muchas obras sociales tienen efectores de salud y tienen un sanatorio propio, como puede ser la UOM; y muchas otras, como OSDE, compran servicios tanto al efector público como al privado. Nosotros como efector público atendemos de la misma manera a quien tiene y a quien no tiene obra social, y esto va a ser siempre así. Obviamente en aquellas especialidades donde hay dificultad de acceso, porque hay poca oferta de turno, se le da prioridad a quienes no tienen obra social. Hay servicios que son exclusivos del efector público, porque si hay un accidente vial o un accidente en un domicilio, todo el sistema de emergencia de la provincia es exclusivo del sector público”, expuso.
“En Ushuaia si hay que internar un niño, la internación de niños y la cirugía infantil se realizan en el efector público. Los niños que se internan en la ciudad de Ushuaia son todos niños de la ciudad, independientemente de que tengan o no obra social. Los que necesitan neonatología en la provincia generalmente lo hacen en el hospital público, tengan o no tengan obra social”, apuntó sobre la respuesta que está dando el Estado.
Aumento de embarazos no deseados
Por otra parte la ministra planteó una consecuencia de la política de salud del gobierno nacional, que está generando un aumento de los embarazos no deseados. Es el caso de los preservativos, anticonceptivos y pastillas del día después, porque nación, “por una estrategia de salud pública, los envía a todas las provincias, para que sobre todo los jóvenes los puedan retirar, sin ningún tipo de receta. Todo esto nosotros intentábamos darlo de manera gratuita, tengan o no tengan obra social. Ahora se envían menos y se le entregan de manera gratuita a los que no tienen obra social e intentamos que las personas que la tienen traigan la receta y lo cubra su obra social. Lo que sucede es que muchas veces hay obras sociales que no tienen cobertura del 100%, sino del 60%, del 40%, y quizás el joven no tiene el dinero para pagar la diferencia. Ahí es donde disminuye la utilización de métodos anticonceptivos y aumentan los embarazos no deseados”, alertó.
Deuda de obras sociales
Respecto de la deuda de las obras sociales, dijo que “en toda la provincia se ha mejorado muchísimo el recurso humano administrativo calificado para que la facturación y recupero de los hospitales sea cada vez más efectiva. Hemos tenido un aumento enorme en la facturación en toda la provincia, se factura en todos los centros de salud y hemos tenido recupero en los pagos. En promedio hoy se está recuperando el 70% de lo facturado. Años atrás el recupero era del 20 ó 30%. Las obras sociales están pagando, algunas con demora, otras no. Por supuesto tenemos deudas registradas, pero se realizan pagos de todas las obras sociales. En este momento la UOM es la que tiene más dificultades en la ciudad de Río Grande, pero somos un hospital público y por supuesto seguimos atendiendo a todos los pacientes”.
Incorporación de profesionales
Finalmente dio cuenta del cambio en las modalidades de contratación por la condición de itinerancia que están adoptando sobre todo los médicos jóvenes. “Siempre realizamos convocatorias y siempre hay áreas donde se necesitan profesionales. El problema no tiene que ver solamente con lo salarial, sino que nosotros no somos formadores de médicos. Desde hace muchos años cada vez se reciben menos médicos y es un problema que cada vez se va a agravar más. También los nuevos médicos no son como generaciones anteriores, porque generalmente no les interesa el ingreso definitivo a planta, sino que ellos quieren venir dos o tres años, conocer el lugar, hacer su experiencia y después irse a otro lugar. Prefieren una modalidad contractual diferente. Hay un montón de cosas que van cambiando”, dijo.
“Hoy el hospital de Río Grande es el centro con mayor número de personas internadas de la ciudad y el que mayor número de camas tiene. Tiene a cargo todo el sistema de emergencias de la ciudad y, si hablamos de profesionales para internación, como ginecología, clínica médica, guardia, terapia intensiva, cirugía general, todos esos servicios están cubiertos. Hoy el hospital tiene neurólogo, tiene neurocirujano, tiene internación de pediatría, de adultos, ginecología, internación de partos, maternidad, y para poder cubrir estos servicios hay diferentes modalidades. Ya no existe más la dedicación exclusiva porque los nuevos profesionales prefieren otras modalidades y tienen que ver mucho con la itinerancia. Hay empresas de médicos itinerantes en casi todas las especialidades básicas y cada vez tenemos más esa modalidad de contratación. En vez de tener diez pediatras de planta permanente, tenemos cinco pediatras de planta y cinco contratados. Esto es lo que está cambiando, pero los servicios están cubiertos en internación y emergencias”, concluyó.