El referente de FORJA en la capital fueguina lanzó su precandidatura a la intendencia por el espacio que conduce el intendente Gustavo Melella y aspira a confrontar modelos con Walter Vuoto. Apunta a una campaña sin chicanas, donde se debatan propuestas, y no evitó resaltar los logros de la actual gestión, sobre los que espera seguir construyendo. Aclaró que la definición depende de quien encabeza el espacio y confía en construir también de la mano del MPF, destacando la experiencia de sus dirigentes. Respecto del candidato del PRO Héctor Stefani, opinó que “no le convence el modelo, porque dice que quiere hacer de Ushuaia algo similar a Buenos Aires”.
Río Grande.- El precandidato a intendente por FORJA Gustavo Ventura confirmó sus aspiraciones por FM Master’s, por el espacio conducido por el intendente Gustavo Melella. “Yo voy a estar donde Gustavo necesite que esté, más allá de las aspiraciones personales. Venimos trabajando con un equipo en Ushuaia y hoy tenemos siete mesas técnicas con más de cien profesionales que están trabajando en distintas áreas para tener un proyecto municipal realmente serio. No hay ningún improvisado y la verdad hemos sumado cuadros muy interesantes, así que la ciudad va a poder tener una alternativa”, afirmó.
Reconoció su falta de experiencia en política, dado que viene del sector empresario, pero “no tengo ningún problema con eso y creo que me ha aportado más de lo que me resta –dijo-. Aparte no soy un mega-empresario sino que tengo una pyme. El que conoce mi historia sabe que tengo una familia que ha estado vinculada permanentemente con el justicialismo en La Matanza”.
“Yo creo que puedo aportarle otra mirada a Ushuaia y pensar en políticas de estado, más allá de que uno esté cuatro años, para atender cuestiones que nos trasciendan, en infraestructura, turismo, y pensar en una ciudad a veinte años, más allá de la coyuntura, que plantea problemas reales. La construcción tiene que ser pensando en mañana. Nosotros imaginamos una ciudad que en cinco años va a ser prácticamente el doble de lo que tenemos hoy y hay que pensar en infraestructura para contener a la gente. Estos años han sido malos para la isla, pero la gente sigue llegando, entonces tenemos que tener la visión como estado de no estar atrás de esta situación y pensar en nuevas urbanizaciones, en servicios, y cuáles son los ejes que Ushuaia tiene para potenciar, como el turismo y las pymes”, señaló.
El pronóstico no es bueno para la próxima gestión, porque “nos van a tocar cuatro años muy malos para el país del 2020 en adelante y las perspectivas son gente desocupada que no va a conseguir empleo, sino que va a empeorar todo esto”, dijo, por lo cual el desafío pasa por la capacidad del municipio de generar trabajo “mediante la formación, la capacitación, con un estado presente en lanzamientos de microemprendimientos, de pymes. Tenemos que pensar en abrir la matriz económica de la ciudad, porque el turismo es muy importante, pero hay otras alternativas. Estamos trabajando fuertemente para hacer algo que en Río Grande funcionó muy bien, que es empezar a producir alimentos. Desde Río Grande se está produciendo lechuga, tomate y otros alimentos que ya están vendiendo a La Anónima, y era gente que estaba desocupada antes”, indicó.
“Tenemos una mesa técnica muy importante dedicada a ver cómo abrimos nuevas formas de generación de empleo, porque no hay que agrandar el estado, sino generar alternativas y acompañar a las pymes para que se generen nuevos empleos”, reiteró.
No fue crítico de Walter Vuoto, y no quiere una campaña con “chicanas” sino confrontar proyectos: “Yo soy muy respetuoso de las cosas que hizo Walter Vuoto y me pareció muy acertado el ordenamiento urbano, avanzó con las cuestiones sociales pero en el camino perdió algunas cosas que había prometido en campaña, como endeudar al municipio en 260 millones o aumentar los impuestos un mil por ciento. Hay cuestiones que impactaron de lleno en la realidad de todos los vecinos. Me parece que hay otra forma de gestionar y la visión nuestra no es destruir lo que se hizo bien, sino construir sobre lo que se hizo bien y darle nuestra impronta, que básicamente radica en que el proyecto de Río Grande pueda venir a Ushuaia”, definió.
“Me parece que hay dos elementos que no están a la altura del momento histórico que tiene Ushuaia hoy, uno son los colectivos y el otro la recolección de residuos y su tratamiento, que viene atado a eso. Hay mucho por optimizar en esos dos servicios”, puntualizó.
Adelantó que “si Gustavo Melella decide que tengo que ser el candidato por este espacio, esos dos servicios no van a seguir con esta modalidad. En Río Grande se pegó un volantazo en lo que se refiere a recolección de residuos y transporte público”, dijo, y el planteo es “dar prioridad al empresario local en estos servicios. Los puestos de los trabajadores no están en discusión y van a seguir como siguieron en Río Grande, pero nuestra impronta es que las empresas sean locales. Lo he conversado con empresarios locales y tengo la certeza de que los primeros interesados en trabajar con el futuro municipio son los ushuaienses. La premisa es que los empresarios fueguinos tengan la posibilidad de aportar y apoyar la gestión municipal”, subrayó.
En materia de deportes, dijo que “con Diego Lassalle, que es el secretario de deportes de Río Grande, hemos trabajado en un proyecto de desarrollo, porque hay áreas que hay que vincular nuevamente con la sociedad, como la cultura y el deporte. Una de las patas más fuertes de la gestión tiene que pasar por ese lado, para que los pibes no estén en la calle como lo vemos hoy. El municipio tiene que darles alternativas, como un skate park, una pileta donde realizar actividades y tener las herramientas necesarias para darles una perspectiva mejor. Estos espacios tienen que contener también a los adultos mayores, porque no tenemos espacios para ellos, y pueden realizar actividades en los mismos espacios”, afirmó.
También pidió pensar en Ushuaia por fuera del casco urbano: “Esta gestión hizo un maquillaje importante en el centro de la ciudad, pensando en el turismo, pero tenemos una ciudad más allá de San Martín, con realidades muy distintas. La ciudad está en expansión permanente y hay que definir qué calles vamos a abrir y asfaltar y dónde van a estar los servicios”, expresó.
Destacó que “FORJA ya está constituido en la provincia y hay referentes tanto en Río Grande como en Ushuaia. Adriana Chapperón viene trabajando hace muchísimo tiempo y hay una construcción seria en toda la provincia, con propuestas y un equipo interesante, y tenemos una conducción muy sólida con Gustavo Melella. Más allá de que tengamos ganas de ofrecer una alternativa para la ciudad, es Gustavo quien decide el mejor representante del proyecto, porque por sobre todo está la gobernabilidad que necesitará para el próximo período del gobierno”.
Consultado sobre una posible alianza con el MPF se mostró “respetuoso de lo que decida otro espacio político, pero en lo personal pienso que el MPF tiene que ser parte de esta estructura, no sólo a nivel provincial, sino con una propuesta para la ciudad, porque tenemos muchos puntos en común y sería todo un gusto contar con ellos en un frente provincial y para la ciudad, porque tienen cuadros muy interesantes y gente con mucha experiencia”, valoró.
Se le preguntó si declinaría su candidatura en caso de que hubiera un referente del MPF, en función de la alianza. “Eso lo decide Gustavo Melella y el armado. Por mi parte estoy en condiciones de trabajar con ellos y ver la forma en que nos sirva a los dos. El MPF también está en un momento de reconstrucción interna”, sostuvo.
“Yo le presento a Gustavo Melella cuáles son nuestras aspiraciones, pero él tiene la decisión final. No hay dudas de que quiero ser candidato a intendente, pero pertenezco a un espacio y soy respetuoso de eso. Hay que pensar en la gobernabilidad para generar las transformaciones que se necesitan”, priorizó.
De cara a la campaña espera que “todos pongamos sobre la mesa cuáles son los proyectos. Las chicanas no le sirven a nadie y propongo que nos diferenciemos por las propuestas. Nosotros tenemos una plataforma basada en lo que se hizo en Río Grande, pero con un color propio para Ushuaia, buscando proveedores locales. Nosotros vamos a proponer no meternos en ninguna chicana, sino todo lo contrario. Si Walter hizo algo bien, me parece bárbaro y, si me toca, voy a construir sobre eso, pero además queremos presentarle a la sociedad otra política y que la gente se sienta libre, que no esté atada a ningún condicionamiento para optar entre uno u otro”.
Dado que dejó fuera al diputado Stefani, se le pidió opinión sobre sus aspiraciones. “Stefani no está sobre la mesa en este momento y si quiere discutir, discutiremos los proyectos, pero la verdad no me convence el modelo, porque dice que quiere hacer de Ushuaia algo similar a Buenos Aires, o que los pone a dedo el presidente de la nación. Mi discusión es con Walter Vuoto, que ha puesto un modelo y nosotros ponemos otro”, concluyó.