Alberto Fernández consiguió ayer el respaldo político que buscaba para extender la cuarentena, incluso con una flexibilización más tenue de lo que se especulaba en los últimos días. En una teleconferencia que encabezó desde la residencia de Olivos, los gobernadores dieron un apoyo unánime a la medida de confinamiento general y coincidieron en la necesidad de reforzar el combate contra la pandemia del coronavirus. Además también les anunció la creación de un programa de emergencia financiera de 120 mil millones de pesos para asistir a las provincias.
Buenos Aires.- Alberto Fernández consiguió ayer el respaldo político que buscaba para extender la cuarentena, incluso con una flexibilización más tenue de lo que se especulaba en los últimos días. En una teleconferencia que encabezó desde la residencia de Olivos, los gobernadores dieron un apoyo unánime a la medida de confinamiento general y coincidieron en la necesidad de reforzar el combate contra la pandemia del coronavirus.
«Los epidemiólogos me dicen que debemos mantener la cuarentena», les comunicó Alberto Fernández, minutos antes de las 18, en el inicio de una conversación en la que anticipó que en la etapa que comenzará el lunes se mantendrá el aislamiento obligatorio para la mayor parte de la población, en especial en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), donde se registra el 70 por ciento de los contagios. La misma regla se aplicará a distritos con transmisión local del virus, como la provincia de Chaco y ciudades de Córdoba, Santa Fe y Tierra del Fuego.
El Presidente no anticipó cuáles serán las nuevas actividades exceptuadas ni hasta cuándo prorrogará la cuarentena. Tampoco había dado detalles el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, en la cumbre con empresarios y sindicalistas, que se hizo a la mañana, en la Casa Rosada.
Fernández hará los anuncios el fin de semana, dijo en la teleconferencia, sobre la base de informes que les pidió a los mandatarios acerca de qué actividades deberían retomarse. Eso sí, adelantó que no se reanudarán las clases y que seguirán suspendidos los vuelos de cabotaje y los viajes de media y larga distancia.
«Queremos minimizar al máximo la circulación en transporte público, es el lugar ideal para contagiarse. Cuanta menos densidad de personas, mejor será», dijo el Presidente, escoltado por el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof , y el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta . En la sala, equipada con tres pantallas, también estaban los ministros Ginés González García (Salud) y Eduardo De Pedro (Interior); el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello , y el ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quiroz .
Lanzamiento de programa de asistencia financiera a las provincias de 120.000 millones de pesos
El Gobierno nacional creará un programa de emergencia financiera de 120 mil millones de pesos para asistir a las provincias. Los fondos se distribuirán conforme a los porcentajes previstos en la ley de coparticipación y también a través de préstamos puntuales que solicite cada gobernador. Ante la caída de la recaudación, Alberto Fernández le anunció en videoconferencia a los mandatarios provinciales, incluido Horacio Rodríguez Larreta, que la Nación saldrá en auxilio de las provincias para atenuar el impacto del aislamiento social obligatorio más allá de las actividades que ya fueron exceptuadas como comercio exterior, la obra privada de infraestructura energética, además de las vinculadas con la producción, distribución y comercialización forestal y minera, entre otras.
Sin embargo, y más allá del programa de emergencia financiera anunciado a los gobernadores, no todas fueron buenas noticias para las provincias. El Gobierno ya decidió que tampoco se levantará el aislamiento social obligatorio en los distritos donde aún no se detectaron casos de coronavirus. Se trata de Catamarca, Chubut y Formosa. Pero también San Juan, con un solo caso diagnosticado, así como Salta y La Pampa con tres, tenían expectativas de una apertura mayor de la actividad económica a partir del próximo lunes. El confinamiento volverá a ser declarado a nivel nacional.
El Presidente también analizó junto a los gobernadores un Protocolo para adultos mayores y para adultos vulnerables que se implementará a partir del lunes. Este sector de la población seguirá con el confinamiento obligatorio pero se flexibilizaría el régimen de contacto con las familias de acuerdo a un procedimiento de higiene y salubridad previo que incluirá como sugerencia el uso de máscaras para prevenir contagios en mayores de 70 años.
“¿Qué sectores podrán volver a funcionar?”, preguntó a un funcionario que pivotea entre Casa Rosada y Olivos. “Hoy los gremios, la Cámara Argentina de Comercio y la UIA nos dejaron sus propuestas. Son por rama de actividad. Matías Kulfas y Claudio Moroni van actuar de nexo, y la propuesta final va a ser validada por el Ministerio de Salud”. Si bien el listado no está definido, desde Presidencia explicaron que “el principal parámetro va a ser el transporte público. Se van a liberar aquellas actividades que no saturen ni colectivos ni trenes ni subtes donde queremos evitar que se acumule gente”. Un ejemplo microeconómico para ilustrar el criterio es que no se permitirá el regreso al trabajo de empleadas domésticas. Las clases no tiene fecha de retorno. En el Gobierno no descartan adelantar las vacaciones de invierno a mayo y salvar así dos semanas de calendario escolar.
Participaron de la comunicación virtual los gobernadores de Chaco, Jorge Capitanich; de Chubut, Mariano Arcioni; de Córdoba, Juan Schiaretti; de Corrientes, Gustavo Valdés; de Entre Ríos, Gustavo Bordet; de Formosa, Gildo Insfrán; de Jujuy, Gerardo Morales; de La Pampa, Sergio Ziliotto; de La Rioja, Ricardo Quintela, y de Misiones, Oscar Herrera Ahuad. También estuvieron presentes los mandatarios de las provincias de Neuquén, Omar Gutiérrez; de Río Negro, Arabela Carreras; de Salta, Gustavo Sáenz; de San Juan, Sergio Uñac; de San Luis, Alberto Rodríquez Saá; de Santa Fe, Omar Perotti; de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; de Tucumán, Juan Manzur; de Catamarca, Raúl Jalil; de Santa Cruz, Alicia Kirchner; de Tierra del Fuego, Gustavo Melella; de Mendoza, Rodolfo Suárez, y el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Rodríguez Larreta.
El Presidente, que ya se había reunido con los 24 gobernantes el 19 de marzo pasado en Olivos, horas antes de anunciar el aislamiento obligatorio, les confirmó tal cual había adelantado Ámbito que la cuarentena dispuesta a partir de la pandemia de coronavirus «va a seguir después del 13 de abril” con carácter nacional. Antes de la cumbre virtual, el Presidente y Wado de Pedro habían recorrido el Centro Sanitario en Tecnópolis donde el Gobierno nacional montará uno de los espacios para atender casos leves de Covid-19, con disposición de 2.500 camas no hospitalarias en una primera etapa, en el marco de un plan integran que prevé la disposición de más de 16 mil para el AMBA.
En Olivos dan cuenta de que la extensión podría ser de, al menos, unos diez días más.
Hubo, según fuentes oficiales, apoyo en ese plano de las provincias. “Hay que fortificar la cuarentena”, abundó, por ejemplo, Ricardo Quintela, de La Rioja. Todos se mostraron de acuerdo en la continuidad de la suspensión de las clases. Por tiempo indeterminado. Hubo además pedidos para protocolos unificados en el uso de los barbijos. El Presidente dijo que había que machacar con el uso de barbijos caseros.
Fernández dejó, en tanto, un mensaje que llevó algo de alivio a los mandatarios: remarcó que habrá un apoyo financiero extra para las arcas provinciales, asfixiadas por la crisis económica que corre en paralelo a la sanitaria y que preocupa por igual a todos los gobernadores.