Este 8 de marzo, precisamente el Día Internacional de la Mujer, cumplió un año el comedor y merendero sostenido por Marta Martínez, una guerrera que tiene 13 hijos y le dedica su tiempo a la asistencia de 138 familias. Contó que los días martes, jueves y sábados “muchos niños, niñas y adultos; familias completas, toman hasta dos colectivos para poder llegar a buscar comida”. Relató las necesidades que tienen y pidió colaboración para adquirir “una olla más grande”, para dar respuesta a la creciente demanda que tienen.
Río Grande – Marta Martínez está al frente del comedor y merendero que funciona en Roldan 1343, de la ciudad de Río Grande. El lugar es conocido como “Los trece ositos” y ese es precisamente el número de hijos que tiene Marta, la mujer que sostiene con mucho esfuerzo ese lugar al cual asiste un gran número de familias para buscar sustento y contención.
Los días martes, jueves y sábados, al lugar concurren alrededor de 138 familias para buscar los alimentos que Marta, junto con un grupo de vecinas que colaboran con ella, preparan para entregar a quienes los necesitan.
Todo fue gestionado por ellas y cuentan con algún aporte de alimentos por parte del Gobierno de la provincia y el Municipio. A veces algunos comerciantes las asisten con mercadería, pero siguen necesitando ayuda por ejemplo para poder adquirir una olla de mayores dimensiones en la cual poder cocinar la gran cantidad de alimentos que exige la creciente demanda.
Marta Martínez cuenta que “muchos niños, niñas y adultos; familias completas, toman hasta dos colectivos para poder llegar a buscar comida”. Luego señaló que necesitan “algunas donaciones para poder funcionar de mejor manera, como ser una olla más grande y algunas cosas para las niñas y los niños, que sirvan como entretenimiento y para realizar actividades”.
Vale mencionar que, durante enero y febrero, también estuvieron recolectando útiles escolares para poder entregar a las familias que tuvieron dificultades para hacer frente a los gastos relacionados con el inicio del ciclo lectivo.
Para concluir, Marta agradeció “a quienes concurren al comedor y merendero, como así también a quienes nos dan una mano con las donaciones. Esto se sostiene con muchísimo esfuerzo, es un lugar humilde y con muchas necesidades, pero sabemos que somos un gran acompañamiento para muchas familias que atraviesan cotidianamente grandes necesidades”, finalizó la mujer.