Hoy se estrenará en Ushuaia y mañana en Río Grande el documental “Todos somos López. Donde empieza la vida y termina la muerte”. Las proyecciones, en ambas ciudades, contarán con la presencia de Rubén López, hijo de Jorge Julio López
Río Grande.- El documental se proyectará hoy a las 18 horas, en el IPES Florentino Ameghino, Deloqui 247, casi Rivadavia, en Ushuaia. Mientras en Río Grande será mañana sábado a las 18 horas, en el CGP Padre Zink, Pellegrini 625.
En la capital provincial la organización corre por cuenta de la Multisectorial de Derechos Humanos de Ushuaia, y en Río Grande lo convocan la Multisectorial de Derechos Humanos de Río Grande y la Municipalidad local.
Vale recordar que Jorge Julio López permaneció secuestrado entre 1976 y 1979 durante la última dictadura cívico-militar. El 28 de junio de 2006 declaró como testigo en la causa contra el ex policía de la Bonaerense Miguel Etchecolatz hombre al mando de sus secuestradores. El 18 de septiembre de 2006, día del alegato final en el juicio, desapareció por segunda vez, sin que se tengan rastros de su paradero hasta el día de hoy.
El film es una “es una crónica sobre la ausencia» según palabras del director del documental, Marcos Tabarrozzi, que recorre los días sin Jorge Julio López, quien fue testigo y querellante en el primer juicio por genocidio en la Argentina, en 2006.
López había sobrevivido a los campos de concentración de la dictadura argentina a finales de los 70, fue desapareció por segunda vez en 2006, el día de la lectura del veredicto que condenaría a sus secuestradores.
Su hijo Ruben López y su nuera Koqui Dalieri van contando cómo fueron los treinta años entre que López fue secuestrado en 1976 y 2006, cuando dio un testimonio completo: como López elaboró el trauma y el silencio que le impuso durante décadas el contexto social.
Acompañado por el periodista Miguel Graziano, Rubén recorre los centros clandestinos en los que estuvo secuestrado su padre. Va encontrándose con esa historia que su padre guardó para protegerlo en su infancia y adolescencia.
La militante Nilda Eloy y el abogado Aníbal Hnatiuk revelan detalles de la segunda desaparición de Jorge Julio López y las trabas a la investigación desde 2006, señalando el rol de una Policía Provincial que, tres décadas después de la dictadura, sigue con restos y resabios del aparato genocida.
Helen Zout y Hugo Vidal, entre otros artistas, cuentan y muestran como la imagen y el arte, mantienen el reclamo por López vivo. Un grupo de actores se juntan a ensayar y recitar las palabras de un audio perdido de López; mientras un grupo de militantes salen a pegar afiches por la causa en la noche platense.
Los escritos de Jorge Julio López, así como el testimonio que dio 2006 aparecen una y otra vez. La palabra de su esposa, Irene Savegnago, interpelan en búsqueda de justicia.
Su hijo Rubén López, quien es parte fundamental de este relato, participará del estreno y de una charla con el público tanto en Ushuaia como en Río Grande.