Ayer comenzó el juicio oral no público contra Claudio Guerrero Villarroel, quien llegó a Tribunales caminando y sin custodia, ya que al proceso llegó en libertad, pese a que se le acumularon entre 7 y 9 delitos cometidos contra mujeres y adolescentes, en todos los casos, afectando la integridad sexual de las mismas. Los delitos que se le imputan van desde el acoso callejero, los cuales se tornaron virales el año pasado, y por los que además tomó estado público su situación; hasta abuso sexual con acceso carnal.
Río Grande.- El Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Norte dio inicio ayer a un nuevo debate oral y no público, seguido a Claudio Guerero Villarroel acusado de abusar sexualmente de siete víctimas.
El Tribunal de Juicio está integrado por los doctores Juan José Varela, Natalia Buitrago y Fernando González.
Por el Ministerio Público Fiscal estarán los doctores Laura Urquiza y Jorge López Oribe, dado que se unificaron las causas que pesan sobre el imputado, quien llega al debate oral en libertad, dado que durante la pandemia se venció la prisión preventiva.
En las causas se le imputan los delitos de abuso sexual con acceso carnal y corrupción de menores, en una de ellas y abuso sexual simple reiterado en concurso real con exhibiciones obscenas reiteradas (siete hechos), en otra.
Durante el juicio, el imputado es asistido por el Dr. Alejandro de la Riva, y el Dr. Nicolás Casariego representa a la querella.
Las víctimas ya no callan: “La justicia es muy lenta y mala”
Momentos previos al inicio del proceso oral, la tía de la víctima, hija del imputado, sumó un nuevo relato de abuso en el cual la misma se vio involucrada cuando tenía solo 14 años.
La mujer relató que, por ese hecho, Guerrero Villarroel fue enjuiciado en el año 2002 momento que el mismo fue absuelto cometiendo más adelante, los otros hechos de los cuales hoy se lo acusa, “jamás pensé que lo llegaría a cometer con su propia hija”, sostuvo una de las víctimas que rompió el silencio.
“Esta persona ya viene con muchas causas desde hace mucho tiempo antes, en el 2001 fui víctima de él. Fuimos a juicio y quedó en la nada porque fue abuso simple, en ese tiempo yo tenía 14 años”. Y mencionó, “quedó absuelto porque solo fueron manoseos, y no hubo testigos”.
“En ese tiempo yo era la cuñada, y ocurrió cuando me llevó engañada a su casa porque en ese momento había tenido una disputa con mi hermana, la madre de mi sobrina. Me buscó en la escuela secundaria, diciendo que mi hermana quería hablar conmigo, pero ella no estaba. Nunca imaginé que iba hacer lo que hizo”, rememoró.
Realizada la denuncia y elevado el juicio bajo la caratula de abuso sexual simple, Guerrero Villarroel fue absuelto. “En ese tiempo dejamos de ver a mi hermana, mi sobrina era recién nacida, nos alejamos completamente de ellas. Por muchos años fue muy manipulador y la tenía amenazada, se terminó de separar cuando él la golpeó brutalmente que la mandó al hospital”.
En relación a la causa que hoy se le atribuye en perjuicio de su hija biológica, sobrina de la mujer, el requerimiento de elevación a juicio a cargo del fiscal Jorge López Oribe, sostiene que los hechos datan cuando la niña tenía entre 6 y 7 años, hasta los 14 años, “aprovechando la situación de convivencia preexistente; en diversas viviendas donde vivió el padre tras separarse de la madre”.
“Tendría que estar preso hace mucho tiempo, es una persona muy enferma y manipuladora. No entiendo como la justicia nunca hizo nada, él sigue como si nada, me gustaría que en este caso, el de mi sobrina, y todos los que tiene, la justicia haga algo. Que pague por todo lo que hizo”, añadió.
Al finalizar su relato, lamentó: “Todo lo que sucedió se podría haber evitado pero la justicia es muy lenta y mala, espero que esta vez se haga justicia de verdad porque no podemos permitir que personas así anden en la calle con total impunidad lastimando de esa forma”.