La ex presidente se refirió al acuerdo convocado por el Gobierno y redobló la apuesta exigiendo «algo más». En ese contexto, la senadora pidió por un contrato que «involucre a todos», incluido el «compromiso» de los empresarios. En tono de campaña, Cristina llamó a un contrato social de ciudadanía responsable
Buenos Aires.- Ante un auditorio de la Feria del Libro repleto, la ex presidente Cristina de Kirchner aseguró que “nadie puede estar en desacuerdo” de un pacto político como el que plantea el Gobierno. Sin embargo, la senadora reclamó que “haya algo más» y sostuvo que “necesitamos un contrato social de todos los argentinos”.
“En tiempos de grandes acuerdos entre sectores políticos, sociales y dirigenciales nadie puede estar en desacuerdo con esos enunciados. Pero hace falto algo más. Un contrato social de los argentinos y los argentinas con metas verificables, cuantificables, exigibles”, propuso.
Las palabras de Cristina en el lanzamiento de su libro «Sinceramente», un éxito de ventas en un contexto de profunda crisis en la industria editorial, indefectiblemente se leyeron en clave electoral.
“No hay mayor compromiso del Estado de generar las posibilidades sin que los empresarios de que se comprometan también”, lanzó la ex mandataria desde el escenario. En ese contexto, dejó en claro su manual: “No hay posibilidades sin un mercado interno fuerte”.
Claro que esa no fue la única referencia de Cristina hacia los CEO’s. En otro pasaje de su discurso, la senadora arremetió: «Nos hacen falta empresarios como instrumento de crecimiento del país y no sólo para ganar plata. Sino es muy difícil».
En el ingreso a la Feria, un grupo de personas formó una pasarela de militantes y al grito de «Vamos a volver, vamos a volver» aguardaron por la llegada de la ex mandataria. Dentro de la sala Jorge Luís Borges, dirigentes kirchneristas coparon las primeras filas.
Allí se los vio al titular de la bancada de Unidad Ciudadana en Diputados, Agustín Rossi, el presidente del PJ, José Luis Gioja, los diputados Cristina Álvarez Rodríguez y Eduardo «Wado» de Pedro, el extitular de la AFSCA, Martín Sabatella, el exministro de Trabajo, Carlos Tomada, el otrora canciller Jorge Taiana, entre otros.
En las cercanías al predio laexpectativa por el lanzamiento se hace sentir desde temprano. La «militancia» kirchenrista se fue acercando hasta la zona de Plaza Italia con consignas pidiendo por la candidatura para las presidenciales de octubre.
Por lo pronto, unas mil personas colmaron la Sala Jorge Luís Borges, la más grande del predio. A diferencia de otras presentaciones, la ex mandataria brindó un discurso de aproximadamente unos 40 minutos sin el típico esquema de preguntas y respuestas.
Sobre el escenario Cristina estuvo acompañada por la titular de la Fundación El Libro, María Teresa Carbano, y por el director en Argentina de Pengüin Random House Grupo Editorial, Juan Ignacio Boido.
Sin dudas, se trató de un acontecimiento inédito para la Feria del Libro. El evento contó con una pantalla gigante sobre la avenida Sarmiento para que los militantes siguieran en vivo la presentación.
Como era de esperarse, el cotillón K formó parte de la jornada, sobre todo en las afueras de La Rural: pañuelos, fotos y remeras con la cara de Cristina fueron de la partida. No se pudo decir lo mismo de los tradicionales puestos de comida. El diluvio desatado horas antes del evento hizo imposible montarlos.