Así graficó el gremialista Diego Noya sobre la adquisición de la turbina Sullair de la DPE comprada por el gobierno de Rosana Bertone y cuya inversión fue de 12 millones y medio de dólares. Noya participó del plenario de la Comisión de Presupuesto del parlamento provincial en el marco de la discusión por la creación de la empresa Terra Ignis SAU y estimó que la inversión necesaria para optimizar la generación de energía eléctrica en Ushuaia “que está en terapia intensiva” es de unos “ocho millones de dólares”.
Ushuaia.- El Presidente de la Comisión N° 2 de la Legislatura provincial, el radical Federico Sciurano, recibió a la mesa del debate por la creación de la empresa de energía Terra Ignis SAU (Asunto 455/2020 enviado por el Ejecutivo provincial), al secretario adjunto del Sindicato Regional de Luz y Fuerza de la Patagonia, Diego Noya y al secretario gremial Pedro Leonardo Brangeri.
Noya, quien es operador de la turbina de la Dirección Provincial de Energía –DPE- consultó al plenario de la comisión legislativa sobre cómo quedaría la DPE ante la posibilidad de aprobarse una nueva empresa con participación estatal. “Nos preocupa muchísimo el artículo 3 del proyecto donde se establecen las potestades que la empresa (Terra Ignis SAU) va a tener en materia de generación, transporte, distribución y comercialización de energía eléctrica, qué será la suerte de la DPE y qué papel terminará cumpliendo ¿será solamente un ente regulador?”, preguntó.
Otra de las consultas de Noya fue “sobre qué pasará con los trabajadores, qué va a pasar con cada uno de nuestros compañeros y qué va a pasar con nuestros puestos de trabajo”.
Finalmente planteó sobre el destino del 49 por ciento del paquete accionario de la hipotética empresa y si éste “¿es el edificio, la mano de obra o los camiones?”, volvió a preguntar.
A su turno, la legisladora del Partido Verde, Victoria Vuoto, preguntó a los gremialistas “qué tipo de inversión necesita la DPE en Ushuaia en el tema de los generadores y de qué magnitud estamos hablando”.
Ante este cuestionario, Noya respondió con risas y dijo que “es amplia porque el deterioro no es de ahora, no es (solamente) de la gestión que pasó ni de la anterior, sino que es amplia. Desde mi humilde opinión, los 12 millones de dólares que se pagaron por las tres turbinas fueron innecesarios porque esa plata hubiese sido invertida en otra cosa. Se compró un Ford T con la carcaza de un Audi”, graficó el dirigente gremial.
Aseguró que “los software de las tres turbinas que se compraron, están totalmente desactualizados y no se pueden actualizar. Tenemos un montón de problemas; solamente como ejemplo puedo decir que las máquinas fallan porque los sensores del sistema de combustible líquido no funcionan y no pueden generar en líquido porque ni siquiera están”.
Volvió a graficar como “una Caja de Pandora lo que se ha comprado y la inversión que se necesita para mejorar la situación es grande, pero lo que más nos preocupa y que es lo más urgente, es la máquina generadora principal que está en terapia intensiva desde hace más de dos años”.
Finalmente, ante la consulta del presidente de la Comisión, legislador Federico Sciurano, sobre qué monto es necesario para poner en óptimas condiciones la generación de energía eléctrica en Ushuaia, Diego Noya lo estimó en 8 millones de dólares.
La compra de la turbina
Cabe recordar que en noviembre de 2018 la provincia compró la turbina para Ushuaia con tres turbogeneradores, lo que le demandó más de 12 millones de dólares de fondos propios.
Esta turbina y sus tres generadores se integraron a una nueva central termoeléctrica de la DPE para la ciudad de Ushuaia y en su oportunidad el Gobierno provincial aseguró que permitía una segura prestación del servicio sin los altos costos de alquiler de generadores que se pagan hace 12 años.
La compra de estos equipos tuvo un intenso debate en la Legislatura, compuesta mayoritariamente por legisladores del oficialismo.
El gobierno de Rosana Bertone esgrimió que de no llevar adelante la inversión, la ciudad de Ushuaia se iba a quedar en un 30% por debajo de la demanda de energía.
Las turbinas denominadas ‘delivery’ son móviles y se utilizaban en todas las provincias con metodología de alquiler, esto subsidiado por Nación. Hasta que el Gobierno nacional del entonces presidente Mauricio Macri anunció que no alquilaba más las turbinas y Ushuaia se quedaba sin cubrir la demanda.
Las tres turbinas tenían motores 0 km al momento de su instalación en 2018 adquiridas mediante el ahorro de 12 millones y medio de dólares, cuando aún la moneda estadounidense estaba por debajo de los 40 pesos.
Aval del Tribunal de Cuentas provincial
Cabe recordar también que en agosto de 2018, los vocales del Tribunal de Cuentas de la Provincia (TCP) firmaron la resolución plenaria 178/2018, mediante la cual no pusieron objeciones a la adquisición de la turbina Sullair, mediante el mecanismo de contratación directa. La operación contaba con la aprobación previa de la Legislatura que autorizó la compra en un monto de 12,5 millones de dólares.
Para dictar la resolución, los vocales del TCP tuvieron en cuenta un informe originado por el Jefe de Departamento de Generación, ingeniero Juan Pablo Marini, quien subraya que “ante la ocurrencia de una falla en el turbogenerador TG7, en la condición de mayor demanda, la potencia disponible en el sistema CTU+CT Sullair, resultaría insuficiente para abastecer a la totalidad de la demanda, debiendo en ese caso efectuar una reducción forzada de la misma. Se aclara que la condición descripta anteriormente sólo sucede durante algunas horas en los días de mayor demanda en temporada invernal”.
Fundamentaron en esa oportunidad que la “demanda máxima actual, en horario pico se encuentra en 38MW incluyendo reserva rotante, en ese caso con un parque generador que tiene una potencia firme de 28MW se debería efectuar una reducción de la demanda en el orden del 27%, aproximadamente, porcentaje que a nivel de la ciudad podría representarse como el corte de suministro simultáneo a todos los barrios ubicados al oeste de la calle Damiana Fique y hasta el Parque Nacional, o bien la zona centro y los barrios ubicados al este de dicha zona”.
Los Vocales indican que el “informe es poder demás esclarecedor y pondría de resalto la necesidad de mantener en funcionamiento la Central Térmica Sullair hasta tanto se concrete la ampliación del parque de generación, para asegurar el funcionamiento y calidad del servicio de energía eléctrica en Ushuaia”.
Resaltaron que “teniendo como base el informe, el eventual mantenimiento en operaciones de la Central Térmica Sullair, ya sea mediante locación o compra, tiene por fin directo asegurar la eficiencia y calidad del servicio de electricidad de Ushuaia”, conforme lo previsto en las leyes de emergencia, sancionadas por la Legislatura.
En su escrito, los integrantes del Tribunal de Cuentas puntualizaron que “la contratación directa no es sinónimo de elección de un contratista estatal con libertad, sin necesidad de cumplir con formalidad previas o sin comparar ofertas. Existe un procedimiento reglado, normativamente establecido, que aunque presenta diferencias en comparación con el de la licitación pública, impone ciertos requisitos y etapas de inexorable cumplimiento para celebrar luego una contratación válida”.