Los tres primeros meses del año arrojaron resultados negativos. Qué rubros lograron crecer más que la inflación y cuáles determinaron la caída general
Buenos Aires.- Las alarmas de la caída del consumo siguen sonando. Según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), las ventas de los supermercados volvieron a caer en marzo (-9,3%) y terminaron el primer trimestre del año con una retracción del 11,5%, en comparación con igual mes del año pasado.
Se trató del tercer mes consecutivo con números negativos para la actividad, luego de las caídas registradas en enero (-13,9%) y febrero (12,7%). El dato alentador, es que se observa una desaceleración en el ritmo de caída. De hecho, fue el primer mes del año con baja de un solo dígito.
De acuerdo con lo informado por el Indec, las ventas totales a precios corrientes para marzo de 2024, relevadas en la Encuesta de Supermercados, sumaron 1.422.899,8 millones de pesos, lo que representó un incremento de 291,8% respecto al mismo mes del año anterior. No obstante, la variación no fue lo suficientemente alta como para compensar el efecto negativo de la inflación, por lo que la variación real fue del -9,3%, como se mencionó anteriormente.
Las ventas en los supermercados se pueden discriminar según el medio de pago con el que se realizan, los cuales comprenden efectivo, tarjeta de crédito, tarjeta de débito u otros medios de pago como vales, cuponeras, ticket canasta, gift card, código QR, entre otros.
En marzo de 2024, las ventas a precios corrientes realizadas en efectivo ascendieron a 277.515.438 miles de pesos, lo que representa el 19,5% de las ventas totales y muestra un aumento del 172,2% respecto a marzo de 2023. Por su parte, las efectuadas mediante tarjeta de débito sumaron 438.828.675 miles de pesos, lo que representa el 30,8% de las ventas totales y una variación positiva de 302,3% respecto al mismo mes del año anterior. Las ventas a precios corrientes abonadas con tarjeta de crédito sumaron un total de 592.789.832 miles de pesos, lo que representa el 41,7% de las ventas totales y una variación porcentual respecto a marzo de 2023 de 340,1%. Por último, las realizadas mediante otros medios de pago ascendieron a 113.765.889 miles de pesos, lo que representa el 8,0% del total y muestra un aumento del 552,2% respecto al mismo mes del año anterior.
Las ventas por rubros
Si bien el resultado general fue negativo, hay algunos rubros que sí lograron incrementos por encima del índice de inflación -el IPC avanzó 287,4% de marzo de 2023 a igual mes de este año-.
En concreto, hay tres grupos de artículos que registraron un incremento supriores al 300% nominal. Entre ellos, el más importante es el rubro de los productos de “almacén”, ítem que representa casi un tercio de la facturación total de los supermercados. Ese rubro registró una mejora nominal del 338% en el último año, con lo que logró un crecimiento en términos reales (el informe no detalla el valor exacto).
También tuvieron variaciones por encima del 300% los rubros de panadería (354%) y “artículos de limpieza y perfumería” (338,4%).
Por el contrario, hubo rubros que terminaron con variaciones nominales muy por debajo del IPC. Fue el caso de los productos electrónicos, que presentaron un aumento de facturación de 155% y el de “indumentaria, calzado y textiles para el hogar”, que registró una suba nominal del 185,1%. Ambos quedaron más de 100 puntos porcentuales por debajo de la variación del IPC.
Caen los mayoristas
Tampoco los autoservicios mayoristas tienen un buen presente. Según los datos oficiales, las ventas de ese segmento registraron una baja del 10,7% en términos reales durante marzo, en comparación a igual mes del año pasado. De esa forma, los mayoristas terminaron el primer trimestre del año con una caída interanual del 8,5%.
En detalle, las ventas totales a precios corrientes, para marzo de 2024 relevadas en la Encuesta de Autoservicios Mayoristas, sumaron 246.321,0 millones de pesos, lo que representa un incremento de 303,1% respecto al mismo mes del año anterior.
En es caso, fueron cinco los rubros que lograron variaciones nominales por encima del 300%. El de mejor resultado fue el rubro de “panadería”, que mejoró la facturación un 359,3% en términos nominales, pero su participación es tan baja en las ventas totales (0,3%), que prácticamente no tuve incidencia en el resultado general. También crecieron por encima de la inflación los segmentos de “indumentaria” (330,5%), “artículos de limpieza y perfumería” (328,7%), “almacén” (317%) y carnes (309,9%).
Fue determinante en el resultado general el rubro de “bebidas”, que representa el 11,2% del total de facturación de los comercios mayoristas. Ese ítem en particular presentó una variación nominal de “sólo” 235,1%, con lo que quedó muy lejos de compensar el efecto negativo de la inflación.