El legislador electo por FORJA recordó que hace dos años el gobierno tomó la misma tónica de plantear un ordenamiento de las cuentas provinciales y, después de las elecciones nacionales, una crisis al punto tal que sobre fines de 2017 corría riesgo el pago de salarios en una cuota. Ahora la Gobernadora sostuvo que le cuesta juntar dinero para los aguinaldos, luego de haber convertido en un bono el adelanto. “Yo me permito no creer ni una cosa ni la otra”, dijo, y espera ver los números de la provincia para poder hacer un diagnóstico sobre una base real.
Río Grande.- El Dr. Federico Greve, apoderado de FORJA y legislador electo, opinó sobre el giro en el discurso de la gobernadora Bertone, que plantea ahora una grave situación en la provincia, luego del ordenamiento que se presentaba durante la campaña, a punto tal de convertir en un bono no reintegrable el adelanto del aguinaldo.
Por Radio Fueguina se le consultó sobre esta advertencia de Bertone a Melella de que no podrá cumplir con las promesas de campaña, que incluyen la recomposición salarial de los estatales, porque no hay recursos. “Es la misma actitud de la elección de 2017. El gobierno provincial tomó la misma estrategia, de decir que estaba todo bien antes de las elecciones, que había que acompañar a los candidatos de la gobernadora, que era Laura Colazo en su momento; y después de la elección se hizo una reunión de gabinete y se vaticinó que la provincia estaba en una debacle financiera y que no se iba a poder afrontar sin el esfuerzo de todos los fueguinos”, repasó.
“Yo me permito no creer ni en una cosa ni en la otra. Uno tiene que tener un equilibrio y poder decir cuándo realmente las cosas están bien y cuándo están mal. Si hay algo que destacamos de Melella como intendente de Río Grande y gobernador electo, es que siempre dijo la verdad. Cuando leíamos los números nacionales y decíamos que había crecido la pobreza y la indigencia en Tierra del Fuego, nos dijeron que éramos los jinetes del Apocalipsis porque traíamos los peores augurios, y no era más que ver la realidad”, sostuvo.
“Cuando se habla de la realidad y las cosas importantes, lo que hay que decirle a la gente es lo que hizo cada uno. Si uno endeudó la provincia, si uno descontó a los trabajadores, no está del lado de la gente. El ajuste que ellos plantearon quedó claro en las urnas que no es el camino que quiere seguir la gente de Tierra del Fuego”, subrayó.
Se le preguntó si cree que Bertone vuelve a equivocar el camino retomando un discurso confrontativo con Melella, cuando ya pasaron las elecciones provinciales y faltan las nacionales, donde también es candidata. “Eso es una cuestión muy personal y yo no puedo opinar sobre lo que quiere hacer o no la gobernadora respecto de presentarse nuevamente a elecciones. Nosotros tenemos bien en claro que para nosotros no son importantes los cargos públicos sino lo que hacemos con esos cargos, el cuerpo que le ponemos a cada una de las decisiones del gobierno. Esto no tiene que ver con perpetuarse en cargos públicos sino con trabajar por los vecinos. Si ese es el objetivo, nos parece que es importante que podamos discernir quiénes están en los cargos para trabajar por la gente y quiénes están porque no se quieren quedar sin un cargo político”, dijo.
“Esa es una decisión personal de Bertone y no es el objetivo que tenemos como fuerza. Estamos en las antípodas de eso y queremos trabajar en función de los que le planteamos al electorado en campaña”, manifestó.
Lo cierto es que, más allá de las declaraciones mediáticas del gobierno, “hoy no tenemos ningún dato oficial sobre la situación de las finanzas de la provincia”, lamentó Greve.
“En la Municipalidad no tenemos números certeros porque el portal de transparencia de la provincia está desactualizado y la información que se le pueda pedir al Ministerio de Economía será a través del contador Bahamonde, que tendrá la tarea de hacerse de los números y de los reales estados contables de la provincia. Nosotros nos abocaremos a trabajar con el gobierno provincial en la conformación del proyecto de presupuesto para octubre, porque independientemente de la carrera electoral uno tiene que trabajar por la provincia. En estos seis meses de transición se va a sancionar el presupuesto del año que viene, que será el primer año de gobierno de Gustavo Melella”, remarcó.
Con esta suerte de paraguas que abrió Bertone, Greve no ocultó cierto recelo sobre lo que puedan encontrar: “Yo me permito tener dudas sobre el estado contable, porque hay contradicciones en lo que dicen y lo que llevan a la práctica. Si nos dicen que está todo mal, que no tenemos para dar aumento, no sé por qué endeudamos la provincia para hacer un par de obras, que no sabemos si van a generar el empleo que dicen que van a generar, ni tampoco sabemos si eran prioridad para los fueguinos. Habrá que reestructurar muchas de esas cosas para ver cómo se lleva adelante el programa de gobierno que tenemos para la provincia”, adelantó.
“Para nosotros por ahora hay incertidumbre. Independientemente de que se hable del estado de las cuentas, en la cancha se ven los pingos. Uno quiere ver los estados contables, la ejecución del presupuesto, el avance de la obra pública. Hay un sinfín de cosas por ver puntualmente. Uno no niega que hay problemas en la provincia, porque sería esconder el sol con las manos. Creer que la provincia va a ser una panacea es no darse cuenta de que el país está en una situación muy delicada. Pero para poder encarar y resolver un problema, uno primero tiene que reconocerlo, tomar el diagnóstico de lo que hay que hacer y empezar a hacerlo. Ese es el procedimiento que vamos a seguir”, indicó.
Se le preguntó cómo se entiende que le cueste a Bertone juntar para pagar los aguinaldos, cuando en campaña convirtió el adelanto del aguinaldo en un bono: “Eso es parte de la gestión del Gobierno provincial. Ya los fueguinos dieron su opinión y quieren un cambio del sistema. No es lo que quiere la mayoría de los fueguinos y está demostrado al haber ganado en primera vuelta. Las decisiones que se están tomando desde el Gobierno provincial no conforman a la mayoría de los fueguinos. Son decisiones políticas de una gestión de gobierno, pero los vecinos se han manifestado, quieren transformarlo y a eso nos vamos a abocar a partir de diciembre”, concluyó.