Finalmente el Gobierno nacional dio marcha atrás con la instalación del polémico radar de una empresa inglesa en Tierra del Fuego. Sugestivamente fue tras el pedido de informes presentado por el senador nacional de Juntos por el Cambio Pablo Daniel Blanco.
Río Grande.- En un movimiento sorpresivo, la Subsecretaría de Telecomunicaciones y Conectividad ha anunciado la suspensión de la Disposición N° 8/22, revocando así la autorización otorgada a la empresa LEOLABS ARGENTINA S.R.L para instalar y operar una Estación Terrena en Banda S, destinada al rastreo y monitoreo de objetos en el ambiente de órbita baja (LEO).
La decisión de dar marcha atrás en la autorización se produce después de una reevaluación exhaustiva por parte del gobierno, que reconoce la sensibilidad y la importancia estratégica de las cuestiones relacionadas con la Defensa Nacional y el control del espacio aéreo en un área geopolíticamente clave.
La autorización inicial había sido otorgada con carácter precario, pero el gobierno ha tomado la determinación de anularla en aras de salvaguardar la soberanía nacional y garantizar un adecuado control y supervisión del espacio aéreo. Este reconocimiento de error demuestra la importancia de evitar improvisaciones y precariedades en asuntos de tanta relevancia para el país.
La Estación Terrena en Banda S permitiría el rastreo y monitoreo de objetos en órbita baja, lo cual podría tener implicaciones en la seguridad nacional y en la capacidad del Estado para controlar y proteger su espacio aéreo. Ante la complejidad y los riesgos asociados con estas tecnologías, resulta fundamental asegurar una autorización adecuada y un seguimiento riguroso de las empresas involucradas.
La decisión de suspender los efectos de la autorización fue respaldada por una Disposición Oficial emitida por el Gobierno, que deja sin efecto la autorización anteriormente concedida. Esto demuestra una voluntad de rectificar los errores y tomar medidas concretas para salvaguardar los intereses nacionales en un ámbito tan sensible.
En conclusión, la suspensión de la autorización para la Estación Terrena en Banda S evidencia la importancia de reconocer y corregir los errores en cuestiones relacionadas con la Defensa Nacional y el control del espacio aéreo. En un área geopolíticamente clave, como es la supervisión de objetos en órbita baja, no se pueden permitir improvisaciones ni precariedades que puedan comprometer la soberanía y la seguridad del país.
Cabe destacar que esta marcha atrás se da luego del pedido de informes que presentara el senador nacional de Juntos por el Cambio, Pablo Daniel Blanco.