Unos 30 trabajadores del aserradero Guaraní de Tolhuin se encontraban ayer manifestándose a la vera de la ruta 3, porque el viernes les comunicaron que se paraliza la actividad hasta nuevo aviso. Aseguran que la situación obedece a la falta de ventas y les adeudan un mes de trabajo. Piden una solución y señalaron que pretenden “seguir trabajando” para solventar “el pan de las familias y los alquileres”.
Tolhuin.- Javier Almeyda, uno de los trabajadores del aserradero, manifestó por FM “Aire Libre” que “Estamos acá porque el viernes nos enteramos que el aserradero cierra sus puertas hasta conseguir una solución, para poder pagarnos nuestro sueldo. Entonces hoy decidimos permanecer acá, porque estamos todos sin trabajo y necesitamos llevar el pan de cada día para nuestras familias”
Luego comentó que “Hay muchos que pagan alquiler, entonces necesitamos una solución. Es lo que estamos reclamando, para que la empresa pueda seguir abonándonos los haberes y que nosotros podamos seguir trabajando”.
Almeyda dijo que “Desde la empresa nos dijeron que están buscando una solución para poder pagarnos los sueldos, porque tenemos un mes todavía por cobrar. Dicen que no hay ventas por cómo están las cosas, además de las complicaciones por el tema del dólar”.
“Producción hay, lo que no hay es ventas según nos informa el patrón. Hay muchas deudas y por eso decidieron cerrar las puertas, porque si no se siguen endeudando más con nosotros” “La mayoría estamos alquilando, salvo un par que tienen su vivienda, somos más de 30 personas que nos estamos quedando en la calle y sin trabajo”, precisó el trabajador del aserradero.
Consultado sobre la tarea que venían realizando cuando se paralizó la actividad, dijo que “Estábamos realizando todo lo que es tirantería, madera de construcción, y carpintería”. Después indicó que “El patrón ya nos venía diciendo que no hay ventas, que llevaban maderas y no se las pagaban, por ahí le daban cheques con plazos de pago muy largos. Eso lo venía comunicando desde hace un par de meses”, remarcó.
Después mencionó que venían “luchándola para ver si podíamos salir entre todos, pero el viernes nos informó que cerraba las puertas hasta poder juntar el efectivo para pagarnos. Por eso decidimos juntarnos para ver si podemos encontrar una solución entre todos, porque tenemos familia que tienen que comer y hay alquileres que pagar”.
Finalmente señaló que “Los dueños del aserradero Guaraní son la familia Fregosini, pero quien está a cargo en este momento es Sergio Ditre”. “Él se encuentra acá, estuvimos hablando y está buscando una solución. Lo que queremos es seguir trabajando”, concluyó Javier Almeyda.