Un grupo de desocupados se manifestó ayer por la mañana, frente a la sede de la UOCRA. Realizaron una serie de imputaciones contra el secretario General del gremio, Julio Ramírez. Lo acusaban de no permitir listas de oposición, de connivencia con las empresas para pagar horas en negro y de tener a familiares como integrantes de la conducción gremial.
Río Grande.- Los manifestantes estaban encabezados por Damián Rivas, una de las personas que impulsaba denuncias -luego desestimadas por la justicia- contra el gobernador Gustavo Melella por supuesto acoso. Esta persona dijo ser “presidente de la Agrupación Nuevo Horizonte de Desocupados, nosotros tenemos la agrupación donde estamos todos los desocupados. En mi caso me despidieron hace dos meses, por querer formar la agrupación”, aseguró.
Luego indicó que “en estos días el señor Julio Ramírez salió a decir que no le interesan los desocupados, yo me pregunto cómo que no le interesan si el representa al gremio de la construcción; entonces tiene que preocuparse por todos los desocupados y el trabajo de él es tratar de ubicarlos en las obras que hay”, señaló Rivas.
Dijo que, en el gremio, se suspendieron “las elecciones de diciembre pasado y el señor Ramírez ahora no se quiere ir, quiere poner al hijo, a los familiares que están ahí metidos, porque quiere seguir con su mandato y no es así. A Ramírez nadie lo eligió, él entró a la fuerza en el gremio y se mantuvo durante 12 años; en ese tiempo creció económicamente de una manera impresionante a costillas nuestras”, remarcó.
Manifestó que, a los trabajadores, les “pagan cuatro horas en negro y cuatro en blanco, ese negocio hace con las empresas. No nos pagan las horas extras, los feriados, prácticamente nos tienen abandonados, sin ropa ni elementos de protección”, repasó finalmente Damián Rivas.