La Ministra de Trabajo marcó un aumento de la desocupación del 4% registrado el año pasado al 20% en el primer trimestre del año. Aseguró que las textiles atraviesan “el peor momento de toda la era del subrégimen”, pero algunas empresas tienen expectativas de una recuperación del consumo hacia fin de año. En la construcción sigue todo paralizado y varios trabajadores se están yendo de la provincia. Este mes comenzará a liquidarse la ayuda que reciben en forma de subsidio, que son tres cuotas de 40 mil pesos para este ejercicio.
Río Grande.- La ministra de Trabajo de la provincia, Sonia Castiglione, dio a conocer los índices de desocupación en la provincia, que pasaron del 4% registrado el año pasado, a “más del 20%” en el primer trimestre de este año. Uno de los sectores más críticos, aparte de la construcción, es el rubro textil, si bien algunas empresas tienen la expectativa de recuperar el consumo sobre fin de año.
Por FM La Isla, señaló que “la verdad son épocas de malos números y Tierra del Fuego está absolutamente en sintonía con lo que está pasando en el resto del país. En algunos sectores la desocupación está más focalizada, como ocurre en el sector textil, tanto en Tierra del Fuego como en La Rioja o Catamarca. En Catamarca han cerrado empresas y en La Rioja han suspendido y despedido hasta el 45% del personal en algunos casos. En Tierra del Fuego el sector textil está atravesando el peor de los momentos de toda la era del subrégimen, e incluso es peor que en los ’90”, afirmó.
“Yo estuve hablando con los empresarios y con los CEOs, y en general estas grandes empresas están expectantes y confiadas en que esto es una cuestión coyuntural. Tienen perspectivas de que, de acá a fin de año, algo empiece a enderezarse. Son las perspectivas de algunos y ojalá que las cosas se acomoden, pero es muy rápido el descenso y levantar no es tan rápido. Hay que recomponer una economía totalmente congelada por falta de poder adquisitivo, por la inflación que aunque parece que viene bajando, se sigue viendo en los supermercados y en todos los comercios. Es una tormenta perfecta, porque no hay actualización de los salarios, no hay poder adquisitivo, las cosas aumentan y hay un índice inflacionario que no es el que se percibe cuando uno va a comprar”, sostuvo.
“Realmente hay un enfriamiento de la economía que es motivo de todo esto que está ocurriendo. Por supuesto el diálogo con las empresas es permanente, pero es muy difícil que ellos puedan planificar algo concreto y certero en el corto plazo. Piensan más a mediano plazo y hay empresas que están buscando nuevos mercados y productos. Hay algunas textiles que empezaron a producir hace un mes y medio, porque habían estado suspendidas. Siguen trabajando y están llenando los depósitos, stockeándose, porque ventas no hay en la medida que van produciendo. Tienen la expectativa de que hacia fin de año empiece a repuntar el circulante de dinero en la calle y que la gente empiece a recomponer el consumo de las cosas que se producen acá”, confió.
“Básicamente alimentación y vestido son dos necesidades básicas del ser humano. Cuando no alcanza, no se puede dejar de comer y seguramente uno se deja de vestir. Claramente el sector textil es el que peor la está pasando de las empresas que están radicadas”, remarcó.
Los nuevos desocupados
Lo cierto es que hubo un aumento exponencial de la desocupación, comparada con el año pasado, cuando se hablaba de un 4%. “Nosotros dependemos de las publicaciones del INDEC y venimos bastante atrasados en la elaboración de los informes. El INDEC hace publicaciones trimestrales y claramente no tenemos el mismo número que el año pasado. Ese número ha superado ampliamente el 20% en el primer trimestre de este año. Estamos monitoreando los números y hemos empezado a generar un sistema propio de estadísticas y monitoreo del empleo, con datos cruzados con AFIP. Es muy bueno tener datos del INDEC, pero hay una dinámica de empleo de cada uno de los sectores que tienen actividad económica en la provincia que tenemos que monitorear. Venimos desarrollando políticas públicas de capacitación y fortalecimiento del empleo, con líneas de crédito a las empresas, pero tenemos que analizar en qué redundan todas estas acciones de infraestructura productiva, como la electrificación de la ruta 23 o la ampliación del puerto de Ushuaia. Tenemos que ver qué pasa con esto en el empleo en todos los sectores y estimo que pronto vamos a poder contar con un sistema de estadísticas propio”, dijo.
“Hay una caída de las cuentas sueldo y hay que buscar un canal para tener esa información de forma más cierta, porque se abren cuentas sueldo, luego el empleado es despedido o termina un contrato y no se cierra esa cuenta. Sigue figurando como cuenta sueldo pero ya no está empleado. Hay que ver qué calidad de información podemos recoger desde ahí y estamos viendo cómo tener acceso a los datos de todos los bancos y que nos den esa información, porque es un parámetro más”, expresó.
Puerto frenado
Con respecto a la obra del puerto, que tendría que haber comenzado con el movimiento de suelo en marzo de este año, indicó que la empresa Mirgor está “con las gestiones en nación para contar con las autorizaciones pertinentes. Esto se enfrió bastante con el cambio de gestión, porque volvieron a empezar con la revisión de algunas cosas, pero creo que están en la instancia de avance de las gestiones. La expectativa sobre los puestos de trabajo en el puerto está totalmente vigente y en cuanto ese proceso termine, la obra va a arrancar”, aseguró.
Éxodo de trabajadores
También fue consultada sobre la cantidad de residentes fueguinos que se están yendo de la provincia e hizo foco en los trabajadores de la construcción. “Hay una disminución tremenda en obras y todos sabemos que dinamiza la economía en todos lados. El problema es la paralización de las obra y esto lo hemos hablado con Julio Ramírez, de la UOCRA, por la preocupación que existe. Están trabajando un poco con el petróleo pero no hay cantidad de obras para poder absorber la mano de obra que hay disponible”, manifestó.
“Como todos los años el Ministerio de Trabajo ha activado el subsidio para la UOCRA. En este caso es un subsidio de 40 mil pesos por tres meses y esto se hace a través del gremio. En estos días van a estar cobrando el primer mes y alcanzaría a unas 300 personas. La provincia ha hecho un gran esfuerzo, el Ministro de Economía ha hecho un trabajo muy bueno, porque hay que atender muchísimas cuestiones, como la salud, la asistencia social, y se hace lo mejor que se puede en cada uno de los casos. El ministro aumentó un 30% el número que inicialmente estaba presupuestado para cada uno de los trabajadores de la construcción”, destacó.