El legislador del MPF expuso sus dudas respecto de la posibilidad de amarre de los cruceros de gran porte que se esperan para esta temporada, por la demora en las obras del puerto de Ushuaia. Cuestionó que, teniendo fondos por la colocación de bonos, no se le dé prioridad a esta obra.
Río Grande.- El legislador del MPF Pablo Villegas hizo pública su visión pesimista respecto de la posibilidad de que amarren los cruceros de gran porte esta temporada en el puerto de Ushuaia, luego de la paralización de la obra de ampliación del muelle.
Por Radio Provincia, dijo que “la empresa que tenía adjudicada la obra de 80 metros de ampliación del muelle no tiró un metro cúbico de cemento y hoy nos quedó un hermoso cartel de una obra que no se va a hacer. Esto afecta seriamente al destino turístico Ushuaia, además de la merma de ingresos a la Dirección de Puertos por el no amarre de algunas embarcaciones”.
“Había un compromiso tomado en Miami por parte de la gobernadora en 2016, de terminar la ampliación del muelle para esta temporada. Se dice que está todo bien pero no es así. Hay notas dirigidas por los operadores marítimos al gobierno de la provincia, en el mes de mayo, en junio, por parte del grupo de Royal Caribbean, de autoridades del centro de navegación argentina, donde ponen de relieve la situación delicada en la que se va a encontrar el puerto de Ushuaia en esta temporada y en las siguientes, por el incumplimiento de la palabra empeñada”, afirmó.
“Este grupo armador internacional afectó un buque de mayor porte para esta temporada y tiene una necesidad concreta de reaprovisionamiento, por lo que necesita amarrar en el puerto de Ushuaia y eso no se puede garantizar al día de la fecha”, advirtió el legislador.
Pidió prioridad para esta obra, que se puede llevar adelante con los fondos de la colocación de bonos. “No tiene sentido tener más de 6.400 millones de pesos depositados en una cuenta, producto del endeudamiento de 200 millones de dólares que tomó la provincia, y tener obras inconclusas como la ampliación del puerto de Ushuaia para permitir el amarre de estos buques”, criticó.
“Con el arribo de los cruceristas va a haber más demanda de servicios, van a trabajar más los taxistas, los remiseros, los restaurantes, los hoteles, pero yo tengo documentación a mi disposición que fue girada por el agente marítimo del grupo Royal Caribbean a la gobernadora, a la Dirección Provincial de Puertos y a otros actores que son operadores turísticos y tienen que ver con la prestación de servicios portuarios y marítimos en Argentina. Los agentes marítimos han advertido del riesgo de no cumplir con la palabra empeñada, no sólo por esta temporada sino por las que siguen, porque puede suceder que, ante el incumplimiento de la ampliación, estas empresas armadoras mundiales decidan cambiar el destino Ushuaia por otro. Esto provocaría una merma considerable de turistas y tripulantes. Para esta temporada, por el amarre de este buque de mayor envergadura, se preveía un aumento de 12 mil turistas y 8 mil tripulantes, y ese número hoy no lo tenemos garantizado”, reiteró.
“Para este corto plazo no tenemos garantía de que este buque pueda amarrar en el muelle y esto afecta el destino turístico Ushuaia. Queremos que el gobierno de la provincia no nos deje a resultas de la desidia del gobierno nacional, que dejó la obra en manos de una empresa que ha empapelado de cheques sin fondos la ciudad, y que ponga como prioridad la ejecución de esta obra”, concluyó.