El concejal de MPF Vladimir Espeche consideró que el modelo político de la gestión Vuoto “está agotado” y reclamó un cambio de rumbo para empezar a dar respuestas a las necesidades de la gente. Marcó serios problemas en las prioridades del gasto y planteó que no se puede “seguir alimentando a un monstruo” como es la UISE, que se lleva recursos municipales que se podrían destinar a obras o la mejora de los salarios de los trabajadores. Expuso la precarización a la que están sometidos, con salarios de 600 mil pesos y pasantes que apenas llegan a los 290 mil. También analizó varios fracasos del Ejecutivo en las votaciones que se dieron en el Concejo Deliberante, como el reciente pase a comisión de la creación del ENUTUR y del gravamen adicional a las viviendas desocupadas. Para 2025 adelantó un cambio en el esquema político del Cuerpo, que le hará difícil a la gestión Vuoto lograr mayorías agravadas.
Río Grande.- El concejal del MPF Vladimir Espeche analizó la gestión municipal e hizo un balance de su primer año como parte del Concejo Deliberante de Ushuaia. Por Radio Provincia, indicó que “nosotros emprendimos un proyecto político con Pablo Villegas hace muchos años y lo que tratamos de buscar es mejorar la calidad de vida de la gente, Pablo desde la Legislatura y yo desde el Concejo Deliberante. Siempre hemos defendido a los afiliados y a los vecinos de nuestra ciudad”, subrayó.
“Estoy en un nuevo ámbito y he estudiado cada tema. Es importante tener contacto con gente que ha tenido experiencia y la planta orgánica es la que tiene experiencia en materia legislativa. Termino un año mucho más afianzado, y voy conociendo todos los vericuetos que tiene la actividad legislativa”, aseguró.
Más allá de su conocimiento y su profesión de abogado, advirtió que el gobierno municipal “nos sorprende día a día, porque de una sesión a otra cambian cuando no les conviene algo, o quieren interpretar de distintas formas un reglamento. Lo peor que puede pasar es que subestimen a las personas, porque lo que está mal, está mal. En el Concejo lo que vi es que, cuando algo no le conviene al oficialismo, pretenden hacer ver al que está enfrente como que pone palos en la rueda sin ningún sentido”.
En la sesión extraordinaria de esta semana se reflotó un viejo proyecto que prevé un gravamen adicional para las viviendas desocupadas y los cuatro abogados del Concejo dijeron que era inconstitucional. El resultado fue el pase a comisión, con un fracaso similar al de la semana anterior, cuando no se logró aprobar el ENUTUR. “Lo feo es jugar con la necesidad de la gente, porque no es que a través de una ordenanza se van a solucionar los problemas. El problema del alquiler afecta a todo el país, pero la realidad es que hoy un empleado municipal gana menos de 600 mil pesos y muchos pares tienen pasantes trabajando por 290 mil pesos. Con eso no se puede alquilar una cama en una pensión. Tenemos sometidos a los trabajadores a una precarización. Mis pares dicen que tenemos que velar por las familias fueguinas, pero mucho de los asentamientos ilegales se deben a que la gente no puede asumir un alquiler. Uno ve que utilizan estos argumentos baratos para imponer algo que no tiene sentido, porque no va a ser operativo”, dijo del impuesto a las viviendas ociosas.
“Yo creo que no va a prosperar, porque es imposible cobrarlo. Si fallece una persona y hay que iniciar la sucesión, la casa no está habitada y no veo cuál es la conducta reprochable o la infracción del vecino. No le vi sentido a convocar a una sesión extraordinaria para tratar esto, porque los tres temas no lo ameritaban. Cada vez que convocan, se genera una sospecha, por ejemplo, la intención de otorgar mayores facultades al instituto del Deporte. El proyecto vino sin fundamentación, por eso lo voté negativamente. Nadie dio una fundamentación y se tiñe algo de sospecha”, dijo.
En el caso de la regulación para los carritos de comida, salió por unanimidad, pero con modificaciones en comisión porque el proyecto era “un mamarracho”. Espeche dio como ejemplo que se prohibía la venta de bebidas alcohólicas, cuando “ya hay una prohibición a menores de 18. Si la gente va a comer una hamburguesa, va a querer tomar una cerveza y no le veo sentido a esa prohibición. Nos constituimos en comisión, hicimos las modificaciones y salió por unanimidad, pero cuando uno plantea estas desprolijidades, se enojan”, señaló.
Cambio de esquema
Respecto de la cantidad de votaciones que salieron 6 a 4, adelantó que en el 2025 “va a haber un cambio de posición en el Concejo, en lo político, y espero que sea en beneficio de la comunidad. Creo que se va a dar otro esquema y que las mayorías agravadas no van a estar. Hay que construir consensos y no podemos llamar a una Extraordinaria con los problemas que tiene la gente, para discutir el tema de los carritos. No nos llamaron para discutir plataformas, con la cantidad de veces que hemos recibido a taxistas, remiseros, a trabajadores de UBER, que plantean el gran perjuicio que se está ocasionando al no estar regulados. Tenemos muchos temas en comisión y no pueden pasar un temario a la noche y no convocar para los temas importantes”, criticó.
“Hemos tratado de incluir el tema de plataformas como UBER, que lo planteó Valter Tavarone y Belén Montes de Oca, y todavía no pudimos tratarlo. Es una necesidad que tiene la comunidad y hay que fijar reglas claras para todos, porque hoy hay una desigualdad muy grande. En un momento uno de los concejales planteó hacer una plataforma local y está perfecto, la puede hacer, pero no puede prohibir la otra, porque es un principio constitucional el derecho a trabajar”, subrayó.
Gestión sin rumbo
Espeche instó a generar “herramientas para solucionar los problemas de la gente. Lo que estoy viendo es un modelo municipal que está agotado. No veo un rumbo y hay funcionarios que no están a la altura. Yo me reuní con la Secretaria de Obras Públicas, le presenté varios pedidos de informe, pero no hay nada en concreto. Si le preguntan qué pasa con la escalera de Karukinká que reclaman los vecinos, dice que faltan fondos. Pasa el tiempo, la escalera sigue rota y así pasa con distintas obras. No veo un rumbo ni veo una gestión”, manifestó.
“Nunca pudimos tratar el estacionamiento medido. El convenio está en el Concejo para tratarlo pero no se trató. El estacionamiento no puede ser gratis pero tampoco puede ser de la manera en que lo quieren cobrar, porque no se contempla a los locatarios, a los trabajadores, en qué lugar quieren cobrar. Es una voracidad por cobrar nada más”, subrayó.
Precarización laboral
Como positivo del año, rescató el protocolo de violencia laboral, con la esperanza de que no sea vetado. “Esto lo impulsé al ver a muchos trabajadores de todas las áreas en total desamparo. Muchas veces son sometidos a un montón de cuestiones laborales y si no hacen tal cosa, los amenazan con despidos. Hay gente sometida a una precarización laboral hace más de ocho años”, remarcó.
Estación de servicio en Renacer
Con respecto al convenio entre Renacer y un empresario fueguino para construir una estación de servicio en tierras de la Cooperativa, Espeche aclaró que todavía debe sortear los controles ambientales. “Cada vez que voto, fundamento mi voto”, aseveró, si bien se trató sin debate en comisión. “El convenio de la estación de servicio nos llegó un día antes, y era la ordenanza con el informe técnico. Pedí el expediente en el COPU y lo único que se cambia es el uso del inmueble, pero todo está supeditado al informe ambiental y a todos los informes técnicos nacionales, solamente se cambió el uso de residencial a comercial”, explicó.
“Eso me llevó a acompañarlo y creo que si ese tema se hubiera tratado con antelación, hubiera sido totalmente distinta la reacción. No entiendo por qué desde el Ejecutivo siempre es todo a último momento y todo apurado. Me pasó con la ordenanza de los carritos también, que no tenía dictamen y no creo que fuera necesario convocar a una sesión extraordinaria. Muchas cuestiones que generan sospechas e incertidumbre se deben al mal manejo que hace el Ejecutivo”, insistió.
“En el Concejo anterior estaban acostumbrados a traer un convenio, que se levante la mano y les molestaba que uno analice cada convenio. El convenio del CAEF -Club Atlético de la Educación Fueguina- en un primer momento no lo acompañé porque las cláusulas eran totalmente engorrosas, hablaban de construir un espacio cultural en tierras del club y me llamó la atención. Luego de trabajarlo, se presentó una adenda en la que se redujo el plazo y quedó claro en que no se iba a hacer ningún espacio de usos múltiples. Cuando vino el cerro Alarkén pasó lo mismo y vienen de adenda en adenda. Entiendo que el propietario tiene buenas intenciones, pero no sé por qué tiene que venir todo tan desprolijo, cuando tenemos funcionarios y abogados de planta que pueden hacer un buen trabajo. Siempre traen convenios que son un mamarracho. Falta gestión desde el Ejecutivo y lo vemos a diario, y nosotros con las herramienta que tenemos tratamos de buscar la mejor solución para la comunidad”, expuso.
ENUTUR sin consenso
A la luz de la última votación y del esquema que en concejal ve que se perfila para el 2025, se complica la aprobación del ente de turismo municipal, que contiene un impuesto al turista. “Creo que esto es muestra del agotamiento de una gestión, la comunidad dijo basta y tiene que haber un nuevo rumbo, con una nueva mirada. Espero que se oriente el destino, en beneficio de todos los vecinos. Pasó lo mismo que en la sesión extraordinaria con las viviendas ociosas, no les daban los votos y un concejal pidió que se pase a comisión. No le veo sentido y no se puede subestimar a la gente”, reiteró.
“En las personas hay una necesidad de un cambio, de que los proyectos sean más serios. Yo veo inauguraciones de cosas, puras fotos, invitan a la hermana y a cinco amigos, porque no están convocando a nadie ni están viendo lo que la gente necesita. Hay un estancamiento muy grande en la política. Hoy la gente está muy preocupada por el trabajo, la vivienda y los servicios. El problema energético que tenemos no se ha solucionado. Cuando trajeron los generadores, no habían hecho el convenio con YPF para poder suministrar el combustible. Eso es a nivel provincial pero también pasa a nivel municipal. No se ve una política que resuelva los problemas diarios de la gente. Por ejemplo, faltan rampas para personas con movilidad reducida y esos son cuestiones mínimas de gestión. Se están peleando en lo macro y no están viendo la realidad de la gente”, cuestionó.
UISE, un mal negocio
Finalmente se refirió al déficit de la UISE, que está llevando a “malgastar” fondos municipales, por lo que habría que cerrarla según su criterio. “Yo me reuní con el contador Labroca y con el personal técnico, que están tratando de hacer un buen trabajo, pero hay una realidad y la UISE es deficitaria. Es como tener un negocio que no funciona y se tiene que cerrar. Muchos de los recursos se están malgastando en la UISE y ese dinero tendría que estar destinado a obras de infraestructura o a salarios de trabajadores. Hay una política de seguir manteniendo un monstruo que no tiene sentido. Se trata de paliar el déficit a través de convenios como el de Parques Nacionales, pero el problema es la UISE y el mal manejo de los recursos de la municipalidad. Yo hice un pedido de informes porque quiero saber cuánta es la planta política de Buenos Aires, de Río Grande, de Ushuaia, porque se está malgastando el recurso y no hay un plan de gobierno claro de adónde vamos. Por eso no acompañé el presupuesto, porque no hay un rumbo claro. Necesitamos gestión y obras. Si se utilizaran bien los recursos, habría dinero para destinarlo a obras. Hay que ordenar la municipalidad porque hay mucha gente que está precarizada. Algunos tienen que ser absorbidos por la municipalidad y hay que generar programas de formación laboral y vincular a los trabajadores con el privado. Hay chicos jóvenes que ingresaron como pasantes y hay que generar herramientas, porque hay mucho recurso humano bueno que es joven. Hay chicos que se fueron a estudiar y volvieron, pero no tienen cabida. Son recursos humanos que enriquecerían mucho el trabajo de la municipalidad o de la provincia. No estamos aprovechando a los jóvenes fueguinos”, lamentó.
“Primero hay que cerrar la UISE y acomodar todos los recursos, tener una municipalidad más austera, se tiene que informatizar la municipalidad porque parece que estuviéramos en la prehistoria. Los concejales no tenemos GEN y tenemos que presentar todo en papel y es terrible el gasto en fotocopiadoras. Se necesita equipamiento y enseñarle a los trabajadores. Hoy hay personas cubriendo cargos que no tienen idea para qué están y esto genera retrocesos en todas las áreas”, concluyó.