Hace unos cinco años Flavio Damián Noal (49) se tomó muy en serio la tarea de cuidar el Destacamento Puente Justicia y a los eventuales acampantes en verano. Integró dos unidades militares de élite del Ejército Argentino y también recorrió el país caminando haciendo una promesa a un Veterano de Guerra. Baqueano de la Isla, colaboró con el CADIC y con la Armada Argentina en balizamientos, también dijo que estuvo en Isla de los Estados. Esta es su historia.
Río Grande.- Nacido en Merlo, provincia de Buenos Aires, Flavio Damián Noal (49) se radicó en Tierra del Fuego en 1985, hoy es el protagonista de esta historia de vida que rescata 19640Noticias.
“Me vine en el ’85 y estuve hasta el ’91, me recorrí toda la isla haciendo trabajos rurales en las estancias, peón de campo, como se dice. Después anduve haciendo excursiones por mi lado con gente del CADIC y la gente de la Armada Argentina trabajando, colaborando con el balizamiento. Estuve en Península Mitre, Isla de los Estados y después me fui al norte como mochilero”, contó Noal.
En este sentido aseguró que “me recorrí todo el país caminando, cumpliendo la promesa de un camarada Veterano de Guerra, y me quedé en Río Turbio (provincia de Santa Cruz) trabajando en una mina”.
Consultado si estuvo en Malvinas, dijo que no. “Yo cumplí una promesa a un Veterano de Guerra. Todos me ven como un Veterano de Guerra y por esa razón creen que lo soy, pero en realidad soy militar retirado del Ejército Argentino, estuve en el Regimiento de Infantería N° 25 de Sarmiento, me tocó el servicio militar ahí y ese regimiento efectivamente estuvo en Malvinas y me quedé haciendo tareas hasta que me retiré. Mi último destino fue el Regimiento de Infantería Mecanizado N° 35 de Rospentek, provincia de Santa Cruz”.
Agregó que “ahora hace casi seis años que estoy de nuevo en Tierra del Fuego, me hice cargo del Destacamento Puente Justicia, debido a la destrucción que vi; también vi a mucha gente haciendo cosas ilegales, tráfico de drogas, tenencia de estupefacientes, trata de personas, tenencia de armas robadas con numeración limada, así que tuve que sacar a toda esa gente y me quedé acá cuidando el Destacamento porque es de todos, es del Estado y cuidando a la gente que viene a acampar”.
Flavio Damián Noal dijo que tiene un hermano, (Alberto Noal) “pero ahora estoy peleado con él; no soy ningún cachorro, estoy bastante grande, así que me arreglo por mi lado y acá estoy, haciendo un servicio a la comunidad y a la Patria”.
Confió que ser cuidador del Destacamento de Puente Justicia “es un servicio a la comunidad que hago, cuidándolo y por propia voluntad. Nadie me paga, lo hago por servicio a la comunidad, mi obligación como scout es servir al prójimo y hacer un mundo mejor. Hace cinco años que estoy cuidando el Destacamento. Eventualmente viajo a Tolhuin que es lo que más cerca tengo aunque a veces he ido a Río Grande y en otras oportunidades a Ushuaia; de hecho tengo novia en Ushuaia y por eso voy de vez en cuando para allá. Ella se llama Sofía y hace cuatro años que noviamos. Nos vemos seguido pero ella tiene sus cuestiones y yo las mías. Además, como Infante, ando a pata”.
“Acá me conocen todos y a más de uno les cayó bastante mal que yo les apliqué la ley porque las leyes están para cumplirse no para violarlas y otra gente sabe que estoy cuidando y respetan”, finalizó diciendo.