El Dr. Federico Rauch, abogado patrocinante de casi siete mil demandantes, informó que finalizó la etapa de prueba en el mega juicio que se lleva adelante contra ocho automotrices por apropiarse de los beneficios de la promoción fueguina. Ahora viene la etapa de recopilación y análisis de esa prueba, luego de lo cual la Dra. Mariel Borruto deberá dictar sentencia de primera instancia. También, opinó sobre el subrégimen industrial y aseguró que “está muerto”, porque ya no hay promoción y los beneficios han quedado para las pocas empresas que siguen radicadas al amparo de la ley. Advirtió también que corre riesgo el régimen general y que progresivamente los fueguinos podrían tener que empezar a pagar los impuestos nacionales.
Río Grande.- El Dr. Federico Rauch informó por Radio Provincia el estado de la causa que tramita actualmente en el juzgado federal a cargo de la Dra. Mariel Borruto, con 6.900 demandantes que adquirieron vehículos entre 2001 y 2010, que reclaman indemnizaciones a ocho automotrices. “El juicio se llevó adelante de manera distal, que facilitó las cosas para las codemandadas, que son ocho automotrices e importadores de esas automotrices”, dijo.
Recordó que ya hace unos años la comisión nacional de defensa de la competencia “llegó a la conclusión de que efectivamente las automotrices se quedaron con los beneficios de la 19640, que le corresponden a los consumidores; y también que se pusieron de acuerdo para hacer eso. Si el vehículo costaba 200 pesos en Córdoba o Buenos Aires, en Tierra del Fuego debía costar 100pesos. Ese es el motivo de la demanda”, puntualizó.
“Los fabricantes e importadores trajeron un vehículo a 10 pesos, ese vehículo debió haber ingresado al área aduanera especial a 10 pesos, pero en vez de hacer eso, lo facturaban a su concesionario oficial en Tierra del Fuego al mismo precio que a los concesionarios del resto del país. De esa forma se apropiaron de los beneficios fiscales. Eso concluyó la comisión nacional de defensa de la competencia. Como consecuencia de eso impuso una multa, que después fue revocada y las empresas no pagaron un solo centavo”, repasó.
“La demanda actual que está en trámite trata la cuestión de fondo, no si ellos se pusieron de acuerdo, sino si se quedaron con esa diferencia. Se piden tres cosas: que se devuelva esa diferencia actualizada a cada una de las personas que compraron un vehículo en Tierra del Fuego; que se aplique un punitivo conforme a la ley de defensa del consumidor; y el tercer punto es que se ordene a las ocho fabricantes que cesen en la conducta que todavía siguen ejercitando, porque los vehículos en Tierra del Fuego cuestan exactamente lo mismo que en el resto del país, y a veces más, porque esa apropiación continúa. El período de la demanda va de 2001 al 2010, que es la fecha de cierre del estudio actuarial contable y económico financiera que hizo un equipo del Estado nacional”, precisó.
“A partir de que la sentencia quede firme, todas las automotrices demandadas deberán facturar los vehículos a sus concesionarios, detrayendo la totalidad de los impuestos que no pagan. Las automotrices contestaron la demanda y tienen unos 1.200 abogados entre los estudios que tienen contratados”, aseguró.
“Si la sentencia es favorable a los fueguinos, cada uno de los demandantes es acreedor, aunque haya vendido el auto, y va a tener derecho a la indemnización. A diferencia del resto del país, como estamos en un área aduanera especial, todas las operaciones fueron registradas por la Aduana y por los registros del automotor”, observó.
A la fecha se ha terminado “la etapa de prueba, falta la certificación del actuario, que tiene que hacer un trabajo muy voluminoso, porque se trata de un mega juicio. Hay que hacer una compulsa para determinar cuál es la prueba rendida, y la certificación que hicieron los demandados. Si el juez considera que con lo que tiene le alcanza para decidir, puede emitir sentencia. También puede decidir que la prueba que se hizo no le alcanza y la quiere ampliar, en ese caso tiene la potestad de pedir pruebas de mejor proceder, para tomar una decisión debidamente fundada”, dijo.
“Luego de esto se llama a autos para sentencia y finalmente se dicta sentencia de primera instancia”, apuntó de este largo proceso, que seguramente seguiría con una apelación. Se le preguntó si puede haber margen de acuerdo entre las automotrices y los demandados. “Eso es parte de la metodología a la que somos afectos los fueguinos. Si esto sale favorable, mis representados básicamente se ganaron un auto, como mínimo, y ese es el interés primario. Hasta ahora no hubo ningún acercamiento de ninguna especie. Nunca hubo una propuesta concreta y no la va a haber. El camino que ellos siguen es quitarle el juicio a la provincia y dárselo a la justicia federal, que en su momento les revocó la multa. No creo que eso sea lo que vaya a pasar. Si llegan a un acuerdo con los fueguinos, para otros podría implicar un reconocimiento tácito de que efectivamente metieron la gamba y se quedaron con mucha plata. La comisión calculó un perjuicio de casi 400 millones de dólares en ese período, 2001-2010”, subrayó. “Es difícil tapar el sol con la mano y todo el mundo sabe que en Tierra del Fuego los vehículos tendrían que valer menos que en el resto del país”, sostuvo.
La promoción fueguina “está muerta”
Por otra parte, como conocedor de la 19640, analizó el estado de situación y advirtió que la promoción está muerta, y ha quedado un subrégimen con unas pocas plantas que siguen operando. “El gobierno de Cristina Fernández, haciendo uso del artículo 32 de la ley, le quitó la exención a las petroleras, pero después se lo repusieron en la gestión de Macri y hoy la exención está vigente. A partir de ahí la AFIP no puede cobrar ningún tributo sobre las actividades petroleras dentro del área aduanera especial. El subrégimen industrial ha quedado reducido a un pequeño grupo, un club que tiene una especie de tarjeta de preferencia, por equis cantidad de años. No se puede hablar hoy de un subrégimen de radicación industrial. El subrégimen de promoción industrial está muerto y lo terminó de matar Massa. Quedan unos pequeños privilegios para los que quedaron y cerraron el acuerdo para formar un fideicomiso. Eso es todo lo que quedó y no hay posibilidad de radicar nuevas empresas, a diferencia de Brasil, donde el régimen de Manaos está vivito y coleando, incluso garantizado por una cláusula constitucional”, manifestó.
“Podríamos decir que la promoción industrial está prácticamente cancelada y quedaron los que quedaron. Los textiles están tratando de quedar entre esos. El subrégimen industrial está en estado catatónico, no hay promoción industrial en la provincia y eso es un mito. No hay libre competencia, no hay absolutamente nada. Un inversor que quiere poner plata en Tierra del Fuego dentro del subrégimen no puede, porque está cerrado. Siempre es el mismo número de plantas,mientras que en Manaos todos los años abren una planta nueva”, contrastó.
“En cuanto al régimen general, que nos pega directamente a todos nosotros, está en la cuerda floja. El gobierno de Milei, muy hábilmente, no quiso abrir ese frente porque no tiene todavía la fuerza política para hacerlo, pero no descarto que lo pueda hacer en el futuro. Así como a los petroleros por un simple decreto le quitaron los beneficios de la ley, lo mismo se puede hacerprogresivamente con la totalidad de la población y los actores económicos del área aduaneraespecial, es decir comerciantes, consumidores, empresarios, fabricantes, etc. Toda la economía puede pasar a quedar sujeta a las mismas reglas de juego que el resto del país y hay cada vez más cantidad de argentinos determinados a que eso pase. A eso colabora la mayoría de la clase política, que no hace más que meter leña al fuego con este tema, porque lo único que ha hecho estos años es defender el subrégimen industrial por razones sectoriales e intereses, y no defender la ley en su conjunto de los ataques permanentes que hay en la Cámara de Diputados. Son los propios representantes de la población de Tierra del Fuego los que hacen poco y nada por tratar de cambiar el discurso en los círculos de poder y decisión”, concluyó.
