La fábrica de pellet demanda energía para poder exportar

El propietario del aserradero El Litoral explicó los beneficios del uso de pellet para calefacción, que permite ahorrar el 50% de lo que cuesta calefaccionarse con gas envasado. La producción está limitada por la falta de energía para producir, dado que es un producto con buen mercado para la exportación. Apeló a los buenos oficios de los funcionarios y los legisladores para sacar adelante este emprendimiento, que no es contaminante y usa como materia prima los desechos de los aserraderos.

Río Grande.- El propietario del aserradero El Litoral, Ramón Rivero, quien además tiene como emprendimiento la primera fábrica de pellet de la isla, dialogó con Radio Provincia sobre los inconvenientes para producir y exportar, por falta de energía.

“Nosotros producimos palets, madera para muebles y madera para construcción. Recién este mes se empezó a reactivar un poco más la producción y se nota un repunte. Aparte de los productos elaborados, hay una parte residual que se está quemando y le buscamos la vuelta para hacer productivo ese recurso. Se me ocurrió hacer una planta de pellet, para lo que se utilizan los residuos y puede usarse en calefacción. La provincia tendría un ahorro del 50% si se usa el valor calórico del pellet, en lugar del gas envasado. Debido a que no tenemos estufas especiales para pellet, las estamos fabricando y hemos sido premiados. Estamos enfocados en un 100% en optimizar nuestro recurso, que es la biomasa. En este momento tenemos una planta de 36 personas y, si ponemos en producción la fábrica de pellet, podríamos ocupar 20 personas más”, indicó.

“Nosotros producimos una estufa que tiene tres niveles de temperatura para poder optimizar el recurso. En potencia leve consume entre 800 y 900 gramos, en potencia media 1 kilo 200 gramos y en máximo, para una casa de 200 metros cuadrados, consume un kilo y medio. Técnicamente se nos hizo complicado porque tuvimos que recurrir a productos electrónicos importados que no están en la Argentina, pero logramos fabricar una estufa totalmente electrónica, y se optimizan los recursos con motores paso a paso. Esto no es contaminante, la estufa enciende en dos o tres minutos con una bujía y es totalmente automática. Dura hasta 24 horas una bolsa de pellet de 15 kilos, en potencia leve. Eso no deja rastros de humo, no es peligroso ni explosivo, es totalmente inocuo”, destacó.

“Un ambiente de 70 metros cuadrados con 800 gramos por hora se calefacciona. Cuesta 6 mil pesos la bolsa de 15 kilos. Una garrafa con un calefactor dura 4 ó 5 días y la de 40 kilos debe costar 90 mil pesos. El costo de calefacción con pellet es el 50%. No solamente eso, sino que estamos hablando de una biomasa, de un recurso renovable, que tenemos en la isla. No es para competir con el gas domiciliario que viene por red, sino para mitigar el costo que tiene el gas envasado en las estancias y en los lugares donde las familias no tienen gas natural. Además le hacemos un favor al medioambiente porque no se queman más los residuos”, señaló.

Lamentablemente, la producción se ve limitada por la falta de energía, dado que la empresa se maneja con generadores propios. “La fábrica no podemos largarla a full por falta de energía. Todavía no tenemos la energía para hacer un trabajo continuo y fluido. Ya llevo instalada la planta más de tres años y para mí es oneroso. Este año me estoy dedicando a fabricar estufas a mi costo, y cuesta. Creo que ahora hay más crédito con los bancos y vamos a ver si podemos sacar un crédito para poder producir. Para el próximo invierno quiero tener entre 300 y 500 estufas para poder sacarlas a la venta y hacerlas más económicas. Una estufa está rondando los 2.300 dólares y las quiero hacer más económicas para que puedan llegar a las familias. Es una inversión que se hace una vez, pero después abaratan el 50% el costo. Se lo planteé a algún legislador para que lo puedan estudiar y se empiece a implementar algo de lo que es la biomasa. Ya vinieron dos legisladores y lo vieron con muy buenos ojos, inclusive la Municipalidad de Río Grande a través del intendente Martín Pérez me ha comprado un equipo de pellet para entregarlo a los productores de la margen sur. El producto anda muy bien, no tiene aditivos, y tiene un mejor valor calórico que otros productos similares”, dijo.

“Estuve hablando también con el intendente de Tolhuin, le mostré las estufas, pero los recursos que manejan son escasos. Esperamos poder salir adelante con este emprendimiento. Esto es todo para exportar y hay mercado para poder arrancar. El producto fuerte va a ser para exportar porque puedo agregar una o dos máquinas más de producción. La materia prima está ociosa, y es lo que se quema hoy en otros aserraderos. Yo apelo a la buena disposición de todos los funcionarios y que se acerquen, ha venido la gente del Ministerio de la Producción pero falta la llave, y la tiene aquel que puede aplicar más generadores para producir energía, así podemos trabajar todos. Apelo a esa inteligencia, para aprovechar nuestros recursos, agregar valor y mano de obra. Nosotros estamos dispuestos a brindar nuestro escaso conocimiento, que no es poco”, concluyó.

 

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