El presidente de la Federación de Bomberos Voluntarios, Pascual Lombardo, respondió en duros términos a la Ministra de Gobierno, acusándola de desconocer la actividad que se pretende regular mediante un manual de procedimientos. Aseguró que quieren “meterse en la vida interna” de los bomberos, porque deben pedir permiso para hacer determinados gastos. La invitó a ir al cuartel para aprender sobre la tarea que realizan y deslizó que en la gestión anterior hubo cierta laxitud con las rendiciones. Como contrapartida, tampoco los bomberos exigieron la cuenta específica que marca la ley ni preguntaron que hizo la Secretaría de Seguridad con el 50% del subsidio que se empezó a retener en 2018.
Río Grande.- El presidente de la Federación de Bomberos Voluntarios, Pascual Lombardo, redobló la apuesta en el cruce mantenido esta semana con el gobierno provincial por el intento de establecer un sistema que permita controlar qué hacen con los fondos públicos que reciben como subsidio. Luego del anuncio, el sector optó por una protesta pública, cruzó una autobomba en pleno centro en reclamo de la deuda histórica, y logró reunirse con la ministro de Gobierno Adriana Chapperón.
Sin embargo ayer la funcionaria ratificó que no van a retroceder en la aplicación de un manual de procedimientos, ante la irregularidad con que se vienen haciendo las rendiciones, y no se pagará el subsidio si los fondos no son rendidos como corresponde. Para Lombardo, pretenden “meterse en la vida interna” de los bomberos y, particularmente Chapperón, desconoce la actividad.
“Nosotros fuimos con la intención de entregar un petitorio al gobernador y tener una audiencia por la resolución que sacaron con esta normativa nueva”, dijo por Radio Provincia.
Si bien es la misma que aplica el gobierno nacional, aseguró que “en la provincia es impracticable, porque en nación los subsidios se cobran una vez al año y tenemos todo un año para poder rendirlos. Al aplicarlo a nivel provincial, uno va a tener que rendir todos los meses para poder cobrar y es muy engorroso”.
“Nosotros no nos oponemos a los controles, porque se hacen mes a mes cuando uno entrega las rendiciones. Si uno no entrega la rendición, no cobra el mes que sigue. Además esto no era un control sino querer meterse en la vida interna de cada institución, porque hay topes para realizar gastos corrientes y, si se superan, tenemos que solicitar autorización. Es como pedir permiso para todos los gastos”, criticó.
“Esto fue copiado de un manual de rendiciones de 2016; en 2018 salió un manual nuevo y ahora se está trabajando en otro, porque se vio que era muy problemático. Uno tiene menos de 30 días para rendir con este manual y ahora se hacen controles, uno entrega la planilla con todas las facturas”, dijo.
Deuda histórica
Respecto del repentino reclamo de la deuda histórica a partir de que surgió la aplicación de este manual, sostuvo que “anda en el orden de los 145 millones. Van cambiando los gobiernos y nunca se ponen al día. Nosotros queremos cobrar todos los meses en tiempo y forma, porque tenemos gente que es rentada en el cuartel. En Río Grande tengo un cuartel central y cuatro destacamentos. Por cada destacamento necesito entre tres y cuatro personas que estén de guardia las 24 horas”, planteó sobre el personal asalariado.
“La ministra dijo que por el momento iba a dejar sin efecto la resolución que sacaron, porque nunca nos consultaron”, apuntó, si bien esto fue desmentido ayer por Chapperón. “Se comprometió a que la semana que viene nos vamos a reunir y trataremos de llevar un proyecto para sacar algo coherente entre las partes. Nosotros pedimos que sea rápido el pago, porque este mes todavía no lo cobramos, la luz y el gas se vencieron, no pudimos pagar al jefe de guardia y es engorroso. La rendición de los bomberos es lo más sencillo que hay, porque se pone un debe y un haber, que dice dónde está la plata y en qué se va gastando. Lo que pasa es que cuando alguien debe plata siempre quiere poner excusas para pagar”, disparó, atribuyendo estos nuevos controles a un intento del gobierno de dilatar pagos.
“La idea es que todo sea más rápido, porque con este manual tenemos que enviar notas pidiendo autorización para determinados gastos y el perjudicado si hay demoras es el vecino. Si tengo que cambiar una batería y tengo que hacer una nota para pedir autorización, todo se demora y el perjudicado es el vecino. Ellos saben qué se hace porque las facturas están”, remarcó.
El arrastre de Bertone
Lombardo dio a conocer que el mes pasado cobró “172 mil pesos del subsidio de diciembre de 2018 y tengo que hacer frente a los costos de 2020”, ante el atraso del pago de la gestión anterior.
“Además nos pagaron el 50% del subsidio, porque aplicaron la ley de presupuesto –que retiene el 50% restante para que lo administre el área de Seguridad-. Para cobrar este mes yo presenté las rendiciones el 26 de mayo y estamos a 18 sin cobrar. El mes pasado pagué 15 días después todos los impuestos y servicios vencidos, y este mes está pasando lo mismo, sin tener que hacer toda esta historia de los manuales, donde me quieren decir en qué tengo que gastar la plata”, se quejó.
“Esto es meterse en la vida interna de las instituciones. Con el respeto que me merece la Dra. Chapperón, ella es médica y debería escuchar cómo es la actividad. Además en el caso de los cuarteles intervenidos, los interventores son puestos por el gobierno y son ellos mismos los que tendrían que controlar a los interventores”, recomendó, luego de que Chapperón expusiera serias irregularidades.
“El Municipio de Río Grande nos paga un subsidio y hacemos exactamente lo mismo. Corresponde que se rinda el gasto y yo todos los meses estoy entregando los comprobantes. Si voy al almacén, pido una factura a nombre de bomberos y están todos los gastos”, insistió.
Se le recordó que hubo intervenciones por falta de presentación de balances de tres años en algunos casos y documentación desaparecida. “Yo hablé con el interventor y los que estuvieron antes se llevaron toda la documentación. Ahora es muy complicado hacer un balance cuando faltan comprobantes de cuatro o cinco años –reconoció-. Eso no es responsabilidad de los actuales interventores. Las dos instituciones que fueron intervenidas fueron las que menos cobraron y también la responsabilidad pasa por el gobierno, al no venir a las instituciones. Yo le he dicho a Facio que no tengo problema de que vengan a controlar, pero todos hablan y no viene nadie. Tiran mantos de duda y es muy difícil revertir la imagen”.
“Lo que pasa es que el impedimento del gobierno es que tiene que pagar lo que corresponde. A partir de 2018 de buenas a primeras nos sacaron el 50% del subsidio por la ley de presupuesto, y el Ministerio de Seguridad puede disponer de ese 50% del subsidio de bomberos para aplicarlo a capacitación y compra de equipamiento por parte del gobierno. Ellos se apropiaron del 50% y nunca dijeron en qué se gastó ese dinero”, cuestionó de la ex Secretaría de Seguridad de la gestión Bertone.
¿Vista gorda mutua?
Lombardo agregó que “cuando salió esa ley de presupuesto, se debió haber abierto una cuenta con los fondos específicos de los bomberos voluntarios y debería estar la plata de todos los bomberos. La ley hay que cumplirla de los dos lados y el que tiene que dar ejemplo es el gobierno, no este sino los que pasaron”.
Lo cierto es que dejó expuesta la falta de exigencia al gobierno anterior de estos puntos contemplados en la ley por parte de los bomberos, que desconocen el destino que le dio la Secretaría de Seguridad al 50% de los fondos del subsidio, y como contrapartida tácitamente fueron laxos los controles de las rendiciones.
Respecto de los pasos a seguir, informó que “la ministra dijo que nos iba a convocar la semana que viene para que llevemos un proyecto de normativa para ponernos de acuerdo y trabajar en base a eso. También nos dijo que una vez que pagaran los aguinaldos nos iban a citar para ver de qué manera se puede ir achicando la deuda. Si empezamos a cobrar mes a mes, más el aporte a cuenta de la deuda, uno puede ir sacando la cabeza del agua y salir adelante”, estimó.
La ministra no sabe
Finalmente adjudicó este conflicto al desconocimiento de Chapperón sobre la actividad. “Todos estos problemas se generan porque no se tiene en cuenta la realidad de los bomberos. Vuelvo a repetir que la Dra. Chapperón es muy buena señora, muy atenta, nos atendió muy bien, pero es doctora, no entiende de la actividad y es lo mismo que yo me ponga a opinar de medicina”, expresó.
“Ella puede saber de cuestiones administrativas pero lo que tiene que entender es la organización de un cuartel de bomberos, que no es cualquier organización, porque día a día hay que salir a hacer frente a distintas cosas que se presentan y no podemos perder tiempo. Ella debería asesorarse al respecto, yo le ofrecí que venga a visitarnos al cuartel antes de estas reuniones, para que vea cómo se maneja la institución, cómo funciona, qué tenemos y no tenemos”, concluyó.