Los mercados hablaron por sí solos. La reacción del mundo económico al anuncio de la fórmula Macri-Pichetto demostró que, para los empresarios, el pragmatismo elegido por el Presidente fue el mejor camino que pudo haber tomado en el actual contexto político-electoral.
Buenos Aires.- El senador Miguel Ángel Pichetto, a quien muchos hombres de negocios cuestionaban duramente durante su etapa de extrema fidelidad al kirchnerismo, ahora aparece como la figura salvadora. Así lo recibieron los empresarios nucleados en IDEA en el precoloquio que finalizó hoy, cerca de las 18, en el hotel Casino de Neuquén, del que también participó, al cierre, el presidente Mauricio Macri.
La nueva dupla llegó a esta ciudad para seducir al mundo corporativo y garantizarles a los empresarios que mantendrán las reglas de juego. Y el establishment, nuevamente envalentonado, le dio un nuevo voto de confianza al Gobierno.
«Lo que tenemos que hacer es lo que hemos hecho. Ser mejores en lo que hemos sido hasta el presente. Y ratificamos esto. Pero lo más importante también es ser previsibles; estas reglas que generamos no las podemos cambiar», dijo Macri, quien fue entrevistado por el presidente de IDEA, Gastón Remy, y el titular del Coloquio, Federico Procaccini, para cerrar la jornada.
Y aseguró: «Quizá muchos de los que estén acá prefieran esperar un poco antes de poner primera de nuevo. Pero una vez pasada las elecciones, estamos convencidos de que seguiremos en el camino iniciado».
Lo escuchaban 800 empresarios que llegaron a Neuquén para participar de un precoloquio que tuvo como temática discutir sobre el desarrollo de Vaca Muerta y los desafíos que el yacimiento tiene por delante. El clima era particularmente exultante, ya que el sector energético, y sobre todo el vinculado con la explotación del petróleo y el gas no convencional, es uno de los que tracciona, en momentos de recesión.
Las cifras fueron planteadas claramente por el secretario de Energía, Gustavo Lopetegui: la Argentina todavía está en el jardín de infantes con Vaca Muerta; tiene sólo el 4% de su territorio explotado y, por ende, un gigante potencial.
Pero más allá de este nicho de bonanza, hay una renovación de la confianza en el Gobierno por gran parte del empresariado. Los aplausos al Presidente y a su compañero de fórmula que se escucharon en la sala fueron categóricos. Tanto Macri como Pichetto se mostraron distendidos y confiados en que la estrategia fue la correcta. Y así lo percibieron los empresarios, que recibieron la noticia con confianza y alivio de que se allanan los caminos para la continuidad de Cambiemos, ahora rebautizado «Juntos por el cambio».
«Pichetto garantiza gobernabilidad. Amplía la base y genera consensos y eso es muy positivo. Los mercados ya hablaron», aseguró el CEO de Ternium, Martín Berardi. Procaccini también se mostró favorable a la decisión de Cambiemos de abrir su espacio para poder continuar y señaló: «Estamos buscando políticas de Estado. Está bueno poder debatir en torno a qué políticas aplicar para poder, por ejemplo, ir reduciendo la pobreza».
También aplaudió la decisión de Macri de sumar a Pichetto como candidato a vicepresidente Miguel Blanco, de Swiss Medical, quien planteó que «se van a alinear a las fuerzas antisistema y a los que dicen que van a respetar la Constitución. Se diluye el medio, va a ser interesante». «Lo había escuchado a Pichetto y la posición que tuvo en Nueva York va en la línea de apostar por la consolidación del sistema democrático. Es lo mismo que estamos proponiendo nosotros», agregó en ejecutivo que también preside el Foro de Convergencia Empresarial.
Rosario Altgelt, gerente general de LATAM Airlines Argentina y presidente del Coloquio 2018, expresó que «fue una jornada muy intensa, con la pluralidad y diversidad de voces e ideas que necesitamos para la construcción colectiva de nuestro país». Además, respecto de los recientes anuncios partidarios afirmó que «la expresión de la diversidad política y la generación de consensos de diferentes sectores sin dudas constituye la base para la creación de los puentes que necesitamos para construir un país en constante movimiento».
El evento comenzó a las 14, con un discurso de apertura de Procaccini, y no tuvo cortes. Si bien estaba programado un coffee break para media tarde, los cambios de agenda obligaron a suspender ese breve impass. Hubo varios paneles de interés en los que expusieron el economista Ricardo Arriazu, los CEOs de las empresas petroleras nacionales e internacionales; el secretario de Energía, Gustavo Lopetegui; el sindicalista petrolero, Guillermo Pereyra, y el asesor de Alberto Fernández, Guillermo Nielsen.
Pero el plato fuerte llegó a las 17, cuando Pichetto se subió al escenario. «Ante la duda, es mejor el coraje. Por eso, acepté la candidatura», resumió, ante el deseo de los empresarios de saber cómo se había gestado esa decisión. Y el cierre quedó para el Macri, quien en un tono muy distendido se mostró confiado en que la Argentina podrá retomar el camino de crecimiento.
