El legislador del MPF recibirá hoy como presidente de la comisión de seguridad a las autoridades policiales y el resto de los miembros ya acordó reflotar un proyecto de Ricardo Furlan para crear un Tribunal de Disciplina. Se apunta a limitar la discrecionalidad en las sanciones, rayanas con arbitrariedades, dado que hay “quejas permanentes” de los agentes, aseguró el parlamentario. El proyecto ya fue girado al Ejecutivo para su análisis y para Villegas es un desafío personal democratizar la institución. También opinó sobre el enfrentamiento entre funcionarios del Municipio de Ushuaia y del gobierno fueguino y advirtió que, si no frenan las descalificaciones mutuas, la Legislatura tomará intervención. “No podemos llegar a este absurdo de ver cómo se tiran cosas por la cabeza cuando estamos viviendo una pandemia muy dolorosa, que nos exige otro tipo de comportamiento y de trabajo”, sentenció.
Río Grande.- El legislador del MPF Pablo Villegas adelantó a Radio Provincia parte del temario de la reunión de Comisión 6, de seguridad, prevista para hoy, a la cual fueron citadas las autoridades policiales.
“Hoy a las 11 están citadas las autoridades de la policía provincial, en particular el Jefe de Policía, para pedir opinión sobre el proyecto de ley que regula la actividad de las empresas de seguridad privada, actualmente regidas por un decreto territorial. Estas empresas representan un universo de 800 trabajadores de manera directa y en forma indirecta según algunos empresarios llegan a las 3.000 personas”, dijo el legislador.
Los empresarios ya pasaron por la comisión y “han hecho su aporte, Ya en noviembre pasado le había pedido opinión al jefe de policía y la acercó la semana pasada. Queremos aprovechar la presencia personal de las autoridades para hablar de este tema y de otros, porque hemos requerido información sobre el área de Bienestar Policial, la estructura, presupuesto, las acciones desplegadas en los últimos dos años. Tenemos un problema grave dentro de las filas policiales, que se reitera en el tiempo, con el fallecimiento de agentes que han utilizado su arma reglamentaria. Este tema se tiene que poner en agenda para mejorar el sistema de selección de los cuadros policiales y el acompañamiento psicológico y social del personal”, aseguró.
Consideró que “la problemática de los suicidios de policías se debe a un conjunto de factores y creo que el proceso de selección tiene que ser más afinado, se tiene que mejorar la capacitación y principalmente tiene que mejorar el área de Bienestar Policial para acompañar al agente que ha sido puesto en disponibilidad, o con revista pasiva. Lo tiene que asesorar del punto de vista psicológico y debe haber contención social y económica, porque tenemos esta realidad. Hemos escuchado a los familiares del agente Cáceres y los fueguinos necesitamos respuestas de por qué suceden estas cosas”, remarcó.
Dado que no hubo respuesta a pedidos de informes previos, el legislador espera “que las autoridades traigan la información correspondiente para que los legisladores podamos intervenir de manera positiva para ayudar a dar una solución a un problema que se viene reiterando”.
Intervención política
Se le preguntó si es posible que la política incida en una formación verticalista como la que se imparte en las fuerzas policiales, y lo tomó como un desafío personal: “Yo asumo como una responsabilidad evitar el autogobierno policial. La policía es una institución que se merece el mayor de los respetos pero, como en toda institución, se deben evitar prácticas que pueden resultar en arbitrariedades o discrecionalidades. La política tiene que generar herramientas para evitar el autogobierno, el manejo discrecional de la potestad disciplinaria, que es criticada por muchos efectivos policiales”, enfatizó.
Tribunal de Disciplina
En este contexto dio a conocer que “en el ámbito de la comisión que presido hemos puesto en marcha un proyecto del legislador Ricardo Furlan, que lo viene presentando desde hace tiempo, para conformar un Tribunal de Disciplina. Algunos puntos no comparto pero es una propuesta inteligente, audaz e importante para tratar de imponer un Tribunal que maneje la parte disciplinaria de la fuerza policial por fuera de la Jefatura de Policía. Esto daría mayor imparcialidad y objetividad en las decisiones disciplinarias, que son fuente constante de reproches y quejas por distintas circunstancias”, reiteró.
“Sabemos que hay decisiones que generan resistencia, pero es deber de la política mejorar el marco de algunas instituciones. Tenemos conocimiento de las críticas constantes por el ejercicio disciplinario y hay un proyecto de ley que se refiere a esto y democratiza el ejercicio del poder disciplinario. La Legislatura se debe ese debate y buscar la mejor herramienta, con un ánimo de absoluta colaboración para mejorar el marco de actuación de una institución que también tiene sus problemas”, sostuvo.
Dio a conocer el consenso que ya se logró entre varios legisladores: “Esta decisión la tomamos hace algunos días los miembros de la comisión de seguridad y hemos remitido el proyecto de ley al Poder Ejecutivo para que dé su opinión, que lo mejore o lo modifique y entre todos avancemos en este tema que hace a la seguridad ciudadana. El problema de seguridad no es resorte exclusivo de la institución policial y el abordaje debe ser interdisciplinario. La policía es una parte muy importante en la solución el problema de la seguridad ciudadana pero también es parte del problema de la seguridad ciudadana”, advirtió.
Reconoció que “trabajar estos temas no es muy simpático pero uno está en el ejercicio de la función para tratar lo que entendemos es mejor para todos los fueguinos fueguinas”.
Coparticipación y peleas mediáticas
Por otra parte se le preguntó sobre los reclamos de alto voltaje entre funcionarios del Municipio de Ushuaia y del gobierno, en particular del jefe de gabinete Mario Daniele y el ministro de Finanzas Guillermo Fernández, por deudas de coparticipación.
“En el marco extraordinario de pandemia que vivimos, los dirigentes políticos tenemos que estar a la altura de las circunstancias. Este tipo de disputas, por el modo y el contenido que tienen, no las comparto para nada y no aportan ninguna solución a los problemas reales de la gente”, cuestionó.
“La herramienta de la descalificación, el destrato y la falta de respeto al otro no construye nada positivo y no representa ninguna solución. Tengo una mirada contraria a los modos y los tiempos en que se genera esta disputa, tanto por las declaraciones de un lado como del otro. Los vecinos están exigiendo más que nunca que los dirigentes políticos tengamos mesura, prudencia y madurez para sentarnos en una mesa con la documentación respaldatoria correspondiente y dirimir estas cuestiones en un marco de respeto, como corresponde. Esto no se resuelve desde la tribuna. Desde la chicana ni desde la descalificación, tanto de un lado como de otro, porque no tomo partido por ninguno, y esto no aporta nada”, fustigó.
“La agenda política tiene que pasar por hablar de los temas que representen soluciones para la gente. Los temas institucionales como la coparticipación se deben discutir de manera seria, en una mesa donde cada uno vaya con sus documentos. La cuestión de números no es un tema de interpretación y no debe generar este tipo de disputas mediáticas que no aportan nada concreto a los vecinos”, insistió.
Anticipó que “si esto se sigue profundizando en el tiempo de la manera que se está profundizando, con descalificaciones de uno y de otro, creo que la Legislatura va a tener que intervenir, porque ha dado muestras suficientes de madurez política. Somos cinco bloques políticos, nadie tiene mayoría absoluta y se han construido consensos inteligentes en forma reiterada, que se traducen en herramientas legales que ayudan a resolver los problemas de la gente. En este ámbito de madurez política se puede llegar a poner blanco sobre negro en este tema, que es importante pero no prioritario para la vida diaria de los vecinos”, dijo.
“El diálogo político está muy resentido en Ushuaia. Hay reclamos de otro tipo de tenor y contenido de parte de los representantes de la Municipalidad de Río Grande. El tema es importante pero no está en el marco de prioridades por lo menos en términos personales. La descalificación, la injuria, el destrato, no lleva a buen camino ni a una solución. Hay que trabajar con templanza, con madurez política y prudencia en lo que se hace y se dice, y buscar un punto de encuentro institucional, para encauzar el problema en un marco de respeto. No podemos llegar a este absurdo de ver cómo se tiran cosas por la cabeza cuando estamos viviendo una pandemia muy dolorosa, que nos exige otro tipo de comportamiento y de trabajo”, concluyó.