Ante la noticia de que la Estación Terrena de Tolhuin será la primera en recibir datos del satélite argentino SAOCOM – 1B, el Decano de la FRTDF de la UTN, ingeniero Mario Ferreyra, resaltó que “esto pone a Tierra del Fuego en la era espacial”. El lanzamiento de este nuevo satélite argentino está previsto para el próximo 25 de julio en Estados Unidos.
Río Grande.- El ingeniero Mario Ferreyra, Decano de la Facultad Regional Río Grande de la Universidad Tecnológica Nacional e integrante del Rectorado nacional de la UTN, valoró el trabajo de científicos y técnicos de diversas instituciones académicas y universitarias en el desarrollo del satélite argentino SAOCOM – 1B y sus predecesores, al tiempo que destacó que sea el corazón de la Isla el lugar destinado a la Estación Terrena de Tolhuin, que recibirá por primera vez estos datos del planeta, desde el espacio.
Por Radio Universidad 93.5, recordó que “ya el año pasado esa estación terrena recibía datos satelitales, ahora lo hace con los del SAOCOM – 1B, lo pone a Tierra del Fuego en la era espacial”.
En ese sentido, la autoridad académica destacó el trabajo de muchos científicos y académicos como el Dr. Conrado Varotto, Lino Barañao, Raúl Kulichevsky, Leonardo Luís Comes “y muchos otros de la CONAE, lo mismo que a la gente del INVAP y VENG”.
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Ferreyra observó que “Tierra del Fuego es una de las tres provincias con equipamiento espacial”.
Justamente la elección de Tolhuin como sede de la Estación Terrena Satelital fue propuesta por el propio Mario Ferreyra a la entonces gobernadora Rosana Bertone y fue aprobado, inaugurándose las instalaciones con las dos primeras antenas a mediados de julio del año pasado.
Conrado Varotto, el hombre clave
El ingeniero Mario Ferreyra le dedicó un párrafo especial al Dr. Conrado Varoto, considerado el padre del plan espacial argentino. “El Dr. Varotto, desde la Comisión Nacional de Energía Atómica, ha logrado concretar distintos emprendimientos, cluster de empresas dedicadas a la tecnología o de base tecnológica. Él fundó INVAP, VENG y otras empresas que acompañan todo el plan satelital, lo cual es esencial porque una sola empresa no podría hacer todos los equipamientos dada la complejidad que conlleva construir un satélite, equiparlo y después ponerlo en órbita”, comentó.
Observó que la Comisión Nacional de Actividades Espaciales –CONAE- no es una empresa en sí misma, sino que funda empresas de base tecnológicas asociadas a la actividad espacial que conduce el Estado argentino a través de la propia CONAE”.
Cabe recordar que a propuesta del Ingeniero Mario Ferreyra, conjuntamente con la Secretaría de Ciencia y Tecnología de la UTN, a cargo del Doctor Horacio Leone, se otorgó el Título de ‘Doctor Honoris Causa’ al Doctor Conrado Franco Varotto, quien fuera máxima autoridad de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales –CONAE-, habiéndose desempeñado como Director Ejecutivo desde la fundación de la misma, hasta el año 2018. Esta es la máxima distinción que puede otorgar una universidad en cualquier lugar del mundo por estatuto, a personalidades destacadas en el ámbito académico, científico, tecnológico, social o jurídico.
“Nosotros, desde la Universidad, acompañamos siempre al Dr. Conrado Varotto en el plan espacial; desde el año 1997 cuando fui diputado nacional y cuando se presentó la posibilidad de instalar antenas de seguimiento de los satélites en la Patagonia, y de haber tomado contacto el Dr. Varotto conmigo, lo primero que pensamos fue hacerlo en Tierra del Fuego”, recordó el ingeniero Ferreyra.
En ese sentido comentó que “primero pensamos en la ciudad de Río Grande, la CONAE pensó en Ushuaia y al final coincidimos en que Tolhuin era el mejor lugar y el adecuado para la instalación de las antenas”.
“Primero ubicamos el terreno que la Universidad tiene en la ciudad y después, hablando con el Dr. José Luís Paños, con el Ministro de Ciencia y Tecnología de la Provincia y con la gobernadora Rosana Bertone, se logró la cesión del predio para la CONAE por parte del Dr. José Luís Paños, terreno donde se asienta la Estación Terrena como lugar definitivo para receptar las señales de los satélites”, añadió.
También, “cuando sean puestos satélites en órbita a través del lanzador argentino que estará ubicado en el sur de Buenos Aires, Tolhuin será un lugar fundamental también para los nuevos satélites”, dijo Ferreyra.
En ese sentido, el integrante del Rectorado nacional de la UTN observó que “el Plan Espacial Argentino es federal, tiene integrantes de todas las provincias y el equipo que ha armado la CONAE que hoy dirige el ingeniero Raúl Kulichevsky, es realmente de primer nivel, de los más desarrollados en el conocimiento de las actividades espaciales que hay en el mundo”.
Asimismo, Ferreyra resaltó que “Lino Barañao siempre ha sido un hombre de acción, una persona con una inteligencia y una capacidad de empujar las actividades de ciencia y tecnología, de lo más fuerte que ha tenido el país y quien ha cumplido como ministro de Ciencia y Tecnología, la mayor cantidad de años frente a una cartera en todo el mundo. Eso, más allá de las cuestiones y consideraciones políticas, habla a las claras de la personalidad, de la formación y de las calidades científicas de Lino”.
“La constelación SAOCOM nos posiciona en un lote de países cabecera a nivel mundial”
Desde Estados Unidos donde participa de los preparativos para el lanzamiento del segundo satélite Raúl Kulichevsky, el director ejecutivo y técnico de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales, evaluó la importancia del proyecto.
El director Ejecutivo y Técnico de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), Raúl Kulichevsky, destacó ayer que la “constelación” de dos satélites de observación con microondas que Argentina tendrá a partir del lanzamiento del segundo SAOCOM -el 1B- “nos posiciona en un lote de países cabecera no sólo en la región” sino a nivel mundial.
“Ningún otro país u organización de países de la región tiene una constelación parecida a la del SAOCOM y son contadas con los dedos de la mano los que tienen satélites similares a nivel mundial: hoy sólo Japón y la Agencia Espacial Europea”, dijo a Télam en comunicación telefónica desde EE.UU. donde se encuentra desde hace dos semanas para participar del lanzamiento previsto entre el 25 y el 30 de julio.
Kulichevsky explicó que “además del hecho de ser una constelación», es decir de funcionar los dos artefactos como un sistema único, “lo que hace muy particular al SAOCOM es su instrumento radar que opera en banda L, que requieren una antena grande y una complejidad técnica muy importante”.
“Son muy pocos los países que tienen satélites con instrumento de radar y menos lo que tienen en banda L, por eso la constelación SAOCOM nos posiciona en un lote de cabecera no solo en la región”, afirmó.
La campaña de lanzamiento en curso para el satélite SAOCOM 1B, que había sido pospuesta en marzo pasado, se alista desde las instalaciones de la empresa estadounidense SpaceX en Cabo Cañaveral, que provee el vehículo lanzador y donde la delegación argentina pudo ingresar recién el pasado 13 de julio, tras cumplir una cuarentena preventiva de nueve días y pasar dos pruebas de PCR.
El satélite de observación SAOCOM 1B, junto con el SAOCOM 1A lanzado en 2018, conforman la Misión SAOCOM y ambos fueron desarrollados y fabricados en el país por la CONAE junto con la empresa INVAP, la firma pública VENG, la Comisión Nacional de Energía Atómica y el laboratorio GEMA de la Universidad Nacional de La Plata, entre otras 80 empresas de tecnología e instituciones del sistema científico tecnológico del país.
Junto a Kulichevsky viajaron a Estados Unidos otros cinco profesionales de la CONAE más el representante de la Gerencia General de INVAP, Guillermo Benito, y 11 profesionales de esta empresa para realizar los ensayos y pruebas del satélite previas así como controlar su lanzamiento.
Otros 25 profesionales participan desde Argentina en la campaña, distribuidos en las provincias de Córdoba y Río Negro y Ciudad de Buenos Aires.
“Y recién el miércoles pasado encendimos por primera vez el satélite, que funcionó perfecto y sin el más mínimo inconveniente; lo que nos dio un poco de alivio, porque uno tiene siempre dudas de cómo estará”, dijo.
En tanto, los próximos dos días estarán dedicados a la “operación de integración” con el vehículo lanzador que lo dejará orbitando a 620 kilómetros de la superficie de la tierra.
Respecto al lanzamiento, “todavía no se sabe fecha exacta” porque depende que de que el lanzador Falcon 9 “esté listo”, del cronograma de lanzamientos de la base aérea y de “la autorización de sus autoridades” que siempre se expiden “unas horas antes” de la eyección.
Este ingeniero aeronáutico que encabeza la CONAE desde junio de 2018, contó ya se completó con éxito un primer ensayo de lanzamiento simulado por computadora para ejercitar la configuración remota y las comunicaciones en todos los pasos del procedimiento de cuenta regresiva en tiempo real.
Y “entre miércoles y jueves” habrá un segundo ensayo de procedimiento, que implica “volver a hacer lo mismo” pero esta vez “incluyendo al lanzador y al satélite real” para “verificar que cada caja de electrónica esté funcionando bien”.
El especialista explicó que “lo que hace muy particular al SAOCOM es su instrumento radar que opera en banda (electromagnética) L”, lo que permite “obtener información no sólo sobre la superficie de la tierra sino hasta un metro por debajo ella”.
El funcionario explicó que la decisión de desarrollar la “Misión SAOCOM” -que implicó una inversión de “aproximadamente 600 millones de dólares”- se tomó a partir de “la interacción con los sistemas económicos, productivos y ambientales del país” y sus necesidades, “que además tiene que alinearse con las políticas prioritarias” definidas por el Gobierno nacional.
Kulichevsky destacó que el proyecto “fue pensado para ofrecer soluciones a problemáticas locales no satisfechas con información de otros satélites”, a partir de requerimientos realizados por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional del Agua (INA) para atender necesidades de “los sectores productivos y de la gestión de emergencias”.
En particular, los SAOCOM fueron especialmente diseñados para detectar la humedad del suelo y obtener información de la superficie terrestre en cualquier condición meteorológica u hora del día.
Y si bien éste ya tuvo bajo su responsabilidad el lanzamiento de un satélite como titular de la CONAE en octubre de 2018, «siento como si fuera la primera vez» porque «es un evento extraordinario e inolvidable en la vida de uno».
“Son momentos de mucha ansiedad y mucha expectativa por ver que salga todo bien, porque son muchos los años de trabajo que se resumen en ese momento del lanzamiento”, concluyó.
Estación Terrena de Tierra del Fuego
La Estación Terrena de Tierra del Fuego, dedicada a la observación y el monitoreo satelital, será la primera del país en tomar contacto con el satélite argentino SAOCOM – 1B, de observación ambiental, cuyo lanzamiento está previsto para el próximo 25 de julio en Estados Unidos.
Ubicada en el municipio fueguino de Tolhuin, la Estación fue inaugurada en 2019 y ahora recibirá los primeros datos de telemetría que servirán para analizar parámetros como el estado de la batería del satélite, su temperatura o la condición de sus paneles solares.
«La Estación de Tolhuin es clave porque, por el tipo de órbita, el satélite será visualizado en primer término por una estación ubicada en Lima, Perú, y después por las antenas de Tierra del Fuego. Es decir que desde allí se obtendrán los primeros datos de telemetría dentro del país», detalló Leonardo Luís Comes, gerente de la división estaciones terrenas de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE).
Según explicó Comes, las instalaciones de Tolhuin, municipio ubicado en el centro geográfico de Tierra del Fuego, cumplirán un rol «fundamental» durante las primeras horas del satélite nacional en el espacio. El especialista mencionó que las primeras órbitas de un satélite recién lanzado son «las más críticas», por lo que para poder monitorear su desempeño en ese lapso de tiempo se planifica todo un esquema de contactos, en el que la base de Tolhuin cumple «una función muy importante».
A través de la estación de Tolhuin, el país contará con los primeros datos de telemetría para conocer en detalle el estado en que se encuentra el satélite. Entre otras cosas, podrán ser controlados parámetros como su temperatura, el estado de los paneles solares o las baterías del satélite.
Al momento de establecer los primeros contactos, la estación fueguina será comandada de manera remota desde el Centro Espacial Teófilo Tabanera de Córdoba, donde se encuentra el control central de la misión SAOCOM: «Habrá un comando remoto pero también tenemos personal en Tolhuin que realiza un mantenimiento de primer nivel y puede resolver cualquier contingencia que se presente», observó Comes.
La Estación fue inaugurada en julio de 2019 y cuenta con «infraestructura de avanzada» que incluye un sistema de respaldo de potencia con generadores eléctricos propios y conectividad por fibra óptica con un sistema de redundancia a través de radioenlace, lo que le permitiría afrontar cortes del suministro eléctrico o de la conexión a Internet.
«El lugar tiene una potencialidad muy grande por su ubicación, lo que aumenta la visibilidad de los satélites, tanto para misiones nacionales como para internacionales que se cubren a través de convenios con agencias espaciales de todo el mundo», destacó Comes.
Además, las instalaciones incluyen dos sistemas de antenas de 15 metros de altura con reflectores parabólicos de 13,5 metros y 7,3 metros de diámetro, cubiertos por radomos que brindan protección contra la nieve y el viento, y que permiten recibir, procesar y almacenar la información generada por los satélites de observación de la tierra, tanto argentinos como extranjeros.
«No es usual el modo en que ha evolucionado la tecnología de la estación fueguina. En Córdoba demandó más tiempo. Incluso hay equipamiento exclusivo del lugar como un sistema de recepción de banda Ka para satélites de órbita baja», señaló el gerente de la CONAE.
El SAOCOM – 1B, dedicado a la observación ambiental de la Tierra, incorporará un Radar de Apertura Sintética, una compleja tecnología desarrollada enteramente en el país, cuya señal de microondas puede atravesar las nubes y captar imágenes de la superficie terrestre tanto de día como de noche.
El lanzamiento del satélite, que complementará la observación del SAOCOM – 1A, puesto en órbita en octubre de 2018, fue previsto en primera instancia para fines de marzo de este año. Sin embargo, el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y la CONAE resolvieron posponer la campaña de lanzamiento ante el avance de la pandemia de covid-19.
A principios de julio, la CONAE informó que «la nueva campaña contempla realizar la puesta en órbita del satélite argentino a fines de este mes, en una ventana de oportunidades de lanzamiento que van del 25 al 30 de julio». En los últimos días, se confirmó que el lanzamiento fue fijado para el 25 de julio. Mediante un vector Falcon 9 de la empresa SpaceX, el satélite será puesto en órbita desde Cabo Cañaveral.
Fuentes: Radio Universidad 93.5 MHZ, Agencia Oficial Télam y Diario Página 12.