La imagen de la Virgen de Luján estuvo en Río Grande donde fue recibida por los veteranos de guerra encabezados por presidente Raúl Villafañe (nuevo presidente del Centro de Veteranos de Guerra ‘Malvinas Argentinas’), el padre Guillermo Romano y los jóvenes de ‘Generación Malvinas’ y desde el 30 de diciembre a la tarde –tras pasar por Tolhuin- llegó a Ushuaia a la Capital de Malvinas, para luego seguir viaje a la Antártida.
Río Grande.- La imagen de la Virgen de Luján que estuvo en nuestras Islas Malvinas en 1982, regresó a Tierra del Fuego después de 37 años. La imagen que protegió a los soldados argentinos durante la guerra permaneció todo este tiempo en manos británica y luego de varias gestiones regresó a Argentina, donde comenzó un recorrido que finalmente la trajo primero hasta la ciudad de Río Grande –donde fue recibida por los veteranos de guerra encabezados por presidente Raúl Villafañe (nuevo presidente del Centro de Veteranos de Guerra ‘Malvinas Argentinas’), el padre Guillermo Rom
ano y los jóvenes de ‘Generación Malvinas’ y desde el 30 de diciembre a la tarde –tras pasar por Tolhuin- llegó a Ushuaia a la Capital de Malvinas, para luego seguir viaje a la Antártida.
Cabe destacar que la Prefectura Naval Río Grande la subió a uno de sus gomones, ceremonia de la que participó también el único veterano de guerra de Malvinas de Prefectura que vive en Río Grande, Carlos Vallejos.
Su viaje hasta Tolhuin fue acompañada por tres veteranos de guerra y dos integrantes de ‘Generación Malvinas’ de Río Grande, como Roma Alancay y José Luís Guizado.
En el Corazón de la Isla estuvo en la famosa panadería La Unión y su responsable Emilio Sáez estuvo con la imagen sagrada.
Asimismo, estuvo en el Destacamento de la Policía de la ciudad de Tolhuin donde acompañaron los sacerdotes Guillermo Romano y Luís Ascona.
También, la sagrada imagen visitó el Destacamento de Lago Fagnano de la Prefectura Naval Argentina.
Luego, la comitiva riograndense acompañó a la imagen de la Virgen de Luján hasta la misma entrada de Ushuaia.
Fotos gentileza familias Guizado y Baimácovich.