La inflación de enero fue de 2,3%, como resultado de la tensión entre el congelamiento de tarifas y la estabilidad en la cotización del dólar y, por otro lado, la presión aportada por el reintegro del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a los alimentos de la canasta básica. El índice de precios al consumidor publicado por el INDEC volvió a ser el más alto entre los países de América del Sur, después de Venezuela.
Buenos Aires.- La información fue difundida por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), que también señaló que el acumulado interanual alcanzó al 52,9%, inferior al 53,8% previo, debido a que la inflación mensual fue menor al 2,9% registrado en enero de 2019.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) del primer mes del año se ubicó debajo del 3,5% que surgió del promedio de las consultoras, bancos y economistas convocados por el Banco Central en el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), y acorde con la previsión formulada el martes por el presidente de la autoridad monetaria, Miguel Pesce, quien había adelantado una inflación “menor al 3%”.
Asimismo, la inflación fue la más baja de los últimos seis meses, ya que hay que remontarse al 2,2% de julio de 2019 para encontrar un porcentaje menor. Desde entonces, con el impacto de la disparada de la cotización del dólar luego de las PASO, los índices mensuales fueron de 4% en agosto, 5,9% en septiembre, 3,3% en octubre, 4,3% en noviembre y 3,7% en diciembre.
La inflación de la Argentina volvió a ser enero la más alta de América del Sur a excepción de Venezuela, cuyo índice alternativo aún no fue dado a conocer por la Asamblea Nacional, en un mes en el que salvo el 2,09% registrado en Uruguay los índices de precios de la región fueron inferiores al 0,5% e incluso en Bolivia hubo una deflación de 0,03%.
En el informe del INDEC se especificó que en enero los precios de los servicios tuvieron un alza del 1,6% en tanto los bienes subieron 2,6%, reflejándose por un lado el congelamiento de las tarifas de servicios públicos y los acuerdos con las empresas de medicina prepaga y, por el otro, el impacto que tuvo la restitución del IVA a un conjunto de alimentos a los que se les había bajado a cero la alícuota (del 21% o del 10,5%, según el caso) entre el 15 de agosto y el 31 de diciembre.
Alimentos y bebidas no alcohólicas, el capítulo con mayor ponderación del IPC, tuvo un incremento del 4,7%. En las subas se destacan carnes y derivados, infusiones, azúcar, dulces y golosinas. Otro capítulo relevante, como Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, tuvo un incremento del 0,6%; el Indec destacó que este rubro, en diciembre, había incluido dentro de las expensas la incidencia de la bonificación anual pagada a los encargados de edificios.
Entre los capítulos con incidencia estacional en la temporada estival, Recreación y cultura registró una suba del 5,0% y Restaurantes y hoteles del 4,2%.
Al mismo tiempo, otros dos ítems de los que componen el índice de enero registraron bajas. Uno es Equipamiento y mantenimiento del hogar, que descendió 1,3%, por causa de la baja en el costo del servicio doméstico en relación a diciembre, mes en el que se incluyó una asignación extraordinaria.
También se registró una baja de 2% dentro del rubro Salud, producto del acuerdo celebrado por el gobierno con los laboratorios para retrotraer los precios de los alimentos a los valores de diciembre.
Por otra parte, la inflación núcleo fue el mes pasado de 2,4%, mientras que los precios regulados crecieron 1,1% y los estacionales 3,6%.
Entre las primeras medidas tomadas por el presidente Alberto Fernández pocos días después de asumir se destacaron el congelamiento por 180 días de las tarifas de servicios públicos y el mantenimiento de las restricciones cambiarias, que en el corto y mediano plazo permite contener la cotización del dólar.
En ese sentido, la petrolera YPF, de mayoría estatal, tuvo que rever a principios de mes la decisión de aumentar el precio de sus combustibles.
De esta manera, luego de la devaluación del peso entre abril de 2018 y octubre de 2019, la divisa estadounidense se mantiene en los últimos tres meses en un escenario de relativa estabilidad, a modo de “ancla” para evitar una suba generalizada de precios.
Sin embargo, en los últimos tres meses la inflación acumulada se ubicó en torno del 11,5%, generándose de esa manera una apreciación cambiaria que podría profundizarse si los precios minoristas siguen subiendo en porcentajes mayores a los de la cotización del dólar.
Los rubros que más se encarecieron en enero
Recreación y Cultura (5%), Alimentos y Bebidas (4,7%) -en la que varios de sus productos volvieron a tributar IVA este mes- y Bebidas Alcohólicas y Tabaco (4,3%) fueron las tres categorías que más se encarecieron y se ubicaron incluso por encima del índice general de precios durante enero.
En cuarto lugar se ubicó el rubro Restaurantes y Hoteles (4,2%). Por debajo de la inflación general, en tanto, quedaron Transporte (1,5%), Vestimenta (1,1%), Vivienda (0,6%) y Educación (0,5%).
Asimismo, se registró una caída del 2% en Salud y del 1,3% en Mantenimiento del Hogar.
Los datos surgen del Índice de Precios al Consumidor (IPC) que difundió este jueves el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), el que da cuenta de que la inflación de enero se desaceleró al 2,3%.
Para Alberto Fernández, el dato de inflación de enero es «auspicioso, pero no suficiente»
El presidente Alberto Fernández consideró ayer a la tarde que el dato de inflación correspondiente a enero será «auspicioso, pero no suficiente», minutos antes de que el INDEC informara que el índice de precios al consumidor llegó al 2,3%, mientras que un mes antes había cerrado en 3,7%.
En enero finalizó la medida que reducía a cero la alícuota del IVA para alimentos de primera necesidad.
«El dato de enero es auspicioso, pero no suficiente», evaluó el jefe de Estado, seguramente en conocimiento de la cifra final, y advirtió que se debe «ir con mucho cuidado».
Sin embargo, en la medición anual, en comparación con igual mes de 2019, el costo de vida acumuló un incremento de 52,9%, indicó el organismo encargado de las estadísticas.
Al ser consultado en Radio Rivadavia respecto de las acusaciones de la oposición sobre que su administración no tiene un plan económico, argumentó: «Tenemos un plan. Es más, tenemos dos. Por si pasa ´a´, o por si pasa ´b´».
Aseguró que los dirigentes que consideran que no hay plan «chicanean» a su gestión.