Luego de los reclamos de los gobernadores de provincias cordilleranas que brotaron esta semana durante la visita a la Argentina del presidente chileno Gabriel Boric, el ministro del Interior Eduardo Wado de Pedro confirmó que el país trasandino reabrirá sus fronteras a partir del 1° de mayo.
Río Grande.- “Me comuniqué con mi par chilena y me confirmó que a partir del 1º de mayo vuelven a abrir todos los pasos terrestres que unen Argentina y Chile. Acordamos también mantener una reunión por zoom el lunes próximo para seguir trabajando en una agenda común”, señaló el ministro Wado de Pedro a través de sus redes sociales. En el posteo adjuntó un comunicado oficial del Gobierno de Chile en el que se indica que “se han desarrollado nuevas medidas para el control de fronteras nacionales que permitirán abrir la totalidad de los pasos fronterizos terrestres a partir del 1° de mayo”. Las exigencias para el ingreso a Chile serán: declaración obligatoria de viajeros, exigencia de vacunación y, eventualmente, una prueba aleatoria PCR.
Si bien el Gobierno nacional anunció días atrás la normalización de todos los pasos fronterizos del país con la apertura de los 237 puntos de ingreso y egreso del país, en Chile se mantienen las restricciones pandémicas. Y eso generó pedidos de los mandatarios de incluir el tema en la agenda de la gira de Boric por Buenos Aires. De hecho, el jefe de Estado chileno se vio en la cena en el Centro Cultural Kirchner con los mandatarios de Mendoza, Rodolfo Suarez; de San Juan, Sergio Uñac; de La Rioja, Ricardo Quintela; y de Catamarca, Raúl Jalil.
La apertura de los pasos terrestres sobrevoló la velada y allí Boric se comprometió a agilizar las gestiones para flexibilizar los ingresos, así como para fomentar un mayor vínculo comercial entre ambos lados de la Cordillera.
“Estuvimos de acuerdo en la necesidad de agilizar el tránsito entre ambos países en el paso internacional, ponderando la llegada del próximo invierno”, dijo el mendocino Suarez tras el encuentro. En distritos como Neuquén y Río Negro, además, se multiplican las quejas de los ciudadanos chilenos que permanecen en la Argentina ante la imposibilidad de regresar a su país por las duras restricciones que imperan aún en su país de origen.