El secretario de Comercio de la provincia, Aníbal Chaparro, sostuvo que se observan altas en el registro que dan la pauta de una leve reactivación del comercio. Se está trabajando para recuperar estadísticas, ante la falta de datos precisos. Con el comercio ilegal que se realiza a través de showrooms todavía no hay acciones concretas por la limitación legal de ingresar a casas particulares. El funcionario cifró expectativas en la ley de góndolas como incentivo a la producción local.
Río Grande.- El secretario de Comercio, Aníbal Chaparro, fue consultado por Radio Universidad 93.5 sobre la labor del área a su cargo, y estimó en “6.500 las actividades comerciales con establecimientos, en toda la provincia. Son los que tenemos registrados y el número va variando. No están incluidas las explotaciones industriales”, aclaró.
“Se está haciendo un trabajo para recuperar la estadística, que es uno de los primeros pasos para tener el dato duro”, dijo.
Respecto del cierre de comercios, no hay cifras precisas tampoco: “Durante 2020 hubo un importante número de comercios que cerraron, sobre todo en el último período del año. Algunos se fueron transformando, incorporaron actividades gastronómicas por ejemplo, y ahora hay un leve aumento de las altas en el registro. Esto implica algún tipo de reactivación”, barajó.
Cabe recordar que el dirigente de UTHGRA Ramón Calderón expuso por este medio una reactivación del sector y recuperación de puestos de trabajo. “Esto coincide con las altas y bajas en nuestro registro. Hay posibilidad de recibir turismo y esto tiene un efecto importante en otros rubros también, como el comercio”, dijo el funcionario.
También mencionó cambios en el área, dado que “recibimos una secretaría con pocos recursos humanos y materiales. Somos autoridad de control de la actividad comercial y teníamos dos inspectores por cada ciudad. Estamos realizando visitas para ver si los comercios están en actividad, si se transformaron o cerraron y no dieron la baja, porque el objetivo es tener el dato de la cantidad de comercios y los rubros”.
“La Secretaría también entiende en defensa del consumidor como autoridad de aplicación y teníamos pensado recomponer el área tanto en recursos humanos como materiales, y desarrollamos algunos programas tendientes a incidir en materia de precios”, apuntó.
Comercio informal por redes sociales
Respecto del reclamo de las cámaras de comercio frente a la competencia desleal de las ventas en domicilios particulares, poco se ha avanzado: “Abordamos esta cuestión con las Cámaras de Comercio de las tres ciudades y es una preocupación común del sector privado y el Estado. Hay comercios denominados showrooms con personas particulares que no están inscriptas en ningún lado y traen mercadería del continente para vender en sus hogares. Muchas veces se trata de personas que se han quedado sin trabajo y pretendemos que se formalicen. La inscripción se tiene que hacer ante AFIP y en AREF de acuerdo al servicio. La Secretaría de Economía Popular tiene un contacto más inmediato y viene desarrollando una actividad tendiente al cumplimiento de las normativas”, informó.
“Es un segmento determinado y la actividad tiene que ver con una salida económica para tener algún ingreso, pero hay denuncias de las cámaras de comercio donde hay inversiones importantes, sobre todo en ropa. Nosotros tenemos un impedimento legal para ingresar a domicilios particulares, donde en general se desarrollan estas actividades. Esa mercadería ingresa del continente y debe haber una acción coordinada con AFIP, la Aduana, los municipios, el gobierno de la provincia y las cámaras, para tener un control más eficaz. Donde hay involucrados alimentos es competencia de las Direcciones de Bromatología de los municipios”, sostuvo.
“Actualmente tenemos diez inspectores en cada ciudad, en Río Grande y Ushuaia, con la capacitación que corresponde. Desde el inicio de la pandemia nos transformamos en concientizadores de la aplicación de los protocolos en los comercios y todavía seguimos cumpliendo esa función. En los últimos recorridos en el rubro gastronómico hemos visto cómo adoptaron medidas sanitarias y se ha adoptado conciencia en todo este tiempo”, destacó.
“Otro eje es el acceso a alimentos, productos de aseo personal, de limpieza del hogar. El gobierno nacional desarrolló el programa Precios Cuidados, que en la provincia se canaliza a través de los supermercados y se orienta a generar referencia de precios. En julio se aumentó la cantidad de productos y se incorporaron nuevas empresas, luego de que se desarticuló el programa de Precios Máximos. Nosotros tratamos de complementar a través de algunos programas locales, como Precios Fueguinos, donde tenemos involucrados a seis proveedores mayoristas locales y tratamos de incorporar a comercios barriales, con precios promocionales”, dijo.
Soberanía alimentaria
En cuanto a la posibilidad de llegar a la soberanía alimentaria, indicó que “tenemos una herramienta nacional importante que es la ley de góndolas, y uno de los objetivos es promover la producción local. Esto no va a tener un efecto inmediato pero obliga a los supermercados a incorporar productos locales. Estamos trabajando con la gente de Producción y Economía Popular, y esto requiere de un acompañamiento del Estado, de créditos, por eso se trabaja de manera articulada. La herramienta está y va a ameritar un trabajo conjunto, el gobierno ya está haciendo ese trabajo, y sería interesante un trabajo articulado con los municipios. Soy optimista porque el gobierno nacional, el provincial y los municipios tienen la misma mirada respecto de la producción argentina y la producción local, a diferencia del anterior”, concluyó.