La Provincia desembolsará casi 702 millones de pesos para subsidiar el consumo de gas envasado de 7450 familias durante el periodo enero-septiembre de 2018. Además, abonará otros 15 millones en concepto de gastos de transporte para importar gas desde el Continente, y así garantizar el abastecimiento y la normal prestación del servicio.
Río Grande.- Tras arduas negociaciones con las empresas proveedoras, que venían reclamando un incremento en el precio del gas envasado debido al aumento de sus costos de producción a consecuencia de la disparada del dólar, se acordó establecer en $1,60 el valor del kilo de gas en garrafas y $1,30 el kilo de gas a granel que deberá pagar el usuario durante el periodo enero-junio del 2018. En ese lapso, la Provincia aportará en concepto de subsidio $20,27 por kilo, y la Nación $5,30.
Para el periodo julio- septiembre de 2018, el usuario abonará $2,50 por kg, tanto de gas de garrafas como a granel, la Provincia aportará $23,27 en concepto de subsidio, mientras que lo aportado por la Nación seguirá en $5,13.
Según lo determina la normativa nacional, el consumo subsidiado por vivienda es de 240 kilos en verano y 450 en invierno estando a cargo de la provincia un estimado del 78% del valor total por kilogramo de gas.
Cabe destacar que la Provincia viene incrementando el importe abonado en forma sostenida, siendo 44 millones de pesos desembolsados en el 2014, 60 millones en el 2015; 172 millones en el 2016 y 400 millones en el 2017. Significando un aumento en el subsidio promedio anual por usuario de 9.084 en 2014, 10.831 en 2015, 28.885 en 2016 y 62.038 en 2017.
Actualmente, Tierra del Fuego cuenta con 7450 usuarios empadronados que reciben el subsidio al gas, y que percibirán en el período enero a septiembre del presente año, en promedio, un subsidio equivalente a $70.600.
Teniendo en cuenta la importante erogación, y para posibilitar el acceso de los fueguinos a una mejor calidad de vida es que el Gobierno provincial implementó el programa “Llegó el Gas” que tiene por objetivo que todas las familias estén conectadas a la red de gas natural, lo que significará un importante ahorro tanto para el Estado como para los propios vecinos.