Las restricciones para comprar dólares y el recargo del 30% para operaciones de compras fuera del país seguirán por tiempo indeterminado, confirmó el presidente Alberto Fernández.
Buenos Aires.- El Alberto Fernández precandidato, antes de que el por entonces presidente Mauricio Macri impusiera un cepo cambiario que fue haciendo cada vez más duro, dijo en julio del año pasado que en caso de resultar triunfador en elecciones el cepo al dólar no iba a volver. No sólo lo mantuvo, sino que lo endureció con un impuesto del 30% y hoy afirmó que por ahora es imposible levantar ambas medidas ante las necesidades de divisas que tiene la Argentina.
Fernández también insistió en que el país no puede «cumplir» con el pago de la deuda al FMI en los vencimientos establecidos por el gobierno anterior porque se estaría «sumiendo a la economía en una postración absoluta».
«Por el momento no se está evaluando suspender ni modificar el incremento del 30%» en la compra de divisas, sostuvo Fernández en diálogo con radio Continental.
«El problema que nos dejó Mauricio Macri es que no hay dólares en la Argentina, y como no hay divisas, y las que hay las necesitamos usar muchas veces para pagar insumos y producir, preferimos preservar esos dólares», explicó.
El jefe de Estado le pidió a la población que «veranee en Argentina y trate de evitar llevarse dólares al exterior, porque no es que le estamos quitando el derecho, le estamos diciendo que cada dólar que sale al país le cuesta mucho», planteó el presidente.
Sobre el cepo al dólar, Fernández señaló: «No es una medida que me guste pero por el momento no veo una solución a ese problema. Por ahora se va a mantener».
Consultado sobre si un buen resultado en la negociación con el FMI podría allanar el camino para discutir luego con los bonistas, Fernández graficó: «Son dos caminos que se necesitan, no sé si se cruzan, pero sí se necesitan».
«De ninguna manera», respondió el Presidente cuando le preguntaron sobre la posibilidad de cumplir con los términos de los próximos vencimientos.
«Quisiéramos destinar el pago de la deuda a la reestructuración de la economía; si pagáramos, igual no nos va a alcanzar, pero estaríamos sumiendo a la economía en una postración absoluta», advirtió.
Fernández planteó que el pago de deuda que hizo la provincia de Buenos Aires días atrás «no es la regla» y que eso se decidió porque se evaluó que, en el inicio de las conversaciones, no era conveniente incumplir.