La ministra de Salud Judith Di Giglio reveló que fueron detectadas personas con coronavirus que, sin tener el alta, salieron de su casa violando el aislamiento obligatorio, y se procedió a radicar la denuncia penal correspondiente. Aseguró que hay una vigilancia estrecha de los casos, como también ocurrirá con los fueguinos que arribaron en el avión de ayer y tienen prohibido salir de sus hogares. Además explicó la situación que surgió en el hospital, con un caso positivo que llegó desde Ushuaia para hacer una capacitación para la atención del 107, y derivó en el aislamiento de todos los que tuvieron contacto estrecho.
Río Grande.- La ministra de Salud Judith Di Giglio dio una extensa entrevista a FM Aire Libre, donde hizo referencia a la situación que puso en alerta al hospital local, tras el arribo de una persona de Ushuaia que tenía coronavirus y obligó a aislar a todos los que tuvieron contacto estrecho.
En principio destacó que se logró “amesetar” el contagio: “El viernes se confirmaron dos casos nuevos en Ushuaia. Analizando la curva de contagio y la evolución de los casos, si hubiéramos continuado como al inicio tendrían que ir duplicándose o triplicándose día a día o cada 48 horas. Si ven la mitad de evolución de la curva, se iban duplicando o triplicando el número de positivos. Dos casos nuevos en 80 quiere decir que logramos la meseta, gracias al aislamiento social preventivo y obligatorio. Esto es muy positivo pero el hecho de lograr una meseta no quiere decir que no vayamos a tener más casos. Hemos logrado algo muy importante, que es detener la velocidad de transmisión del virus, pero no el contagio”, advirtió.
“A nivel nacional se espera el pico para mitad de mayo y se cree que esto se va a dar en cada provincia y en cada ciudad, pero apuntamos a que no colapse el sistema sanitario y que todas las personas puedan tener atención. Esto nos alienta a seguir con el aislamiento preventivo y obligatorio”, sostuvo.
Consultada sobre el traslado de tres personas desde Ushuaia al hospital de Río Grande para hacer una capacitación del 107, entre las cuales se detectó un caso positivo de COVID-19, dijo que “todos los servicios esenciales estamos trabajando y en contacto con la pandemia, y somos los que primero nos vamos a infectar. Esto sucede en todos los países y va a suceder en el nuestro. En este caso fue personal de Protección Civil que está a cargo junto con Salud del servicio pre-hospitalario. Hay una persona que organiza este servicio y Ushuaia fue la primera ciudad que tuvo que ir organizando el servicio a medida que iba aumentando el número de casos. Cuando llegaron a la ciudad de Río Grande estas tres personas no eran casos sospechosos ni estaban en aislamiento. Lo que sucedió es que la esposa de una de estas personas, en el momento en que estaban en la ciudad de Río Grande, dio positivo porque trabaja en salud en la ciudad de Ushuaia. En ese momento se tomaron todas las medidas necesarias, todos fueron aislados, se realizó el hisopado en Río Grande y uno de ellos dio positivo, pero permanecieron en aislamiento desde el momento en que pasaron a ser casos sospechosos. De forma preventiva se aislaron algunas personas que estuvieron en contacto estrecho. Es muy probable que no se hayan contagiado pero se los aisló de manera preventiva y se los trata como si fueran positivos. Había un médico de Río Grande que estuvo en contacto estrecho y un enfermero del hospital, más otras dos o tres personas en contacto estrecho con el 107. Hasta el momento no se sabe si están infectados o no”, señaló.
“Yo estoy en contacto constante al igual que el personal de salud y somos los más expuestos. Es muy difícil evitar la transmisión, si bien utilizamos elementos de protección personal, porque estamos trabajando todos los días”, expuso.
Se le preguntó si no se podía hacer la capacitación por el sistema de videoconferencias para evitar este riesgo: “Nosotros utilizamos muchísimo este método, ya entrenamos una persona de Defensa Civil que va a quedar a cargo del operativo de trabajo en conjunto del 107 con el área de Epidemiología. Esa persona está en funciones y sabemos que cada vez necesitamos más gente trabajando. Hay capacitaciones que son difíciles por videoconferencia y en medio de una pandemia estas son cosas que van a pasar. En este caso se activó el protocolo enseguida con el aislamiento preventivo”, aseguró.
“Hay un porcentaje de personas asintomáticas que transmiten la enfermedad y aunque se haga un hisopado antes de que salga de la ciudad de Ushuaia en este caso, no indica que pueda tener la enfermedad, porque da positivo generalmente cuando ya hay síntomas. Si el test da negativo no quiere decir que esa persona no vaya a tener y transmitir la enfermedad. Por ejemplo, el contacto más estrecho del positivo, que era la esposa, dio negativo”, planteó.
Aclaró que los que llegaron de Ushuaia desconocían el contagio: “Estas tres personas estuvieron más de un día en Río Grande y cuando la esposa de uno de ellos inició como caso sospechoso, se hizo el estudio en el día porque es una persona de salud y a la noche tuvimos el resultado. No es que el marido viajó sabiendo que su esposa era positiva. Los directores del hospital no están aislados, ni Viviana Müller ni Cristian Tejedor, y están trabajando. Ellos no fueron contacto estrecho”, apuntó la ministra.
El recambio en Total
Con respecto a la gente que llega porque trabaja en el petróleo, dijo que “no la hisopamos en el momento de llegar, porque puede ser que dé negativo pero en dos días desarrollen la enfermedad y ya hayan contagiado al resto de sus compañeros, por eso tienen que realizar la cuarentena. Se realiza un trabajo conjunto entre el Municipio de Río Grande y el área de Salud de la provincia. Sabemos que debemos garantizar la producción de petróleo porque es un servicio esencial, y los trabajadores de la Total, en este primer recambio desde que estamos en cuarentena, tuvieron el control sanitario en el aeropuerto y vienen en diferentes aviones porque cumplen distintas tareas dentro de la empresa. El viernes se coordinó el control en el aeropuerto, además firmaron una declaración jurada por la que deben cumplir la cuarentena, y están alojados en un hotel realizando el aislamiento obligatorio. Luego irán a su puesto de trabajo y se hará el recambio de personal”, explicó.
“Los que van a salir de la provincia no estuvieron en contacto con nadie y realizan la cuarentena en su trabajo. Estos son vuelos privados y la empresa se ha encargado de todo esto, que informa sobre las personas que van en el avión. La empresa informó que realizaron la cuarentena en su lugar de origen, pero nosotros no lo podemos certificar, por eso están haciendo la cuarentena acá. Al séptimo día se les va a realizar un hisopado, porque tienen contacto estrecho en su lugar de trabajo”, dijo.
Más respiradores
Por otra parte, se le consultó sobre la cantidad de respiradores, e informó que “desde Nación estamos recibiendo tres más. Son ocho los que nos han enviado hasta ahora desde el Ministerio de Salud y van a ser destinados a las ciudades de Ushuaia y Río Grande. En Río Grande hay otro respirador donado por la empresa Mirgor. El hospital de Río Grande va a contar próximamente con cuatro respiradores más”.
En cuanto al número de camas, detalló que “en Río Grande había una obra a punto de finalizar para ginecología y obstetricia y se preparó una sala completa con oxígeno. Estas habitaciones están completamente aisladas del resto del hospital. Ahí se está realizando la internación de los pacientes que lo necesiten, y hay 12 camas con oxígeno. Después están las camas del servicio de clínica médica y de cirugía. Todas las internaciones y cirugías que no tengan que ver con el COVID son derivadas al Sanatorio Fueguino o al CEMEP. El hospital está a entera disposición para recibir pacientes que requieren internación por coronavirus. Además los abuelos de la residencia del adulto mayor del hospital han sido trasladados a Lazos de Amor, en Mosconi y Piedrabuena. Ese lugar se está acondicionando y va a ser el hospital de día, donde los pacientes oncológicos van a poder realizar quimioterapia. Sabemos que son inmunodeprimidos y es un lugar que está separado del resto del hospital”.
“También se está haciendo una compra para poner camas en la unidad de pronta atención de la margen sur. Este lugar cuenta con oxígeno, que es lo más importante, e incluso se puede hacer una terapia intermedia. Luego tenemos disponibles los hoteles, que sirven para la internación de personas que no requieren oxígeno”, agregó.
En resumen, precisó que “Río Grande cuenta con 12 camas de terapia intensiva en el CEMEP, 5 camas de terapia intensiva en el Sanatorio Fueguino, 7 camas de terapia intensiva en el hospital, y son camas de alta complejidad. El número de respiradores se puede duplicar en caso de ser necesario, porque tenemos las mesas de anestesia y los respiradores que se van a preparar en estas habitaciones que tienen oxígeno en la ampliación del hospital. Después tenemos las camas de clínica médica y cirugía. El hospital puede llegar a contar con 80 camas y puede llegar a tener hasta 30 respiradores. El problema es el recurso humano, que tiene que ser capacitado, porque no todos los médicos sabemos usar un respirador. Es la limitante que hemos encontrado en todos los países, porque además el recurso humano se enferma. Desde el Ministerio de Salud de la Nación se están realizando capacitaciones a diferentes especialistas para que puedan manejar los respiradores, como cardiólogos, neumonólogos, que podrían manejarlos en una situación de emergencia”, dijo.
Remarcó que “la ciudad con la tasa más alta de respiradores por número de habitantes es Nueva York, y sin embargo el sistema sanitario colapsó. En caso de un colapso de un sistema sanitario nadie puede predecir el número de respiradores que se va a necesitar”.
También dio cuenta de los testeos, siendo Tierra del Fuego la que más ha realizado en relación a su población. “Hasta el viernes se habían realizado 426 en toda la provincia. El promedio de determinaciones a nivel nacional hasta el viernes era de 361 por millón de habitantes, y nosotros somos la provincia que más testeó hasta el momento. Esto indica que tenemos una elevada vigilancia epidemiológica y estamos buscando los casos, por eso logramos detener la curva. Estamos haciendo las cosas bien y tenemos que continuar de esta manera. Además, estamos teniendo una alta tasa de negatividad”, expresó.
Río Grande en “etapa previa”
Además la ministra informó que “la situación de Río Grande es distinta de la de Ushuaia, porque no hay circulación viral. Está en una etapa previa. Sabemos que hay circulación viral en Ushuaia, en la provincia de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y Chaco, y el uso de elementos de protección personal depende de la situación de cada ciudad. El cubreboca da seguridad, pero la medida más importante es la distancia de dos metros entre una persona y otra. En base a la situación epidemiológica de cada ciudad existe un protocolo de los elementos de protección a utilizar”, expuso, para explicar por qué en Ushuaia es obligatorio el cubreboca.
Fueguinos de regreso
Asimismo, se le consultó sobre el vuelo comercial de ayer domingo, para traer ciudadanos de la provincia y dijo que el protocolo “estuvo a cargo del Ministerio de Salud de la Nación, que asegura que cada persona haya cumplido la cuarentena previo a subir al avión. Además hubo un control en Ushuaia y una declaración jurada de que cumplieron el protocolo. Los esperó el equipo sanitario, porque nadie puede ir a buscarlos al aeropuerto, y se dispuso el transporte a su lugar de residencia en Ushuaia, Río Grande y Tolhuin. Van a estar en aislamiento obligatorio por 14 días, y para nosotros están en seguimiento como casos sospechosos, por eso no pueden salir de su domicilio”, alertó.
La ministra reveló que hubo casos positivos que violaron la cuarentena, poniendo en riesgo a toda la población, y ahora deben enfrentar una causa penal: “Nosotros hemos denunciado a personas que, siendo casos positivos y sin tener el alta, han salido de su casa. Estas personas han sido denunciadas penalmente y tenemos un sistema de vigilancia que los controla”, concluyó.