El Senador Nacional de Juntos por el Cambio Pablo Daniel Blanco presentará un proyecto por el que se “repudian los hechos de violencia política acaecidos en el día de la fecha (20/6/23) en la ciudad de San Salvador de Jujuy cuya finalidad es exclusivamente la de desestabilizar al gobierno provincial y condicionar el funcionamiento institucional de la provincia”.
Río Grande.- El proyecto además “condena a la actitud del Presidente de la Nación Argentina, la Vicepresidente y el Ministro del Interior quienes, en vez de bregar por la paz y el pronto restablecimiento del orden, aprobaron y alentaron desde sus redes sociales el desarrollo de estos hechos vandálicos”.
La iniciativa es acompañada por los senadores Luis Naidenoff, Alfredo Cornejo, Eduardo Vischi, Daniel Kroneberger, Flavio Fama, María Belén Tapia, Roberto Basualdo, Gabriela Valenzuela, Víctor Zimmermann, Edith Terenzi, Alfredo De Ángeli, Julio Martínez, Stella Maris Olalla, Ignacio Torres, Mariana Juri, Beatriz Ávila, Mario Fiad y Silvia del Rosario Giacoppo.
Según Blanco y los senadores que lo acompañan, “los mafiosos que se resisten al avance de las instituciones democráticas han decidido una vez más optar por el camino de las piedras y la violencia. Quienes formaron parte del estado paralelo en la Provincia de Jujuy han desplegado un plan sistemático que pretende tomar por asalto las instituciones y el poder. Justo en el día de la jura de la nueva Constitución jujeña este grupo de violentos organizados que responden a intereses incompatibles con la democracia dan ejemplo de aquello que el país no tolera más”.
“Estos grupos minoritarios, de manera insólita y completamente inaceptable, han recibido el apoyo del Presidente de la Nación, la Vicepresidente y el Ministro del Interior. Estos apoyos son una provocación inadmisible de quienes se dicen democráticos: son democráticos cuando el gobierno les pertenece y se alinea con sus intereses, caso contrario no merece ser considerado así y se lo estigmatiza como antidemocrático y represor”.
Para los senadores “es una vergüenza monumental que las más altas magistraturas del país se confabulen de este modo en apoyo a una fracción de mafiosos que, hasta hace unos años, conformaban un estado paralelo en Jujuy y gobernaban a la provincia desde las sombras y a su antojo. A 40 años de la recuperación democrática y en el Día de la Bandera, que debe unirnos a todos, resulta inadmisible que desde la propia cima del poder se permita que se atente contra las instituciones democráticas de una provincia argentina. Flaco favor al federalismo le hace el Poder Ejecutivo al alentar de manera directa e irresponsable estas acciones violentas”.
“Repudiamos con máxima energía la complicidad existente entre estos grupos mafiosos organizados y el gobierno nacional que los incita y aplaude”, finalizó Blanco junto al resto de sus pares.