El legislador electo Daniel Rivarola, dirigente del Centro de Empleados de Comercio de Río Grande, estimó en 400 los puestos perdidos en la gestión Macri en la zona norte. Aseguró que el 2019 fue el peor año y no se observa ningún repunte hasta el cambio de gobierno. Confía en que las ventas de fin de año sirvan para poder afrontar los aguinaldos, pero advirtió que enero es uno de los peores meses para el comercio por el éxodo vacacional. De cara a su nuevo rol, adelantó su intención de participar de la comisión de salud y seguir de cerca el desarrollo de la OSEF, sin ninguna información hasta el momento sobre la situación actual. Cuestionó la serie de medidas que está llevando adelante el gobierno saliente “en el último mes”, cuando pudieron debatirse en los cuatro años precedentes. De avanzarse con alguna norma, indicó que la próxima Legislatura podrá revisarlas.
Río Grande.- El legislador electo y dirigente del Centro de Empleados de Comercio, Daniel Rivarola, indicó que “no hay ningún viso de recuperación y estamos esperando el cambio de gobierno. Hasta esa fecha la única esperanza para el sector del comercio es la subida en las ventas de fin de año”.
“No paramos de contar gente despedida”, lamentó por Radio Fueguina, y precisó que “llegamos a 274 compañeros en lo que va de 2019, y ya desde el año pasado venimos planteando un despido por día. Calculo que en los cuatro años de Macri hemos perdido 400 puestos en el comercio de Río Grande, y es un número muy alto para el sector. Definitivamente este es el peor año de los cuatro, con mayor cantidad de pymes y comercios, mayor achique en las fábricas, y todavía nos espera la incertidumbre con la gente de limpieza”.
“No hay un rubro que se salve, desde la limpieza de fábricas al supermercadismo, y sobre todo el sector de tiendas ha perdido mucho. Había comercios que tenían un solo empleado o dos y son los que no han podido soportarlo. Recuperar esto va a demandar varios años. Para el comercio la reactivación obedece a la apertura industrial. Esto implica que las fábricas se pongan de pie, que las nuevas actividades en Tierra del Fuego por ampliación de la matriz productiva permitan ingresos en otros sectores. Eso va a hacer que se reactive el mercado”, dijo.
“En la medida en que ingrese gente a la industria y la actividad productiva, el comercio va a recuperar personas para atender”, planteó sobre los condicionamientos.
Pago del bono
Consultado sobre el pago del bono de 5 mil pesos, dijo que “no hemos hecho un control exhaustivo porque conocemos la situación de cada comercio. Nosotros hicimos un acuerdo flexible, en cinco cuotas, aunque hubo empresas que lo pagaron en dos veces. Hay gente que todavía tiene espalda y lo pudo sostener, y gente que no la tiene y no lo puede sostener. Estas fiestas van a ser una bocanada de oxígeno que le sirve al comerciante para poder hacer frente a los aguinaldos. Esto, en el caso de los que siguen teniendo trabajo y están debidamente registrados, porque otra realidad es la precarización en el sector comercial. No va a cambiar nada y hay que ver cómo se da el período vacacional en Tierra del Fuego, donde normalmente hay un éxodo mayoritario y esto hace que enero sea uno de los peores meses para el sector comercial”, sostuvo.
“Veremos qué sucede este año, porque siempre decimos que estamos en crisis pero al momento de contar autos en la frontera, vemos que la gente abandona la isla y el sector comercial pierde, porque el trabajador que percibió el aguinaldo normalmente no lo gasta acá. Hay que ver cómo reactiva el sector industrial en enero para ver si podemos sostener todos los puestos del personal de limpieza de las fábricas”, manifestó.
“Hemos perdido trabajadores con mucha antigüedad, como en el cierre de Montecarlo, o los despidos de La Anónima. Estos compañeros sobreviven con la indemnización que pudieron cobrar, el fondo de desempleo y las asignaciones universales. Es una agonía hasta ver la posibilidad de conseguir otro empleo. Muchos intentan algún emprendimiento individual para llevar algo a la olla mientras dure el desempleo, con estas ventas que tanto critica la Cámara de Comercio. Ahí empieza la discusión sobre la posibilidad de la venta sin registro, que es algo que hay que regular en el futuro, porque la gente busca los precios más baratos. Igualmente están fuera del sistema, no tienen acceso a la salud, a la jubilación”, observó.
Respecto de la posibilidad de regular la situación con alguna ley, dijo que “habría que ver cómo podemos manejar este tema desde la Legislatura. Yo lo hablé en campaña con la Cámara de Comercio y les expliqué que en realidad esto obedece a una situación coyuntural por la falta de empleo. Cuando el sector industrial se reactive y la gente vuelva a las fábricas, esa gente que hoy es microemprendedora transitoria y no por vocación, va a volver a buscar el empleo industrial o el fijo, para generar su jubilación, su asignación familiar y su obra social. Entonces va a bajar el nivel de ventas en redes sociales o por canales informales”, pronosticó.
“Esto es una discusión nacional, porque por más que prorroguemos el subrégimen, si no hay poder de compra en el continente no se va a vender. El país apostó a un cambio de gobierno justamente por una necesidad de empleo y de poner de pie nuevamente el sector industrial”, subrayó.
Presupuesto reconducido
Respecto del presupuesto 2020, dijo que “la idea es que el nuevo proyecto sea tratado por la Legislatura que viene. Mónica Urquiza ya tiene elaborado un borrador y el presupuesto se tiene que ajustar a la estructura política que vamos a presentar a partir del 17 de diciembre. Hoy no tiene sentido aprobar un presupuesto y tampoco se quisieron presentar en comisión los funcionarios del gobierno actual. Eso demuestra parte del abandono del barco y dejar que las cosas fluyan”.
“Cabe la posibilidad de sesionar los primeros días de enero y todo va a depender de lo que encontremos cuando se ingrese a Casa de Gobierno. Obviamente la Legislatura va a estar a disposición y de parte de nuestro bloque no va a haber problemas. No se van a repetir las sesiones entre gallos y medianoche, no va a haber sorpresas, porque justamente por esas sorpresas me alejé de la gestión Bertone. Así que no voy a replicar situaciones que no concuerdan con mi manera de pensar”, se comprometió.
“Hoy yo sé dónde quiere ir el gobierno electo pero no me ocurrió lo mismo al inicio de esta gestión. Yo no sabía que lo que iba a ocurrir. A partir de mi primer día en el Ministerio de Trabajo empecé a elaborar lo que tenía proyectado con respecto a los PEL, que era la discusión del momento, cómo elaborar un proyecto de trabajo para incluir a la gente en el sector privado y regularizar el control laboral. Pero arrancamos con el primer pedido de despedir gente del mismo Ministerio y ahí empezó el shock. Cuando llegaron los listados, yo tenía que despedir a todos los inspectores de seguridad e higiene que habían entrado a cumplir tarea, con concurso y rindiendo examen. No tenían un año de antigüedad en planta, pero se desarticulaba completamente el Ministerio de Trabajo. Yo dije que no iba a despedir a la gente y ahí empezaron los roces. Se apuntó después a los talleristas de Cultura, se pretendió cambiar a todos los PEL por una empresa de limpieza en el hospital, ahí me sentí de nuevo dirigente gremial porque sentía que se estaban atropellando derechos. Pasamos de los PEL que ganaban 2 mil pesos a empleados de una empresa de limpieza que ganaban 24 mil. El problema fue el procedimiento y cuando renuncié fue muy claro lo que dije. Posiblemente las medidas del gobierno eran políticamente correctas, pero gremialmente incorrectas”, calificó.
Se le consultó si opinó sobre quién debería ser el Ministro de Trabajo de Melella. “Hubo algunas sugerencias y fundamentalmente colaboré con el tema estructural, conociendo el paño di mi opinión. Si hay algo de lo que no me pude quejar nunca es del personal de planta del Ministerio. Hay sectores muy capacitados, como el de fiscalización, el de laborales, y le falta la impronta política. No se puede dejar a un agente en la sala de audiencias simplemente tomando nota, como me ha pasado este año. Se necesita tomar postura y este Ministerio se ha lavado de manos absolutamente”, cuestionó.
“Más allá de las sugerencias, Gustavo Melella va a buscar una persona de su confianza. Ya nos conoce y sabe dónde estamos cada uno. Yo me puse a disposición de quien sea para colaborar, conociendo todos los sectores”, dijo.
La próxima Legislatura
Respecto de las expectativas frente a la nueva Legislatura, indicó que espera “mucho trabajo y mucho diálogo, porque hay que consensuar. Tenemos la capacidad de hablar y, si pretendemos hablar de leyes en pos de la producción y el empleo, no creo que haya muchas voces contrarias del otro lado”.
“Mi intención es estar en la comisión de salud y creo que ahí no puede haber mucha discusión sobre lo que uno pretende para la salud de Tierra del Fuego. Aparte de dirigente gremial, yo soy representante de la obra social y puedo hablar de la parte prestacional. Voy a seguir de cerca el estado de la obra social del estado. La administración ha sido poco transparente porque a la fecha no tenemos ningún tipo de información con respecto a la OSEF. Tenemos algo de información con respecto a la caja pero no de la OSEF. Tengo que ver el tipo de contrataciones, por qué las prestaciones, y por qué se saca un prestador para poner otro. Los afiliados se quejan de que les sacan su profesional y nadie les explica las razones. La parte administrativa se tendrá que ir analizando y estudiando”, adelantó.
Goteo diario
También se le preguntó sobre la ley de goteo diario, teniendo en cuenta que el gobernador electo dijo que es parte de los compromisos de campaña y que además va a pagar la deuda del gobierno con el Municipio de Río Grande. “Esto se va a debatir obviamente y no vamos a fijar postura hasta tanto no se plantee el proyecto. No tiene que ser todo apurado y a última hora. La legisladora electa Laura Colazo ha planteado la presentación del proyecto, habiendo participado del Concejo Deliberante donde nunca reclamó la deuda del gobierno. Tendremos que sentarnos a debatirlo y no estamos cerrados para nada”, señaló.
Ampliación del ejido de Ushuaia
Asimismo, cuestionó la pretensión de avanzar con la ampliación del ejido de Ushuaia. “No entendemos por qué se tiene que hacer todo el último mes. Tuvieron cuatro años y se podría haber avanzado en este tema. Lo mismo ocurre con el tema de las chacras. Si recorremos las escuelas, vamos a encontrar carteles de ampliación y construcción de SUM, que son obras de tres, cuatro o cinco millones de pesos. Son compromisos que ellos no van a pagar, y uno no sabe si están devolviendo facturas. Ya faltan 25 días y hay que parar la pelota, dejarlo para la próxima Legislatura, que es más plural, y que discuta todos estos temas. Pero no siendo autoridad en ejercicio, no podemos más que opinar. No se puede legislar para atrás pero sí se puede corregir, y ese va a ser el trabajo que va a haber que hacer”, concluyó.