Las cadenas Lucaioli y Saturno Hogar cerraron sus puertas. Ambas pertenecen a los mismos dueños. La decisión pone en riesgo casi 500 puestos de trabajo. En el primer bimestre, las ventas de electrodomésticos cayeron un 31,8% respecto al año pasado y si se compara febrero contra enero la baja en la facturación es del 30 por ciento.
Buenos Aires.- Humberto Lucaioli fundó hace 58 años una casa de electrodomésticos que fue creciendo y se convirtió en una cadena con fuerte presencia en el interior del país, en especial en la zona centro y sur, en provincias como Chubut, Río Negro, Neuquén y Bahía Blanca. Cuentan con 426 empleados, 344 en Lucaioli y 82 en Saturno Hogar. Hace tres años, comenzó un fuerte proceso de ajuste.
En 2016, Lucaioli despidió a 75 trabajadores, en 2017 cerró su local de Bariloche y despidió a todos los empleados. Mientras en 2018, sólo en Bahía Blanca dejó sin trabajo a 60 empleados. Desde hace ocho meses, los empleados empezaron a cobrar su salario en cuotas. En febrero, la empresa dejó de pagar las indemnizaciones a los empleados que habían sido despedidos en 2017.
Cabe recordar que la sucursal Río Grande cerró en julio de 2016.
El secretario gremial del Centro de Empleados de Comercio (CEC), Ramón Fernández, le dijo a La Mañana de Neuquén, que la empresa pidió un procedimiento preventivo de crisis que fue rechazado. En ese contexto, por medio de una teleconferencia la empresa anunció el cierre de los locales y notificó a sus empleados «la suspensión de sus tareas hasta nuevo aviso».
La condición de «suspendidos», sin embargo, es incierta para los empleados: lo único que saben es que no tienen que ir a trabajar. Les informaron que el sueldo de marzo lo cobrarán «entre abril y mayo». «La figura de suspensión significa que los trabajadores no tienen la obligación de prestar tareas, no hablan de la garantía del pago de haberes», aseguró, por su parte, el secretario gremial del Centro de Empleados de Comercio (CEC), Ramón Fernández.
Por su parte, Musimundo sigue atravesando una dura situación, si bien uno de sus socios Carsa, pudo levantar el concurso. La empresa cerró casi 30 locales en todo el país. «Las razones de los cierres es por readecuación de las operaciones y el cambio de hábito de consumo hacia la modalidad on line y digital», confirmó el vocero de la cadena. Frávega cerró cinco locales, la mayoría en shoppings como Soleil, Alto Palermo y Paseo Alcorta. Garbarino tuvo problema de liquidez y la cadena Ribeiro paga los sueldos en cuotas. Panorama complicado para todo el sector que reclama financiación para poder reactivarse.