Se espera que el próximo 28 de septiembre se presente la nueva proyección del rostro de Sofía Herrera. La misma será realizada por el perito dibujante Alberto Suárez, quien explicó a este medio, el detalle de los elementos que serán tenidos en cuenta en este trabajo, que es realizado a mano alzada, y pixel por pixel sobre una tableta.
Río Grande.- Alberto “Budy” Suárez tiene 53 años, es un comisario retirado que perteneció a la Policía Bonaerense durante 29 años y 3 días. Actualmente reside en la Los Toldos, y es uno de los pocos dibujantes en el mundo, que se dedica exclusivamente a plasmar rostros. En este caso no es la proyección de un rostro cualquiera, sino el de la pequeña Sofía Herrera, la niña riograndense desaparecida el 28 de septiembre del 2008. En esta proyección, Sofía se verá como una adolescente de 16 años.
Suárez, explicó a Provincia 23 que para esta proyección que no es la primera, sino la cuarta, “no se utilizarán los elementos subjetivos, tratamos de hacerlos de manera tal de tener en cuenta el normal desarrollo de la persona o sea, siempre teniendo en cuenta que si nos ponemos contemplar cada una de las variantes, sería imposible hacerlo, dado que desconocemos muchísimos datos reales, por ejemplo si existe sobre peso o escaso peso, problemas de salud”, entre otros elementos subjetivos, como por ejemplo, color de cabello, utilización de pircings, aros, tatuajes, entre otros. “El peritaje se hace en base a la evolución normal”, indica el dibujante.
La expresión genotípica de Sofia
Suárez habla en plural, y dice “Nosotros, porque trabajo para una consultora actualmente en la que hacemos un trabajo multidisciplinario, varias especialidades para hacer una proyección. Lo más importante son las imágenes que la familia aportó, también el juzgado, las que aportaron los padres de Sofía, que son fundamentales porque siempre existe lo que se llama transferencia de rastros, lo genético que se transforma en la expresión genotípica es lo que se ve; siempre lógicamente existe un porcentaje -al azar- del cuerpo que se parece a uno o a otro padre. Todos estos factores nosotros los tenemos en cuenta para hacer la proyección que se hace a mano, si bien trabajamos sobre una tableta, es hacer el dibujo desde cero” y aclara “muchas veces se tiene la creencia que introducimos la imagen en un software y que sale la imagen, pero nosotros no usamos ninguna clase de software”.
No es un identikit
“Es una proyección”, dice el experto, “no un identikit, que es una denominación muy antigua allá por el año 50 más o menos, policías de Estados Unidos; al no haber dibujantes, cosa que pasa en la actualidad, escasean en todos lado; empezaron implementar la reconstrucción de un rostro a través de filminas o de acetato, que tenía forma prediseñada, y se formaban lo que en ese momento se conocía como identikit”.
Retomando lo referido a la “expresión genotípica”, la misma ya estaba dada a los 3 años, cuando desapareció Sofía, “con el ojo de perito ya ve ciertas características. Uno nunca puede generalizar, muchas veces decimos que un bebé de 2 años no tiene nada, y eso es una falacia porque puede que tenga características de uno de los padres a los dos meses, al año, a los dos años, pero siempre va a tener una característica de sus padres”, que para ser más claros, son las expresiones y los gestos que son adquiridos por cada persona y que provienen de sus progenitores.
Acerca de la importancia de las fotos aportadas por María Elena Delgado y Fabián Herrera, padres de la niña, Alberto Suárez indicó que no tienen el mismo grado de importancia, las fotos de Giuliana, hermana de Sofi, porque “no es el objetivo, es otro ser, y es muy probable que no exista vinculación con Sofía, son dos seres humanos diferentes, dos personas totalmente diferentes”.
“Me da un poco de tranquilidad aportar un elemento para poder seguir investigando” dijo Suárez
Aunque “Budy” Suárez fue funcionario público, “durante casi 30 años, 29 años y 3 días, y haber vivido hechos muy graves, uno se va volviendo un poco frío, pero en el caso de Sofía, a mi me quedó el recuerdo de ver el sufrimiento en carne propia, y pienso, que feo si me hubiese pasado, es algo horrible, no tengo ningún interés, jamás, que me regulen honorarios, y menos lo hice por prensa. No me interesa, estoy por encima de eso, lo que a mi me da la tranquilidad es dar un elemento para la investigación, para que Sofía se pueda reencontrar con su familia y esta familia con Sofía”, dijo el experto en rostros, Alberto “Budy” Suárez.
