El Dr. Francisco Giménez, abogado de las presuntas víctimas de abuso sexual y querellante en la causa que también investiga irregularidades en la obra pública, consideró la denuncia en su contra por lavado de activos como una “evidencia del nerviosismo” que tienen los allegados al intendente Melella. Aseguró que “van a terminar presos todos” y sostuvo que el denunciante, José Pellegrino, representa “a toda la banda” que investiga la justicia. Además, le advirtió al letrado que no será “gratis” y espera que tenga el patrimonio suficiente para costear la demanda por daños y perjuicios que prevé iniciar. No negó ser uno de los dueños de un club de polo en Buenos Aires, pero aclaró que no tiene por qué explicar su patrimonio, al no ser funcionario público ni proveedor del Estado, en ninguno de sus niveles.
Río Grande.- El abogado de la querella en la causa contra el intendente Gustavo Melella, Dr. Francisco Giménez, se refirió a la denuncia penal radicada en su contra por el letrado que patrocina a dos de las empresas investigadas por irregularidades en la obra pública, el Dr. José Pellegrino.
La presentación fue derivada al fuero federal, por tratarse del delito de lavado de activos, y apunta a una investigación patrimonial del Dr. Giménez, bajo la presunción de enriquecimiento por aportes del gobierno fueguino, que le habrían permitido adquirir un club de polo en la provincia de Buenos Aires.
Por FM Del Pueblo, el Dr. Giménez sostuvo que “no recibí ningún tipo de notificación, pero es un muy gracioso esto. Hay veces que cuando a uno lo denuncian determinadas personas, es una condecoración que uno se lleva y lo pone orgulloso”.
Para Giménez, “Pellegrino es el representante de toda la banda a la cual he denunciado. El Fiscal Quadrini ha iniciado una investigación en contra de empresas amigas del municipio, que se han enriquecido con dineros públicos. Son empresas que no existían antes de la gestión Melella y de la noche a la mañana desplazaron a las que siempre realizaron obra pública en la ciudad de Río Grande”, dijo.
“Yo soy una persona privada y ejerzo mi actividad en forma privada. No soy funcionario público, no soy proveedor del estado ni lo he sido, no tengo contratos con la municipalidad, como sí los ha tenido Pellegrino, ni con ningún otro organismo del estado nacional, provincial o municipal. Al ejercer mi actividad privada, mi patrimonio forma parte de mi intimidad y no tengo obligación de rendirle cuentas a nadie de lo que hago con el dinero que me gano trabajando”, expresó.
“No tengo por qué decir si tengo un club de polo o no. En todo caso es una gran satisfacción mía y me puedo dar los lujos que se me ocurran, porque no dependo de fondos públicos ni soy funcionario público. Eso es una obviedad que no resiste el menor análisis ni explicación”, remarcó.
“Pueden investigar todo lo que se les ocurra, pero les va a salir caro seguramente, porque denunciar a una persona por lavado de activos no es gratis, así que espero que Pellegrino tenga el patrimonio suficiente para responder después por los daños y perjuicios”, le advirtió a su denunciante.
Giménez se ve afectado en su buen nombre y honor porque la acusación de lavado de activos implica “una actividad ilícita, y lo loco es que los que denunciaron la red de corrupción en la municipalidad de Río Grande terminen siendo investigados. La primera denuncia que a mí me clavan la hizo el propio juez de la causa, a mí a una de las víctimas de abusos sexual. Ahora tanto el fiscal (Guillermo Quadrini) como el abogado querellante terminan siendo investigados, pero esta denuncia no tiene ningún asidero y evidencia el nerviosismo que tienen a raíz de la última ampliación de denuncia que presenté ante los tribunales. La verdad que le han errado”, consideró.
Adelantó que “por esta causa de la obra pública van a terminar presos todos y cada uno de los involucrados, porque las denuncias no fueron desestimadas sino todo lo contrario: ameritaron que el fiscal Quadrini tenga que hacer un análisis preliminar y emitir un requerimiento, que es el inicio de la investigación. Esto es lo que se está haciendo”.
Respecto del club de polo del que sería dueño, insistió en que “no es obligación mía dar cuenta de mi patrimonio en forma pública. Los funcionarios públicos que se enriquecen ilícitamente son los que tienen esa obligación. Seguramente me habrán investigado, habrán entrado al Veraz o al Nosis, y se habrán dado cuenta de que soy accionista de una sociedad anónima que es propietaria de ciertos bienes. Esos bienes están absolutamente declarados y blanqueados, y por eso sale en las bases de datos públicas o privadas, así que de mi parte no tengo nada que ocultar”, manifestó.
También se refirió a la denuncia contra el fiscal Quadrini por mal desempeño y fraude procesal, radicada por el Dr. Pellegrino, y dijo que “es la típica denuncia o el modus operandi de cualquier delincuente que se siente acorralado por la justicia y empieza a denunciar al juez, a los fiscales o a las personas que lo investigan, para desviar la atención. Esta es una maniobra absolutamente típica y una operación que no conduce a nada, porque todos los que me conocen saben de qué vivo y cómo empecé, porque llegué a Tierra del Fuego hace 30 años, con una mano atrás y otra adelante, y lo que hice fue en base al trabajo, y no sacándole plata al estado”, concluyó.